Mi capitán

Capítulo 1: Conversación.

Disclaimer: One piece ni mis personajes me pertenecen.

Eran aproximadamente las 2 de la mañana en las locas aguas del Nuevo Mundo. Por algún lugar de este extenso mar se encontraba navegando un barco de piratas, un barco de piratas dónde se encontraba una de las bandas más buscadas y más peligrosas de todo el Grand Line: Los mugiwara. Todo parecía tranquilo dentro del Thousand Sunny. Estaban muy cansados por la fiesta que habían tenido luego de derrotar al Yonkou Kaido y se habían quedado dormidos muy medio de toda esa tranquilidad se encontraba un chico que portaba un sombrero de paja en la cabeza, sentado en la testa de un león situado en la parte delantera del barco y que tanto caracterizaba a este.

Él, como no podía ser de otra manera, era el capitán de los sombrero de paja mugiwara no Luffy. Si ya de por sí era extraño que sea el único que esté despierto a esa hora, la situación se volvía todavía más atípica cuando te fijabas en la expresión de seriedad que tenía en el rostro. Pocas veces se le podía ver así, quizás solo cuando está peleando contra un fuerte enemigo. Luego de un rato en el que no movió ni un músculo y solo se había limitado a ver como subía y bajaba la marea, se puso repentinamente de pie y pegó un salto a la parte central del barco, procurando no hacer demasiado ruido para no despertar a ningún miembro de la tripulación. Acto seguido empezó a andar lentamente en dirección a una pequeña mesa, lugar donde uno de sus nakamas se encontraba durmiendo plácidamente. Al llegar al sitio, se agachó y se dispuso a dar suaves toques con la mano en su torso, con la intención de hacer que este se despertara.

—Oi Zoro, despierta.

El capitán de los mugiwara estaba intentado hacer que el espadachín de su banda, Roronoa Zoro, despertara de ese profundo sueño que estaba teniendo. Como era de esperarse, no iba a ser tarea sencilla hacer que el chico de pelo verde volviera en sí. Se había quedado dormido con una botella de Sake en la mano y por cómo sonaban sus ronquidos, no iba a responder fácilmente.

—Bien, en ese caso… -Luffy le arrebató la botella de sake que tenía bien agarrada en la mano y se acercó a su oído poco a poco.-

—Oe Zoro, alguien te ha robado el sake.

En ese instante un escalofrío recorrió el cuerpo del espadachín, haciendo que este abriera los ojos rápidamente y comenzara a mirar a todos lados.

—Q-Quién me ha robado el sake…-Fue lo primero que dijo luego de despertar. Al notar que todavía era de noche y que solo su capitán se encontraba enfrente de él, supo que algo extraño estaba pasando.-

—Shishishi Nunca cambiarás, Zoro. Tengo yo tu bebida, no te preocupes.

–¿Luffy? ¿Que hora es? -Preguntó Zoro mientras se rascaba el pelo y bostezaba.-

—Pues… no lo sé, pero están todos durmiendo. He sido yo quien te ha despertado…

—Oh, ya veo… ¿Y por qué lo has hecho si puede saberse?

—Verás… ¿Tienes un momento?

El capitán empezó a andar a paso lento hacia la parte frontal del barco, esperando que el de pelo verde se incorporara nuevamente y lo siguiera. Zoro, sin entender mucho lo que estaba haciendo el contrario, no rechistó y luego de ponerse de pie, siguió el camino que su capitán había trazado.

—Vamos Zoro, sube. -Le invitó el pelinegro, quién hace un instante se había sentado nuevamente en la cabeza del león.-

—S-si…

El espadachín, algo confuso, pegó un salto y se puso de pie sobre la testa del felino. No entendía muy bien que estaba pasando, no era muy común que Luffy esté despierto a esa hora y tampoco sabía qué era lo que tendría que tratar con él. También se había percatado de la seriedad que tenía su capitán, sin duda eso era lo que más extraño le parecía. Por algún motivo el ambiente era extremadamente tenso e incómodo, quizás esto era provocado por el aura de seriedad que rodeaba al azabache. Ambos se quedaron contemplando el mar y el cielo lleno de estrellas por unos minutos, sin hacer absolutamente nada más. Zoro estaba cada vez más confundido y contrariado, Se estaba empezado a cansar de que nada ocurra.

—Zoro, ¿Puedo hacerte una pregunta?

Y al fin Luffy rompió el silencio. Su expresión pasó de ser seria y reflexiva a ser a una que reflejaba tranquilidad, nostalgia y… ¿Tristeza? El espadachín no sabía muy bien cómo describir la cara de su capitán en ese momento. Pocas veces le había visto así, sin duda era una situación de lo más singular.

—Qué quieres.

Zoro tampoco es que titubeara ante la tensa situación, sabía mantenerse firme y serio ante esas circunstancias. No por nada era por muchos considerado el vice-capitán de la banda.

—Este sitio es genial, ¿No crees? -Expresó el azabache refiriéndose al lugar dónde estaban situados actualmente. Desde que dejaron el Merry y cogieron el Thousand Sunny, esa cabeza de león había sido su sitio predilecto.-

—Supongo que no está mal… Pero dudo que sea por eso por lo que me has despertado.

—Shishishi eres muy listo Zoro -Rió el pelinegro, algo forzado.—

—Ve al grano Luffy, quiero dormir.

El espadachín no había cambiado su seriedad en ningún momento. Él de por sí ya era alguien serio, pero era consciente de que la situación no era para hacer bromas. En ese momento Luffy se colocó su sombrero y fijó su mirada en un punto fijo del mar. Aquella sonrisa forzada se había disipado y una sonrisa totalmente distinta había hecho aparición en su rostro. Ésta sólo expresaba tristeza y melancolía, al igual que hacía toda la cara del azabache.

—Tú… ¿Nunca has pensado en ser el capitán?

Esa pregunta descolocó por completo al espadachín. Se esperaba cualquier cosa menos eso, Nunca se imaginaría que su capitán, Monkey D Luffy, le preguntaría algo así. Por su parte Luffy no se había inmutado al hacer la pregunta, él seguía mirando a un punto fijo en el mar, pareciera que su vida dependía de mirar a aquel punto.

—¿Comer tanta carne te ha afectado al cerebro? Yo soy el espadachín de tu banda y tú eres mi capitán, Luffy. No pienso aceptar ser un pirata con algo que no sea eso.

Zanjó Zoro. Luffy seguía a lo suyo, sin mover ni un músculo y mirando al mar. El de pelo verde esperó para ver una reacción por parte de su capitán, quería ver que iba a decir luego de la respuesta que él le había dado.

Luego de que pasaran unos segundos, Luffy pegó un suspiro y volteó su cabeza para mirar directamente a los ojos de Zoro. Ahora su semblante era mucho más tranquilo, tenía una enorme sonrisa dibujada en el rostro y su expresión ya era algo que se asemejaba más a lo que era normalmente el capitán.—

—No lo has entendido, Zoro. Yo...

Me estoy muriendo.

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Y hasta aquí el primer capítulo, espero que les haya gustado. Poco a poco irá viniendo el drama y más cosas, paciencia. Dejad vuestras rewiews si os ha gustado, estoy abierto a sugerencias y demás. PD: no me gusta hacer los capítulos muy largos, aunque supongo que serán algo mas largos que este, ya que es el primero.

Sin nada más que añadir, hasta la próxima.