Ya era hora de que dejara caer algo de mi última serie de culto. Casi un año adorando Héroes sin escribir nada del fandom, no lo explico.
Personajes/Parejas: Mohinder, POV. MohinderEden implícito.
Spoilers: Ninguno. V1, principios.
Advertencias: Drabble y posiblemente OOC. ¿Qué¿A que no habrá reviews para corregirme?
Pero este es algo especial para mí. Es especial porque fue borrado por completo y re-escrito durante este fin de semana, mientras mi abuelo estaba en el hospital.
Objetivo
Cuando llueve en Nueva York, Mohinder sale a la calle. Antes, abre por completo las ventanas del apartamento para que entre el viento y el agua a refrescarlo, a que vuele los papeles cuidadosamente archivados y a que levante el polvo. Luego abandona el caótico desorden ordenado del piso y sale a las aceras brillantes como plata.
A Mohinder le gusta sentir el agua en su cuerpo, deshacerse sobre el pavimento. Es entonces cuando separa los brazos y extiende los dedos todo lo que puede, recordando que cuando era niño hacía lo mismo.
-¡Mohinder, Mohinder¡Vas a enfermar!
Las tormentas en la India son majestuosas. Los truenos rugen amenazando con robarte el alma, los relámpagos encienden el cielo. La noche se silencia para asistir a esa fiesta de la Naturaleza y el aire huele a puro, a limpio, a todo lo bueno que la lluvia nos devuelve. Madre siempre le regañaba por permanecer tanto tiempo bajo la lluvia. Tatos años después, la lluvia ahora le trae a Mohinder retazos de ellos juntos reunidos con los niños en el patio. Observando, entre el miedo y la fascinación, la tormenta sobre ellos. Descubre que echa de menos a su padre, con todo lo malo que tuviera. Y que sabes que ha acabado tu niñez cuando comprendes que lo único inamovible y eterno en la vida, es la familia. Que su recuerdo siempre te perseguirá y te hará llorar las noches de invierno. Y que a pesar de todo, es de esas pocas cosas por las que merece la pena morir, matar.
En Nueva York es distinto. Siempre hay ruido, siempre, y la tormenta en lugar de silenciarlo se mezcla en sus gritos difusos y sucios. En Nueva York, cuando llueve, Mohinder recuerda que ya no tiene una familia. Nadie quien mate por él ni nadie por quien morir.
Así que cierra los ojos, que el agua le riegue la cara, y "siente, Mohinder, siente ahora mientras puedas, siente antes de que tu alma vuelva adentro y tu mente esté fuera. Siente ahora que puedes"
Un cuerpo pequeño se sitúa a su lado. Va en manga corta y tirita. Mohinder abre los ojos, empapados de lágrimas y de lluvia, cuando nota un par de finos brazos abrazarle por la cintura, una cabeza pegarse a su pecho, una mano menuda y tibia agarrar una de las propias. Y:
-Mohinder, sube. Vas a enfermar. – susurra Eden.
Y entonces Mohinder regresa de los sueños, se recuerda que hay una misión que cumplir, que despierte porque, mierda, mierda, mierda, Mohinder, tu padre ha sido asesinado, y sigue a Eden escaleras arriba.
Cuando llueve en Nueva York, el agua le ahoga.
