Titulo: Just Be Friends
Escrito Por: Lissette Moccia [a.k.a Lizeth, MissMegumi, MissKatterine, Katterine, etc.]
Summary: Rukia nunca había visto a Ichigo como algo más que un amigo, hasta que él le confesó lo tranquilo que se sentía con ella, ahí comenzó todo.
Aclaraciones: Este es un AU, además de que esta historia ya la había escrito hace como un año o más, pero no tenía muy bien mi narración y ahora que la he leído de nuevo me di cuenta de que era y aun soy una novata al escribir.
Just Be Friends
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Capitulo 1: La confesión.
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Verano, la época del año en las cuales es común ver en las calles a chicas en ropas diminutas, en ocasiones hasta sudar un poco, una hermosa estación del año donde es posible disfrutar en varias ocasiones una cerveza fría. En uno de esos días no era extraño visualizar a grupos de jóvenes divirtiéndose sanamente. Entre esos jóvenes se encontraban cuatro amigos, que parecían estar pasándola bien durante ese día y ¿cómo no si se estaban burlando de uno de ellos?
— Esto sí que ha sido una sorpresa, Kisuke —un hombre alto y de cuerpo bien tonificado que poseía un cabello color anaranjado que hacía un espectacular contraste con los rayos del sol se burlaba de uno de sus amigos, entre sonrisas burlonas dejaba pasar por su garganta un poco de cerveza— Has caído más rápido de lo que imaginaba, seguramente Yoruichi te sentencio al ver qué aceptaste tal apuesta, ya me la imagino obligándote a comer de su comida con lo mal que cocina.
— Tal vez fue así —bromeo el hombre de cabello largo y despeinado de color rubio cenizo, quién es el amigo del cual se burlaban; él sonreía al ver que sus amigos se veían un poco cansados por la dichosa apuesta, al menos él podría estar contento de no vivir los próximos meses en tal estado, así que no importaba que tanto se burlaran de él— Pero aun así no me arrepiento nada de haber elegido eso, ella es la mujer de mis sueños así que si fuera por Yoruichi-san, perdería todo lo que poseo. Algún día me entenderás, Ichigo.
— Eso jamás, el amor no está hecho para mí.
— Eso crees tú, pero a todos no tocará algún día.
— Entonces, la competencia queda entre nosotros tres —dijo Ichigo ignorando tal comentario y viendo a sus otros dos amigos que seguían tomando de su cerveza fría, al menos tenía una competencia tan fácil de hacer caer— Nunca creí tener tan fácil ese dinero.
— No te hagas ilusiones —el hombre de cabello rojo le recalcaba con seguridad a Ichigo, él no estaría dispuesto a perder contra el pelinaranja, no importaba el dinero, la verdad es que más que eso era su propio orgullo el que estaban defendiendo— Que Kisuke haya caído no quiere decir que nosotros lo hagamos, ya va siendo hora de que te des cuenta.
— Renji tiene razón —confirmo el otro, él tenía el cabello oscuro y tenía puesto unos lentes que lo hacía lucir más interesante que los demás, su nombre es Ishida Uryu, un chico inteligente de apariencia y con algo más de clase que sus otros tres amigos— esto aun no está decidido.
Los cuatro amigos estaban ahí, bebiendo cervezas y riéndose por ahora del comprometido de Kisuke Urahara, quién había optado por seguir con su relación al lado de Yoruichi, su novia, dejando a un lado la apuesta que hicieron días antes, poco después de la muerte del abuelo de Ichigo quién llego a apreciar a los otros tres jóvenes como a sus propios nietos, tan bien lo conocían que no se sorprendieron al saber que en su testamento puso una clausula para poder poseer todo su dinero, la clausula es: dejar de salir con mujeres durante el periodo de tres meses. Ese quizás no suene a un gran problema, pero esta vez hablamos de Ichigo Kurosaki, Renji Abarai, Kisuke Urahara y Uryu Ishida, estos cuatro era conocidos por ser unos mujeriegos de hueso colorado, así que esa apuesta era una maldición.
— Ese maldito viejo —se quejó Ichigo— Hacerme esto, a mí que soy su nieto, debería ser yo quién se quedará con todo su dinero.
— Vamos, no te quejes —le decía Urahara— Si el viejo siempre dijo que nos veía a los cuatro como si fuéramos de su sangre, además ¿qué esto no parece divertido?
— ¿Divertido?, —gritaba Ishida, estaba tan sofocado por el calor y su falta de actividad sexual que le daba lo mismo que media ciudad lo escuchara, a pesar de ser alguien de un estatus social alto, no era como si su padre le diera el dinero que él quisiera cuando lo pidiera, Ryuken Ishida, su padre, tenía el lema de "si quieres dinero, entonces trabaja", así que aun siendo el hijo del reconocido dueño de los "Hospitales Ishida" no podía tener lujos tan grandes— ¿A esto le llamas divertido? Evitar a esas mujeres que cada vez que las veo me dicen con su mirada 'tómame', esto no es divertido. Si no fuera por el dinero…y mi maldito orgullo.
— Justamente por eso lo veo divertido —inquirió Urahara; claro que para él eso era divertido, haber renunciado al dinero era una de las mejores decisiones que había tomado en su vida— Verlos así de desesperados es tan entretenido.
— En serio que esto debe ser tan divertido para ti —le dijo Renji— Al menos tú ya éstas libre de esto.
— Si.
— No duraste ni un mes, por eso das pena y te hacías llamar mujeriego.
— Nunca antes he estado tan feliz de haber perdido una apuesta como ahora, soy el hombre más feliz.
— ¿Y cómo no estarlo si estas casi a punto de casarte con Yoruichi?, —le canturrio Ichigo— Si yo tuviera a una mujer como ella, tan hermosa y con ese cuerpo, obvio que sería muy feliz. No sé qué es lo que ella vio en un tipo como tú.
— Así es el amor.
— ¿Amor?, la cosa más estúpida jamás creada —dijo— Yo jamás me enamoraré.
— Ya te veré —Kisuke rió burlonamente, esto sería lo peor que ellos podrían escuchar—, además, al menos yo tengo relaciones sexuales constantemente.
— ¡Demonios! —gruño Renji—. Estamos al tanto de eso, así que ¿puedes dejar de hablar sobre ello a cada momento?
— Otro está a punto de caer —dijo Ishida.
— Si, Renji ya va cediendo —se burlo Ichigo—. Entonces seremos solo tú y yo, Ishida.
— No te la dejaré tan fácil.
Renji e Ishida comenzaron a pelear, mientras que Urahara se burlaba de ellos y luego de unos momentos su mirada quedo puesta sobre Ichigo, quién no parecía estar tan disgustado con la apuesta o al menos eso aparentaba, aun siendo el más mujeriego de todos ellos, Urahara se dio cuenta que no dejaba de estar al pendiente de su reloj, quizás él había encontrado a otra muchachita con la cual divertirse.
— ¿Tienes algún problema? —pregunto Urahara—. No has dejado de ver tú reloj, ¿una cita?
— Para nada, solo tengo que irme —dijo Ichigo siguió viendo su reloj, al principio a todos les extraño ese comportamiento en él, normalmente no está tan reacio— Es que quede de verme con Kia y se me está haciendo tarde.
Oh, ahí estaba el porqué. De todos los lugares del mundo, es al Taller de Pintura de su amiga Rukia Kuchiki al cual asistía diariamente, al principio ellos dudaran que fuera solo a visitarla, llegaron a creer que estaba viéndola para…pues minimizar sus deseos, ellos siempre habían sido cercanos que se lograba malentender su relación, a Rukia realmente no le importaba si creían eso de ellos, pero Ichigo siempre negaba con su frase "somos solo amigos" o "Kia es diferente a las demás mujeres, nunca la veré como una de ellas", esto último nunca lo había dicho enfrente de su amiga, aunque él suponía que a Rukia tampoco le importaría.
— ¿Con Rukia?, —le preguntó Renji— La saludas de mi parte.
— Y también de la mía —dijo Ishida.
— Ah, le dices que espero que pronto termine el cuadro que le encargue —le pidió Urahara.
— No soy su estúpido mandadero —se quejaba el pelinaranja.
— Solo díselo —le ordeno Urahara.
— Si, si.
Era un día muy caluroso, días como esos amaba Ichigo aunque ahora sin mujeres era un suplicio. No tenía nada que hacer sin ellas, solo le quedaba ir a ver a su amiga de la infancia, Kuchiki Rukia. Su taller de pintura era como un oasis para él, aun en esos días sin mujeres, una vez que entraba a ese taller y veía a Rukia se sentía tan tranquilo. Donde estaba Rukia era el único lugar que le hacía sentirse seguro. Gracias a Dios la conocía, ella era en la que podía confiar en esos días de abstinencia porque ella era Rukia Kuchiki, su mejor amiga, y era la única mujer a la cual nunca ha visto como eso…como una mujer. Siempre que estaba con ella todo era más sencillo que con las mujeres bulliciosas que solían salir con él, Rukia no era como ellas, así que ir a verla se volvió habitual ese mes.
Sin embargo, no era ningún secreto que a Ichigo le gustaban las mujeres, cada cosa que ellas hacían siempre conseguían excitarlo, su olor, sus acciones y sobre todo hacer el amor con ellas, además él…
…jamás había sentido lo que Urahara solía llamar "esa brisa del enamoramiento", lo que se siente cuando ves a una mujer y dices, ella es la única para mí.
De todos modos, Ichigo no buscaba a alguien así.
— Hola, Kia —saludaba Ichigo, ese apodo era el que solo él podía decirle, Rukia nunca dejaba que nadie más la llamará de una manera tan infantil— Lamento la tardanza, por cierto Ishida y Renji te mandan saludos, y Urahara te recuerda que te ha encargado una pintura, ¿qué piensan que soy un mensajero?
Rukia sonrió ante las quejas de su amigo.
— Oh, casi término esa pintura, Urahara no debería recordármelo a cada rato si ya sabe que soy puntual, una vez lo termine iré a entregárselo personalmente —Rukia se levanto del suelo donde estaba pintando un cuadro, estaba llena de tantos colores en su rostro y en la ropa que traía puesta que no se notaba su verdadero color de piel; al chocar sus ojos con lo de Ichigo soltó un suspiro, siempre que él iba con ella traía el mismo rostro— Traes una cara de los mil demonios, Ichigo.
— Oh, ¿en serio?
— Si, y déjame adivino, ¿es por culpa de esa apuesta?
El cuerpo de Ichigo se dejo caer sobre un sofá y oculto su cara en un cojín. Rukia había acertado. Obviamente si no se tratara de Rukia él ni siquiera le habría contado sobre ello.
— Si, esta apuesta me está matando, no creo soportar más de dos meses…
— ¿Por qué aceptaste tal estupidez?
— Por orgullo, Kia, por orgullo.
— Eres un estúpido, Ichigo —la risa con que dijo eso, trajo a Ichigo de nuevo al mundo—, ¡vamos! No seas aguafiestas, tú y yo nos divertiremos mucho y así no pensarás en sexo ni siquiera en mujeres.
— No creo poder…
— Si vas a venir todos los días aquí a quejarte no debiste haber aceptado, te lo dije antes.
— Vamos, ¿en serio te molesta que venga aquí?
— No te dije eso, solo que verte todos los días con esa cara se ha vuelto tan rutinario que cansa, si no puedes con la apuesta entonces solo desiste.
— Eso jamás, no es solo el dinero, mi orgullo está en juego —Ichigo se hundía mas y mas en el cojín— Además perder ante Renji e Ishida, eso sería una gran tortura.
— Por eso eres más que un estúpido.
— Soy un hombre Kia, tengo orgullo y amo el dinero, pero también amo a las mujeres, soy tan débil.
Rukia suspiro.
— Si intentas alejarte de las mujeres, ¿qué es lo que haces aquí?, —pregunto, no esperaba respuesta de parte del chico, la verdad por lo que Rukia conocía a Ichigo siempre había creído que la veía como solo una amiga— Soy una chica, ¿sabías?
— Porque este es el único lugar en el que me siento seguro, tú eres diferente a las mujeres con las que yo trato, eres más como un amigo pintor, un muy buen amigo pintor. Si, solo un amigo, somos amigos desde niños Kia, no puedo verte como una mujer, no podría verte como una mujer ni ahora ni nunca, eres diferente.
— Vaya —al irse hundiendo en el cojín Ichigo no noto la mirada de odio que apareció en el rostro de su amiga— Somos amigos, ¿verdad?
— Exacto.
Tú, imbécil, pensó Rukia.
— Tengo sed —dijo él levantándose y yendo hacía un pequeño refrigerador, busco hasta encontrar cerveza, eso ya se había convertido en un vicio. Es lo justo, como un intercambio, cerveza por mujeres— ¿Quieres algo? Tú no bebes, ¿un refresco?
— No, estoy bien.
Esto era el colmo, Rukia siempre soporto la actitud que tenía Ichigo acerca de las mujeres, pero jamás aceptaría que alguien como Ichigo le dijera algo como: no te veré como una mujer. Ella era una mujer, no importaba con que ojos la vieran, ella seguía siendo una mujer incluso bajo esa ropa sucia y esa cara pintada. Ella era una mujer.
Has firmado tu sentencia de muerte, Kurosaki Ichigo.
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Nota de la escritora:
He reescrito esta historia, así que la pondré en FF, espero sea de su completo agrado. Gracias a todos los lectores.
