LOS PERSONAJES SON MÍOS, LA TRAMA ES MÍA, NO PERMITO LA COPIA DE NINGUNO, RESPETEN LA CREATIVIDAD, Y SIN MÁS A LEER!

Summary: Andy, una chica tímida e introvertida con un pasado tortuoso, Drey, un chico divertido y aventurero, audaz y valiente; viviendo en una misma realidad, un día sus destinos colisionan, ¿qué pasará con la vida que conocen?

Capítulo 1: Existiendo, pero ¿viviendo?

Otra mañana más, otro día más, otro segundo más, la misma cama, la misma luz, el mismo despertar, la misma sensación de vacío….

Sé que soy una pesimista, pero a veces pienso "Ya para que", estoy tan confundida y frustrada que todo lo que hago o digo me hace caer profundo en esta espiral de emociones encontradas y pensamientos extraños.

Primer día de escuela, ¡diablos! Mi primer día como estudiante de doceavo grado, creo que esto podría ser peor, como mis hermanos, que entran al noveno grado, esos pequeños siempre me alegran la vida.

Si es que esto es una vida.

Después de mi monologo interno me levanto al fin de mi enorme y solitaria cama para darme un baño y arreglarme. Las duchas siempre me relajan, creo que dejare que el agua se lleve mis penas.

Mente tonta, nada puede llevarse esto, ¡ENFRENTALO!

Salí del enorme cuarto de baño con uno o dos tropezones, gracias a mi enorme destreza heredada de ÉL.

No empieces con eso, sabes cómo terminó la última vez.

Me estremecí por el pensamiento. Mejor me dedicaré a otra cosa, como por ejemplo ¡vestirme!, ¡Demonios, es tarde, tengo que correr!

Me eche un último vistazo en el espejo, no me puedo quejar, la verdad mi cara no da para más, mi cabello negro rizado y mi nada atractivo perfil, sin mencionar mis enormes lentes cuadrados, no ayudan mucho, solo espero no caer al suelo y romperme lo poco que me queda de nariz.

Corrí bajando las escaleras tratando de no tropezar y caer cuando un olor a pan me pego en la cara, mi estómago gruñó y yo también.

Mely estaba en la cocina preparando el desayuno. Olía a huevos y jugo, ¡COMO ADORO A MI NANA! Pero por más que quisiera degustar sus platillos iba retrasada.

-¡Buenos días!, me voy que se me hace tarde- le dije a Mely, sé que fue poco cortés pero tuve que salir corriendo, para encontrarme con mis hermanos en la puerta señalando el auto.

-¡¿Se puede saber por qué te tardaste tanto?!- casi quedo sorda por la aguda voz de mi hermana.

-Calma Iris, al menos llego en una pieza- se burló mi "amable" hermano

-Oh cállense y vámonos- dije cortándolos y subiéndome al asiento del conductor.

Puse mi iPod en el estéreo de mi hermoso y amado auto y subí el volumen, mis hermanos de inmediato comenzaron a quejarse, pero los ignore, nadie los obliga a venir en MI auto, con MI música y CONMIGO.

Ellos iban platicando de lo emocionados que estaban y que era una nueva etapa de sus vidas y blah, blah, blah, yo simplemente conduje hacia la escuela y me concentre en la música, inmediatamente mi mente comenzó a divagar y perderse, pero la obligue a volver, pues no solo ponía mi vida en riesgo al perderme mientras iba conduciendo, también ponía en riesgo la de mis hermanos, y como su protectora no voy a dejar que nada malo les pase, incluso si el problema soy yo.

Al fin llegamos, después de quince minutos de conducir en esa fea carretera, lo logramos, y en una sola pieza, al menos eso hice bien. Mis hermanos salieron disparados del auto en el instante en el que me detuve.

-Dave, Iris, ¡Buena suerte!- les grite, pero no me escucharon o no les importo.

Saque mis cosas del portaequipaje y me dirigí a las puertas del instituto, cuando una aguda y pequeña voz junto con otra grave llamaron mi atención.

-¡HEY TÚ!, ¡SI TÚ! LA QUE SE DETUVÓ Y VOLTEÓ- grito la aguda voz

-¡VAMOS, NO NOS IGNORES, CHICA LINDA!- la grave atacó esta vez gritando aún más fuerte que la anterior.

Algunos estudiantes se voltearon a ver el origen de esas voces, pero yo las reconocería donde fuera, me gire para correr y saltar a los brazos de mi moreno, alto y fuerte mejor amigo.

-¡JONNY, COMO TE EXTRAÑE!...YA BAJAME QUE NO PUEDO RESPIRAR!- dije con voz ahogada, cuando al fin me puso en el suelo, me gire para encarar a mi enana, irritante y hermosa mejor amiga.

-¿Qué y para mí no hay abrazo?

-¡JENNY!- chille y el abrazo que le di fue tan fuerte que me dolió, pero este tipo de dolor era bueno, no como el que a veces siento, este era de alegría y amor, de los dolores que me hacían sentir que no sólo existía, también estaba viva.

Las dos nos soltamos y comenzamos a caminar hacia el edificio para recoger nuestros respectivos horarios.

-Dy, ¿Qué hiciste en tus vacaciones? ¿Cómo te fue?, te extrañe, te quiero amiga- dijo John y yo me reí de su efusividad, después sacaría respuestas acerca del porqué de su entusiasmo, ahora solo quería disfrutar de mis amigos.

-Bien, solitario, ya saben, mis hermanos tienen una vida social envidiable y yo, bueno yo, tengo un gran corazón- dije en tono de broma y ellos comenzaron a carcajearse, fue una risa tan contagiosa que hasta yo me reí.

Como extrañe a estos locos, sin ellos que sería de mí, seguro estaría en ESA vida todavía.

¡CALLA!

Jenny y Jonny o como yo los llamó JJ notaron mi cara de tristeza y rápidamente captaron el porqué.

Jonny me tomo de los hombros, me atrajo hacia su pecho y susurro en mi oído.

-No te vayas, No recuerdes, esa Dy ya no existe, no te preocupes, Jenn y yo te protegeremos- y beso mi frente como siempre lo hacía, yo trague el nudo de mi garganta y compuse mi mejor sonrisa. Cuando al fin me soltó, encontré mi voz y los mire a los dos a los ojos.

-Gracias, lo sé, es solo que….- y no pude continuar, mi garganta se cerró, y mis ojos se aguaron.

Nos quedamos los tres en silencio por unos minutos, cuando por fin Jenn habló.

-Bueno hay que ir a clases que se hace tarde- revise mi horario.

Español era mi primera clase, me tocaba con Jenn, y Química con John, tenía Música antes del almuerzo y Gimnasia después, gruñí, con mi torpeza y el estómago lleno, seguro moriría hoy.

-Tenemos que correr o nos ahorcaran por llegar tarde- dijo Jenn y jalo mi brazo para correr hacia nuestro salón, las dos nos despedimos con la mano, de John y corrimos como si no hubiera un mañana.

Entramos al salón, me senté junto a Jenn y miré por la ventana, afuera llovía, me concentre en cada una de las gotas que resbalaban y me perdí en ellas.

Me pregunto ¿cuándo empezaré a vivir?