Summary:Bonnie acaba de iniciar la preparatoria, todo iba bien en su vida esta que le dijo "no" al dios Damon Salvatore "solo esto me puede pasar a mi, mi primer día, en mi nueva escuela y ya me había ganado un boleto a la boca del lobo feroz genial no?" DxB TH OCC Mal Summary

Disclaimer: Ninguno de los personajes es de mi autoría, son creación de nuestra adorada Lisa Jane Smith solamente la historia es de mi creación y autoría –de nadie mas ¬¬- bueno y Damon me visita en las noches –jajaja- déjenme soñar, que no cuesta nada xD

.Time of Our Lives.

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Capítulo I: Tropezones

"La primera impresión es la que cuenta… ¡y la que se queda!"

Con los ojos notablemente rojos y cristalinos, un rastro húmedo debajo de ellos, su fina nariz, teñidos en la punta por un tierno rojo; así se encontraba Bonnie, sentada en el peldaño que se hallaba debajo de su ventana; con los pies pegados a su cuerpo, sus rodillas a unos cuantos centímetros de su frente, entre sus muslos reposaba un pequeño libro abierto por su ultima pagina, unas diminutas manos agarrando con fuerza los costados de este, negando a creer el fin de la novela; cerro los ojos, sintió el fresco viento sobre sus sonrojadas mejillas, trato de tragar un poco de saliva, para poder deshacer el molesto nudo que sentía en la garganta, pero no lo logro, al contrario, sintió como su estomago se contraía, pero su mente se encontraba muy distraída dándole vueltas a sus pensamientos.

No había terminado con un «Y vivieron felices para siempre» no terminaba con una empalagosa y melosa palabra de amor, no terminaba con una dulce mirada, ellos no terminaban juntos "ese no era un cuento de hadas" se repitió mentalmente "la vida no era un cuento de hadas" "los cuentos de hadas no existían".

Con un suspiro y una gran decepción, cerró el libro; miro la portada de este por algunos segundos «Romeo y Julieta» decía el titulo, «Romeo, Julieta y la Muerte se debió llamar» pensó la Joven con amarga ironía, seguida de una risa tonta por su parte, "lo hiciste de nuevo" pensó, igual que las otras veces, ahí estaba ella, patéticamente llorando, enojándose, entristecerse y sin mencionar la gran frustración que sentía… ¡Por un libro! Después de terminar de reflexionar, llevo una de sus manos a su rostro, limpiando los rastros de lagrimas en el; se levanto un poco tambaleante de donde se encontraba sentada, con el libro en las manos, camino a un pequeño mueble de madera, donde varios libros reposaban, empujo unos cuantos libros, dejando un espacio libre entre ellos, donde enseguida deposito el libro.

Camino ya con mejor estabilidad, a una puerta de lado de ella, abrió la puerta, dejando ver su baño personal, algo desordenado pero con una decoración a colores exquisita, una vez dentro se paro en el enorme espejo rustico que poseía; "¡Genial!" no se notaba que había estado llorando, eso le agrado bastante a la muchacha, pues no seria del todo placentero tener que explicar que había llorado peor que Magdalena a causa de un libro, con los pensamientos en la cabeza, tomo un pequeño frasco azul claro, que reposaba sobre la esquina del lavabo, tomo la esponja con forma ovalada de su interior, pasándola consecutivamente debajo del ojo, después de terminar con el otro ojo, y estar segura que no se notaba su pequeño problema, salió por la puerta, cerrándola tras de ella; llego hasta una silla rosa pastel, donde, desde años anteriores, acostumbraba a dejar su uniforme preparado; como era de esperarse, ahí se encontraba su saco azul marino, que por defecto, era lo ultimo que le faltaba por acomodar, termino de abrocharse el saco, saco el cuello de su camisa blanca por encima de el, se toco el nudo de la colorida corbata que, rodeaba su cuello, procurando que el nudo estuviera perfectamente amarrado, acomodo su pequeña falda roja, miro que las calcetas igualmente rojas estuvieran a la misma altura, zapatos impecables, sonrió para si misma, tomo el bolso que llevaba en sus adentros sus útiles, giro sobre sus propios talones, dirigiéndose a la puerta de salida, pero, antes de salir, paro enfrente de su tocador, inclinándose un poco sobre el, tomando un pequeño frasco de el, giro la tapa, llevo el embase a sus labios, aplicándolo con delicadeza, una ves termino, volvió a ponerle la tapa, dejándolo sobre el tocador, se miro en el espejo, sus labios descoloridos, ahora estaban cubiertos por una ligera capa de bálsamo labial, paso una mano por su pelo, procurando que todo estuviera en su lugar, junto los labios, mandándose a si misma un beso volado, no solía ser tan vanidosa o perfeccionista, pero no todos los días se entraba a la preparatoria ¿no? Con esos pensamientos, salió por la puerta de su habitación, lanzo un suspiro al aire, miro su reloj pulsera, "6:40 am" marcaba este, estaba a tiempo para partir y tal vez desayunar.

Camino un poco más, hasta encontrarse con una puerta, la puerta del mal, la puerta que si cruzas no regresas…bueno no tanto, pero si era la puerta de la habitación de su hermana menor. Mary tenía 14 años, una niña realmente entusiasta y a veces un poco superficial, pensaba Bonnie.

-Mary ¿quisieras mover ese culito tuyo escaleras abajo? – pregunto con sarcasmo mientras tocaba la puerta con desesperación.

La hermana no tardo en salir de su cuarto, le dedico una gran sonrisa resplandeciente a su hermana antes de darse la vuelta y empezar a bajar las escaleras, dejando a una Bonnie perpleja, después de un largo suspiro por parte de Bonnie, bajo las escaleras detrás de Mary.

-¿Se puede saber por que tan contenta? – insistió Bonnie al momento de llegar a la cocina, camino hasta el fregadero donde se encontraba su madre, le dedico un pequeño beso en la mejilla a modo de saludo, camino hacia su padre, que como todas las mañanas, estaba sentado en su lugar del comedor, bebiendo café y leyendo el periódico del día a este solo lo saludo con un "Buenos días pa" Una vez que se acomodo en su lugar, giro la cara y se encontró con la mirada de su hermana en ella.

-Bueno te contare- le dijo mientras recargaba los codos en la mesa, le hizo una señal con el dedo índice, como ella lo indico, Bonnie se acerco mas a ella impaciente por que su hermana empezara a hablar de una buena vez.

-Lo que sucede querida hermanita es que hoy entro a 8º grado…- Mary guardo silencio, mirando a su hermana, esta por su parte, alzo ambas cejas, asintió un poco con la cabeza he hizo un movimiento extraño con la manos, esperando a que siguiera contando, Mary se acerco mas a ella, miro a los lados, asegurándose de que su padre siguiera entretenido con el periódico, miro al otro lado, una vez que estuvo segura miro a su hermana, dispuesta a empezar a hablar.

-Bueno le prometí a Frankie que cuando yo entrara a 8º y el a 9º…que es ahora- Mary volvió a sonreír enormemente- le diría que ¡si!- susurro con emoción, en cada palabra se escuchaba las ansias de llegar a la escuela. Se alejo un poco de su hermana, fue entonces cuando Bonnie pudo notar el brillo en los ojos de Mary, sonrió en sus adentros, feliz por su hermana.

-Valla de verdad me alegro Mary…pero ¿Quién es Frankie? –pregunto confundida, tratando de recordar al chico…"moreno? No ese era Cody…con pecas? No ese era Michael…" no, por mas que trato no pudo recordar.

-Ridella…Frankie Ridella- menciono Mary después de un rato, perdida en sus propias palabras.

-Ridella? El hijo del rector he? – Bonnie tomo el vaso de jugo de naranja que había frente a ella, le dio un largo sorbo antes de volverlo a dejar en la mesa.

-Si si el- suspiro Mary, alzo la mirada y observo a su hermana tomar jugo, le sonrió melancólicamente- Bon… me aras falta en la escuela ¡no puedo creer que ya vas a entrar a la preparatoria!-

-Hay pequeña… ¿Qué aras sin mi? – Pregunto Bonnie con sorna – bueno, siendo honestas tu también me aras falta….- le sonrió, aunque una vocecita chillona es su cabeza decía "no mientas no la extrañaras"

-¿enserio? Bueno si es verdad – dijo Mary con suficiencia – no tendrás amigas tan rápido.

-Mentira! – ahora era Bonnie quien sonreía – Elena estará conmigo – le saco la lengua juguetonamente a Mary, mientras esta solo torcía los ojos- y hablando de ella- volvió a tomar el vaso de jugo y lo bebió de un solo trago – ya me tengo que ir! Quede de verme con Elena en la esquina de la heladería y si no me voy no llego!- decía apresurada mientras tomaba sus cosas.

Se despidió de su mama, de su hermana quien le dedico un "Suerte!" y por ultimo de su padre, claro no podía faltar la advertencia "Cuidado con los chicos!" Bonnie solo torció los ojos antes de agarrar las llaves y abrir la puerta; antes de cerrarla pudo escuchar claramente la voz de su madre y su "cuídate mucho!" bueno así eran las madres y su sentido de la preocupación no? O al menos eso era lo que decían en Discovery Channel, reprimiendo una risotada ante su pensamiento y se dedico a caminar con paso rápido hasta el punto de encuentro con su gran amiga Elena… ¿gran amiga? Wow como puede cambiar la vida no? Cuando se conocieron no se querían ni ver en pintura…se veían en la escuela y dios…era sálvense quien pueda de las bombas/miradas que se daban una a la otra. Bonnie aun podía recordar cuando su primo Daniel, emocionado había organizado una fiesta en cerebración, para pedir la mano de su novia Amanda… ¿Todo genial no? Si todo iba genial hasta que descubrió que la prima de Amanda era… ¿saben quien? Si ella…Elena su enemiga a muerte, pero bueno se vieron forzadas a convivir por sus Parientes, ni a la semana de conocerse se hicieron inseparables!

La joven iba tan concentrada en sus pensamientos, que no se dio cuenta que casi llegaba; al alzar la vista, pudo ver la diminuta sombra de su amiga en la próxima esquina, esperándola, sonrió en sus adentro; tanta era su emoción que, por ir caminando tan rápido, tropezó con sus mismos pies, haciéndola tambalear en sus talones. Con un movimiento realmente fuera de este mundo, trato de mantener el equilibrio, por un instante lo consiguió…si claro, hasta que sintió un golpe realmente fuerte en la espalda, como un acto reflejo de su cuerpo, estiro la mano para sostenerse de lo primero que encontrara.

Para su suerte encontró algo suave de que sostenerse, lo apretó, ¿tela? Si tal vez fuera tela, ¿mala suerte? Si, resulto que de lo que se sostuvo no fue tan fuerte para sostenerla ¿Cómo lo supo? Por que sintió como caía lentamente, cerro los ojos con fuerza, esperando el impacto duro contra el suelo…pero ese no llego, sintió algo estrujando con fuerza su cintura y algo suave bajo de ella, si algo había amortiguado la caída, o eso pensó hasta que oyó un quejido muy cerca de ella, tal vez demasiado. Abrió un ojo temerosa de lo que encontraría, pero para su desgracia no vio nada, así que se vio obligada a abrir el otro.

¿El golpe fue tan duro que morí? Eso fue lo primero que se vino a la mente a la joven, pues frente a ella se encontraba un dios, un adonis, un ángel, un ser realmente perfecto, mandíbula marcada y fuerte, labios finos y carnosos, pómulos anchos y definidos, nariz perfectamente cincelada, ojos… sus ojos cafés, casi negros, tan solo con verlos se le fue el aliento y sintió que su boca se secaba al instante, observo esos hermosos ojos que la miraban profundamente, en la cara del chico se formaba poco a poco una hermosa realmente hermosa sonrisa.

-Bueno me siento bajo inspección -¡oh por dios! Esa voz tan…tan…masculina, grave y fuerte, con un toque de finura que hacia quedarse hipnotizada - ¿aun no has terminado de observarme? – inquirió el ángel, un ángel muy egocéntrico debía decir Bonnie, aunque eso no le quitaba que tuviera razón ¡Diablos!

-¿Aun no has terminado de toquetear mi cintura? – pregunto la chica al darse cuenta que el aun la tenia sujeta, y no solo eso, sus dedos acariciaban lentamente el mismo lugar ¿eso estaba mal no? Pero si es así ¿Por qué se sentía realmente bien?

-¿la verdad? Aun no – contesto con cinismo aquel chico, Bonnie alzo amabas cejas en signo de sorpresa.

-Bueno en ese caso te seguiré observando hasta que te dignes a soltarme…-contesto ella con evidente sarcasmo.

-Bien, por mi no hay ningún problema nena – Okey eso ya había sobrepaso los limites de la chica, así que con una sonrisa realmente hipócrita, recargo sus manos en los hombros de el para tomar impulso y levantarse, pero el muy bestia era mas rápido, la había apretado mas contra el, haciendo que sus manos resbalaran y quedara aun mas cerca de el, podía sentir su aliento chocar en sus mejillas, y olía tan bien! "¡pero que cosas pensaba!" Se reprocho Bonnie internamente, "el es un desconocido y yo pienso que huele bien?"

-Entonces muñeca? Quedamos hoy? – Pregunto el chico con sus ojos devorando la pequeña silueta de Bonnie

-Ni cuando los puercos vuelen cretino – Con toda su fuerza, Bonnie logro liberarse de los brazos del chico, se paro tambaleante y se alejo lo mas rápido que pudo, arreglándose su ropa, a unos cuantos pasos de ella podía mirar a Elena carcajeándose de ella, bien ya le propinaría un buen golpe, ahora seguía realmente aturdida.

Por su parte, el chico con una sonrisa en el rostro miro a sus amigos acercarse a el entre burlas y risas, uno de ellos, Stefan, su hermano, lo ayudo a parar, el sacudió sus pantalones de la parte de atrás y volteo rápidamente a ver a Bonnie alejarse.

-Valla hermano creo que te batearon ¡y a lo lindo!- había dicho burlonamente su hermano

-Yo creo que no sabe quien eres Damon – dijo otro de sus compañeros, el por su lado, soltó una sonara carcajada.

-Bueno no tardara en saber quien soy y me vendrá suplicando la salida- Damon seguro de sus palabras, giro hacia sus amigos y se empezaron a alejar del lugar, camino a la escuela. Por otro lado, Bonnie ya había llegado con su amiga Elena, le había contado lo sucedido con el chico, incluso le había señalado con el dedo para que su amiga lo ubicara.

-Hay amiga ¿en verdad no sabes quien es el? – pregunto Elena un tanto sorprendida de la ignorancia de su amiga

-¿debería? ¿Tu si sabes? ¿Quién es? – Elena sonrió

-El es nada menos que Damon Salvatore, el dios de la academia, el mas deseado, el…-

-Sisisi ya entendí Elena ¿y? ¿Qué tiene que sea el más deseado de la escuela? ¿Qué tiene que ver conmigo?- interrumpió Bonnie

-Que cuando le dices que no al dios…-

Elena no tuvo que terminar la frase para que Bonnie entendiera de que se trataba, había rechazado al rey de la escuela, "Genial!" pensó, "solo esto me puede pasar a mi, mi primer día, en mi nueva escuela y ya me había ganado un boleto a la boca del lobo feroz genial no?"

N/A: Heyyyy! ¿Qué tal? Bueno heme aquí yo con una nueva creación xD ¿Qué les pareció? Creen que tiene futuro? Es mi primera historia que pienso hacer larga…o eso creo, así que de verdad me ayudaría mucho que me dijeran que opinan! Ahhhh dejen Reviews place! Tqkm

ATT: Casiplatonico^^