El despertar de la oscuridad - Prólogo
La noche estaba en su esplendor y un leve sereno caía, la luna llena resplandecia mostrando la sombra de quiénes rondaban las afueras, haciendo imposible el poder esconderse.
-Mamá, ¿por qué corremos en la madrugada?- Preguntaba un niño de unos once años, mientras se escabullia entre callejones de la mano de su madre
-Adalius, te lo he explicado varias veces- susurraba la madre del niño rubio de ojos dorados. Sin sentirse satisfecho por la respuesta de su progenitora, el chico continuaba corriendo sigilosamente de la mano de su madre. Podía ver como la mujer seguía a su padre quién iba de la mano de una chica, una niña un poco mayor que él, de cabellos castaños ondulados y hermosos ojos grises. De repente oyó a unos caballos cerca y por alguna razon sintió a su madre tensarse
-Adalius toma a Aria y salgan de aquí- dijo su padre con voz de alerta -Tienen la dirección del señor Nicola, corran hacia ahí y no miren atrás- dijo con voz de preocupación
-Padre, Madre- dijo el pequeño angustiado pero fue interrumpido por una luz y unos caballos que se acercaban a todo galope desde el otro lado del callejón.
-¡Corran! - dijeron ambos progenitores al unísono con extrema preocupación. El niño tenía un mal presentimiento pero todo se volvio oscuro
-¡Ahhh!- exclamaba Adalius despertando de repente algo agitado "Otra vez este sueño ¿Por qué? ¿Que significa? ¿Es el futuro?"- se preguntaba el niño de unos nueve años. Últimamente tenía ese sueño constantemente, en donde huía con sus padres y Aria, su mejor amiga. Aquella angustia con la que se despertaba no le gustaba para nada. El chico rubio se incorporó en su cama y se sentó en medio de la oscuridad de la noche.
-Ignis- susurró el infante mientras abría su mano y en su palma se veia una pequeña flama dorada, la cual utilizó para prender un candelabro que tenia al lado en su mesa de noche. Caminó pensativo hacia la ventana mientras veía distraído la fuerte tormenta que ocurría.
-¿Adalius?- dijo una voz algo ronca y adormilada desde el otro lado de la habitación -¿Estás bien?-
-Si Aria, siento si te desperte, solo me cuesta un poco dormir- contestó el chico con su característica madurez.
-Ve a dormir, deja de hacer tanto ruido- contestó la niña desde su cama volviéndose para seguir durmiendo
El pequeño sonrió ante el reclamo de su amiga, sopló las velas y en la penumbra de la oscuridad siguió viendo la lluvia caer.
-Creo que es hora de preguntarle a mi madre sobre mis sueños, y si hay magia relacionada- susurró Adalius para sí mismo antes de volver a caer en un profundo sueño.
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Bienvenidos a una historia mas!
Los dejamos con este spin off basado en la historia de Adalius. Todo esto es el preámbulo a la continuación de lpdlo :)
Si eres nuevo ppr aquí, recomendamos leer Los poderes de la Oscuridad primero!
Saluods!
