Disclaimer: Naruto no me pertenece y blahblahblah

esta es una idea de un fic de no muchos capis, pero más de uno eso sí.. es algo entre 'freaky friday (viernes de locos)' y 'este cuerpo no es mío'.
ahí me dicen si quieren que siga o no :)

mis "comentarios" estan al comienzo y al pie de la pag. con negrita :3

linea laarga = cambio de escena

"blablah" = pensamientos

-blablah- = hablan ¬¬


Sakura suspiró. Estaba acostada en su cama y no podía dormir. Miró por la ventana que se encontraba junto a su cama, miró el cielo nocturno y suspiró nuevamente. Pensaba en el chico que en este momento no le dejaba dormir. Naruto Uzumaki. Llegado hace un año al colegio, al principio había causado fulgor entre las chicas: un chico rubio de ojos azules. Claro, después de un tiempo todo eso desapareció y las chicas dejaron de, literalmente, perseguirlo. Desde que lo había visto no podía dejar de pensar en él. No sabía por qué, pero no podía. La hermana de él, Ino, había quedado en su clase y se habían hecho mejores amigas al instante. No fue el caso así con Naruto, no señor. Cada vez que tenía la oportunidad de hablarle en casa de Ino o no lo hacía o decía estupideces o eran un par de palabras inútiles. Inútil, así se sentía. ¿Por qué demonios no se atrevía a hablarle? Ni que él fuera una estrella de rock o algo así. Suspiró otra vez. Realmente le gustaba Naruto y a veces parecía cómo si él gustara sólo un poquito de ella, había veces en que lo había pillado mirándola en el pasillo y se había enterado (gracias a Ino) de que él decía cosas lindas de ella en su casa. Cómo cuando ella se cortó el pelo y él le comentó a Ino, estando ella misma presente, que "las chicas con ese corte de pelo se ven bien" o cuando había cantado para la semana del colegio y él había dicho, a Ino también, que había salido genial. ¿Por qué lo hacía si no gustaba aunque sea sólo un poco de ella? No lo entendía y se sentía impotente por eso. Siguió observando el cielo desde su cama, una estrella fugaz pasó y ella pensó: "Ojalá Naruto estuviera en mi lugar..." Luego cayó en un profundo sueño...

Naruto dirigió su mirada hacia el tragaluz que daba justo sobre su cama. Observó las estrellas y recordó a Sakura, la mejor amiga de su hermana. Iban un curso más abajo que él. Cuando la vio por primera vez le movió algo por dentro. No sabía qué era, pero era algo importante; muy importante. Siempre en recreos la miraba, y al parecer ella se había dado cuenta porque varias veces lo había pillado, no todas, pero varias. Incluso una vez lo había mirado de frente y le había sonreído, eso no se lo había esperado, pero había sido genial. No podía evitar el mirarla, era sólo que se le hacía tan linda. Con su cabello rosa corto, sus ojos verdes, su esbelta figura... Suspiró, casi nunca lo hacía, sólo cuando pensaba en ella. Al parecer Sakura Haruno le gustaba. Él, en verdad, era bastante tímido (con respecto a las chicas, claro) y no sabía cómo acercarse a hablarle. Eso le producía un ligero malestar. Se sentía impotente, no sabía cómo hacerle. Incluso a veces parecía que a ella no le agradaba, porque nunca le hablaba y cuando lo hacía eran frases cortas, casi cortantes,casi... Por un segundo le pareció ver una estrella fugaz en el cielo, luego pensó: "Ojalá Sakura estuviera en mi lugar..." Después de eso cayó en un profundo sueño.
A la mañana siguiente abrió los ojos después de una noche de sueño muy pesado. Miró hacia el techo, esperando ver su tragaluz, pero no lo encontró. Se levantó de golpe y observó a su alrededor. Sábanas verde manzana bajo un cubrecama blanco, un armario a uno o dos metros de la cama con varios dibujos en las puertas, muy buenos se podía decir, una mesita de noche junto a la cama con una lámpara, un celular y unas fotos de Ino, Hinata y Sakura sobre ella, un escritorio a unos metros con unos libros y un computador. Esa no era su pieza. Observó sus manos y no eran cómo las suyas, eran más pequeñas y claras, con esmalte verde oscuro en las uñas, éste se le hacía conocido, pero no sabía de dónde. Sintió cómo un mechón de cabello le caía sobre los ojos, no tenía el cabello tan largo, ni rosado... ¡¿Rosado?! Salió de golpe de la cama y de la pieza, buscó un baño, y al encontrarlo se miró al espejo. El reflejo que vió no se lo había esperado ni por si acaso... Se miraba a sí mismo, o mejor dicho: a sí misma. Quién le devolvía la mirada desde el espejo, era Sakura...


Review:3 sé que está corto, pero es sólo una idea... dos que me pidan que lo siga y lo sigo :D SOLO DOS!222222