Altanero, valiente, vanidoso.

De mirada desafiante

Y sonrisa hipnótica

Aquel a quien me juré no querer.

Fuerte, Frágil, deseado.

Porque debías esa noche venir a mi poniendo mi mundo a girar?

¿Acaso no puedes apiadarte de este desbocado corazón?

No te atrevas a mirarme una vez más.

¿No has notado como mis manos tiemblan cuando te acercas?

No te acerques a mi luciendo tan perfecto.

Misterioso, heróico, vivaz.

Las cosas no debían ser así.

Tu no debias entrar en mi camino.

Tal vez mi destino era desaparecer esa noche.

No debiste salvarme, no debo deberte mi vida.

¿No entiendes que este sentimiento no debió nacer?

Atractivo, incoherente e inalcanzable.

¿Para que cruzarte en mi vida si sólo ibas a ignorarme?

No insistas no volveré a abrir la ventana,

Ya no repiquetees, ¿No entiendes que no quiero hablar?

Te escucho, odio hacerlo.

Tu voz me debilita,

Hace a mis piernas flaquear,

Mi corazón pierde su ritmo.

Tu sonrisa me resulta fatal.

Inalcanzable, maldito, fugaz.

No me quedan fuerzas para seguir soportando esto,

Las lágrimas caen como si el dique hubiese rebalsado,

Mi cuerpo entero tiembla, se que el fin ha llegado.

Estoy feliz sin embargo...

Ya no oire tus chistes,

Ya no coquetearas con mi álter ego,

¡Ella nunca va a amarte como yo! Y aún así te niegas a entenderlo.

Oscuro, frío, soltario.

La daga en mis manos selló mi destino,

Olvidaré tu traje negro como la oscuridad que me rodea.

Tu cabello ya no iluminara mis días cual sol en el cielo.

Tus ojos verdes no serán más mi tormento.

He olvidado tus rasgos gatunos, esos que me hacen sonreír... ya no sonreire jamás.

Adiós, mi amado gato,

Ya no te atormentare con mi sufrir...


Marinette yacía en el piso de su baño, el cual se hallaba teñido de color Rojo y un fuerte olor ferroso alcanzaba sus fosas nasales, no podía entender lo que había pasado, ella siempre parcia feliz de recibirlo cuando esté entraba por su ventana, tomó su debilitado cuerpo entre sus brazos y cómo si fuese una respuesta a su incógnita una fina hoja de papel descendió desde el desvanecido cuerpo hacia el suelo, tomó la hoja mientras se apresuraba a llevar a la chica a urgencias.

Las alarmas sonaban mientras un río de lagrimas recorrían los ojos del heroe enmascarado, tal vez debió notarlo antes; sus constantes intentos por alejarlo de Ladybug, esos largos abrazos que para ella significaban algo más, su garganta estaba seca, él temblaba cual hoja en la cima de un árbol.

Ella lo amaba y él se odiaba así mismo mientras no podía dejar de pensar en la fragilidad del cuerpo de la chica que había estado entre sus brazos.

Sus manos temblaban aún cubiertas de sangre que se había secado sobre sus guantes.

Si tan solo hubiese notado las claras señales,

Si tan solo hubiese querido oír,

Si tan solo no hubiese sido tan egoísta,

Si tan solo por una vez pudiese sentir a sus brazos enterrarse en su cuello y su armoniosa risa llenando el silencio.

Si tan solo pudiese tener algo más de tiempo...

¿Acaso este era el fín que merecía su amiga, su compañera, la chica que lo amaba y a la que de alguna manera él también amo?