Este drabble es fruto de mis más puros desvaríos. Si quereis entenderlo, leed lo escrito al final, que no lo puedo escribir al prncipio porque sino se caga la sorpresa, aunque sorpresa no es mucha.
Bueno, ni Hetalia ni sus personajes me pertenecen, vamos... lo típico.
Se despertó en una cama que no era la suya, empezando porque el nunca combinaría el aquellos colores tan chillones de las fundas de las almohadas con las sábanas veige del año en que su abuelo iba por ahí de chulo. La cabeza le dolía horrores, así que intentó recordar algo de lo sucedido la noche anterior, pero su memoria no estaba por la labor. Dio un salto enorme cuando imaginó las causas del porque despertaba en una cama ajena y después de darle una patada a la sabana que lo tapaba, saltó sobre la moqueta del suelo. ¡Todo encajaba!, el dolor de cabeza, el no recordar lo sucedido aquella noche, despertar desnudo en una casa ..., no, lo que era peor, ¡en una cama que ni siquiera reconocía!. Un escalofrío le recorrió la médula espinal. Miró debajo de la cama en busca de su ropa, o sus zapatos, o algo que fuera suyo, pero no había nada. Soltó una palabrota y después se tapó la boca con las dos manos esperando que nadie se hubiera dado cuenta. Aguantó la respiración un momento y agudizó el oído esperando a detectar el mínimo sonido que le alertara de la cercanía de alguien. Nadie pasaba por allí en esos momentos. Una vez se hubo relajado un poco, pasó a abrir el armario y casi le entró un infarto cuando lo encontró lleno de uniformes militares verde oscuro, exactamente como los de Alemania, pensó. Se puso a llorar mientras cogía uno de ellos y se vestía con prisas. ¡Así que eso había sucedido! Una vez vestido, intentó recuperar su orgullo sorbiendo los mocos y se largó por patas, como buen italiano que era, antes de que alguien lo viera. Ya se encargaría de quemar la evidencia de su noche fuera al llegar a casa, solo esperaba que a su hermano no se le ocurriera estar allí en esos momentos.
Feliciano vio a su hermano salir de la casa a través de la ventana. "Vaya", suspiró, y miró con lástima el uniforme recién planchado del mayor. Con lo amable que había sido Alemania al recogerlo, después de que una de las granadas que había lanzado el italiano, le explotara al lado. Según uno de los médicos que lo habían visitado, el italiano mayor solo había sufrido una ligera commoción que le causaría una pequeña amnesia, nada grave. Aunque estubiera desconcertado, tampoco tenía porque pisarle el césped. Lovino tenía que ser más simpático con Ludwig, y con los maravillosísimos doctores alemanes que había llamado el este. Con ese carácter no conseguiría hacerse amigo de esa fantástica gente del norte, pensó el feliz hermano menor yendo a buscar al alemán.
¡E aquí mi super-explicación! (Para todos aquellos que no lo han dejado al leer la primera frase^^)
Hace poco se organizó en Valencia el V Salón del Manga, y por supuesto, yo estuve allí=D Ahí me compré unas cuantas cajitas de esas donde salen muñequitos de Hetalia (que son todos unas cucadas /) y me tocó un Lovino con el uniforme de Alemania (¡es un timo! ¡yo quería al Lovino normal, con tomate incluído!) Así que para explicarme a mi misma porque el destino me había dado a Romano con la ropa de Lodwig, mi cabeza pensó esta cosa.
La verdad es que al principio iba a ser una noche loca entre ambos, pero como no me va esa pairing, se queda solo en el "no recuerdo" de Italia del Sur. Eso sí, si alguien me pide un drabble sobre ellos lo escribiré, pero para eso vais a tener que escribir un review vosotras ;D
¡Los tomates son bien recibidos, así que no os corteis! xDD
