Aclaración: Sakura Card Captor no me pertenece
Conquistando tu corazón
Por Mía T.
Summary:
Por designios del destino, ella se encontró comprometida con un hombre, al que prácticamente no conocía y que debido a un doloroso pasado había cerrado su corazón, seria capaz ella de conquistar el corazón de él, o fracasaría y perdería al suyo en el proceso.
Capitulo I
Aceptando el destino, encontrando tu mirada
Sus cabellos negros se movían al compás que el viento dictaba, y sus ojos amatistas estaban fijos en el lago frente a ella, las estrellas ya habían aparecido y acompañaban a la luna, que brillaba orgullosa en el firmamento, era una noche clara, y el reflejo de la luna, sobre la superficie del lago, creaba un ambiente mágico, maravilloso, pero ella no lo podía disfrutar, como hacerlo, si acababa de renunciar a todos sus sueños e ilusiones, si acaba de prometer algo que no deseaba hacer, cerró los ojos, y dejo que la brisa fría de la noche la envolviera y la hiciera olvidar, pero no lo conseguía, aun estaba presente la platica con su padre.
Estaba sentada en una silla al lado de la cama de su padre, la tristeza estaba en su corazón, al igual que en el de su madre, la salud de el, estaba empeorando, y según los doctores no había nada que se pudiera hacer.
-Tomoyo hija¿estas aqu?í-
Se apresuro a tomar una de las manos de el entre las suyas, mas de cerca pudo ver las marcadas ojeras en su rostro, se miraba mucho mas viejo de lo que en realidad era, en verdad esa enfermedad había acabado con el, cualquiera se asombraría de ver al gran Takechi Daidouji, en ese estado-Aquí estoy padre-se apresuro a contestar.-He llegado ayer, pero estabas dormido y no quise despertarte-había estado lejos casi cuatro meses, tiempo que duraba el semestre en la universidad que estudiaba, la carrera de periodismo.
-Quiero que me concedas un último deseo-
-No hables así padre, no morirás-
-Ninguno de los dos creemos en eso Tomoyo, ayer hable con mi viejo amigo Andrew…-
-Padre-interrumpió Tomoyo, recordando que ese nombre traía consigo un tema que Tomoyo no quería tratar, un matrimonio, que ella no deseaba-Hemos discutido ya de eso, no quiero casarme, con el hijo de tu amigo, me parece ridículo que ya en estas épocas, los padres decidan con quien se casaran sus hijos-
-Tomoyo, muy pronto me iré, Eriol Hiraguizawa, es un buen hombre, velara por los intereses de nuestra familia, además necesito que alguien se ocupe de ti.-
-No soy ninguna niña, que requiera que se ocupen de ella, yo puedo cuidarme sola-
Takechi sonrió-Tienes un buen corazón Tomoyo, pero tus decisiones nunca son las correctas-
Tomoyo noto el tono de reproche que llevaban esas palabras y sabia, muy bien que entre esas decisiones se encontraba la decisión que había hecho al estudiar periodismo y de su sueño de recorrer el mundo reportando lo que en el acontecía.-Padre-
-Por favor Tomoyo-interrumpió el-Si me quieres acepta casarte con el, deja que muera tranquilo, es mi ultimo deseo, y solo tu puedes cumplirlo.-
Tomoyo, miro los ojos amatista de su padre, del cual ella misma había heredado los propios, no sabia porque su padre ponía el amor que sentía por el en duda, ella lo quería y mucho, pero aceptar esa promesa, era demasiado para ella..
-Por favor Tomoyo, si me quieres acepta.-
Suspiro, no podía ser de otra forma-Esta bien padre, haré lo que tú quieres.-dijo derrotada
-Gracias Tomoyo-
Y así era como se encontraban las cosas, ella a sus 20 años y en el segundo año de su carrera se encontraba comprometida con un Hombre al que ni siquiera conocía, se levanto de donde estaba y camino hacia su caballo, no quería dejar ese lugar tan tranquilo, pero sabia que ya era tarde y su familia se preocuparía si no llegaba-Supongo que mi destino ya no pertenece, espíritu libre-dijo mientras acariciaba al caballo, se monto en el, y cabalgo hacia su casa, era una experta jinete, cualquiera al verla montar lo diría, varias lagrimas rodaron de su mejilla, al parecer ya no podría hacer nada, toda la vida que había idealizado, desaparecía frente a sus ojos, sin que pudiera evitarlo, seco las lagrimas de sus mejillas, no quería que nadie se diera cuenta de la enorme tristeza que embargaba su corazón.
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-¿en verdad lo harás?-
Miro a la chica de cabellos castaños y ojos verdes que se encontraba frente a ella-No tengo otra salida Sakura-se acostó en la cama de la habitación, que pertenecía a la ojiverde, su única amiga en ese lugar, al que se habían mudado debido a las indicaciones que el doctor le había dado a su padre, diciendo que tenia que abandonar la ciudad por un lugar mas tranquilo, y eso es lo que habían hecho, se habían mudado a Tomoeda, un pequeño pueblo, que estaba constituido mas que todo por ranchos, y uno de los rancho vecinos era precisamente el rancho Kinomoto, agradecía en verdad que la familia de Sakura viviera en este lugar, ya que había encontrado a una gran amiga en ella, a pesar de que hace tan solo seis meses que la conocía.
Sakura se acerco hacia su amiga-Lamento que eso te ocurra-
Tomoyo sonrió-Tal vez no es tan malo, mi padre dice que es un buen hombre-
-Tomoyo-dijo Sakura, sabiendo que esas palabras no significaban nada para ella
-Vendrá esta noche a cenar, y lo conoceré.-dijo mientras se sentaba en la cama, quedando frente a Sakura, forzó una sonrisa-Ya dejemos de hablar de mi, dime como van las cosa contigo y Shaoran-
-Muy bien de hecho-dijo mientras levantaba su mano izquierda y en el que ya lucia un anillo de compromiso.
-felicidades Sakura-dijo mientras abrazaba a su amiga, sabia muy bien lo feliz que estaba por eso, Shaoran era el novio de Sakura hacia ya un poco mas de tres años y finalmente le había propuesto matrimonio.-Y ya tienen fecha-
Sakura sonrió-Talvez a mediados del próximo año, ahora ambos estamos ocupados con los arreglos de nuestras graduaciones.-
Tomoyo sonrió, por unos momentos había olvidado que Sakura era mayor que ella y que este año acababa su carrera, que era periodismo también, otro motivo por el que había podido construir una amistad con ella, verse en la universidad casi todos los días, había ayudado a unirse.
-Espero que seas mi madrina-
-Por supuesto Sakura y tú serás la mía-
-No tienes por que dudarlo-dijo la ojiverde sonriendo
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Se bajo rápidamente de espíritu libre, ya era muy tarde seguramente sus padres se enojarían, entro a la sala-Perdón por la tardanza padre, madre, estuve cabalgando y se me paso el tiempo-dijo, su vista se fijo en el lugar en que estaba su padre enfermo, estaba sentado en una silla de rueda y pudo ver reproche en sus ojos, al igual que en los ojos de su madre, ya que otra de las tantas cosas que según ellos hacia mal era cabalgar, una actividad que no debía realizar.
La mujer de cabellos color rojizos y ojos café, miro seriamente a Tomoyo-Es con los invitados con te deberías disculpar –
Miro a su madre, si definitivamente estaba muy molesta, sabia muy bien que no apoya en nada las decisiones que tomaba, según ella, actuaba de una forma muy liberal y no como debería actuar una dama, de lo que no se había percatado eran que otras dos personas se encontraban también allí, dirigió su vista hacia un rincón de la sala en que dos hombre estaban parados, uno lucia bastante mayor, ojos azules, tez blanca y su cabello ya canoso, y a su lado se encontraba un joven, un poco mayor que ella, cabellos azulados, y ojos del mismo azul profundo que su padre-Le doy mis disculpas-dijo mirando a los dos hombres
-Disculpa aceptada-dijo el hombre mayor
Tomoyo miro al otro hombre, que seria Eriol Hiraguizawa, el hombre con el que pronto estaría casada, pero este no dijo palabra, su mirada se encontró con la suya, y no vio nada mas que indiferencia y una terrible frialdad.
-Ya que estas aquí Tomoyo, y ya es muy tarde deberíamos pasar al comedor-dijo la señora Sonomi Daidouji
Los demás la siguieron al comedor, la cena había transcurrido con un silencio sepulcral, quizás hubiera tratado de alegrarla o al menos alegrarse ella con algunos cometarios¿como los llamaba su madre, a si, comentarios absolutamente fuera de lugar, pero no quería incrementar el enfado con que la miraban, por lo que decidió comportarte como según su madre debería hacerlo.
Ahora miraba a las estrellas, y había salido a respirar algo de aire fresco, en verdad lo necesitaba, la noticia que había recibido en la cena, la había dejado muy sorprendida.
-Creo que será mejor que lo boda se realice dentro de un mes y medio-
Tomoyo miro rápidamente a su padre-¿mes y medio?-
-Si mi salud, no es muy buena Tomoyo y quiero estar en tu boda-
Se sintió mal, aprisionada, miro a su madre para tratar de buscar un poco de apoyo
-Me parece bien-fue lo único que dijo esta.-¿y a ti Eriol?-
Miro al hombre que estaba frente a ella, ninguna de sus facciones había cambiado con la noticia
-también opino igual-dijo este con tono de indiferencia-tengo varios negocios que atender de todas formar-
Apretó la servilleta, el enojo que había dentro de ella era mucho, es que acaso ella no importaba, ni siquiera le habían preguntado a ella¿ a ti te parece bien Tomoyo, no al parecer ella estaba excluida para tomar las decisiones de su propia vida. Estaba muy enojada, necesitaba culpar a alguien¿a su padre, no, no podía hacerlo y cuando le escucho decir yo también opino igual, supo quien seria objeto de su desprecio, el, Eriol Hiraguizawa, lo miro a los ojos, pero a pesar de que seguramente se miraba en sus ojos este sentimiento, el no se inmuto, seguía allí indiferente, como detestaba esa actitud, como detestaba a Eriol Hiraguizawa, quería levantarse de la mesa, y montarse en espíritu libre y cabalgar sin detenerse hasta llegar a un lugar en el que fuera libre, pero no, allí estaba sentada, mientras los otros decidían como seria todo, mientras ellos decidían su vida, su destino…
Estaba allí como su padre se lo había pedido, le había comunicado la situación, del estado de salud del Sr. Daidouji, y del deseo de ambos a que sus hijos contrajeran matrimonio, para el era igual, su padre se lo pidió y el acepto como siempre lo hacia , ya que la fusión entre las empresa Daidouji y Hiraguizawa, era un movimiento muy conveniente para aumentar las ganancias, y un matrimonio era lo mejor para consolidar esta fusión, lo que no imagino era encontrarse a una mujer como Tomoyo, sabia muy bien lo tradicionalista y estricto que era el Sr. Daidouji, por eso mismo se encontró sorprendido al no encontrar a la dama correcta, y obediente que se imagino, sino mas bien una mujer fuerte, y según miraba por sus acciones libre, pudo notar cuanto le molestaba la decisión que habían tomado por ella, salio afuera y la vio apoyada en una de las barandas del corredor, sonrió al ver que vestía muy informal, con pantalón jean, botas y una camisa de tirantes pegada al cuerpo, y no un vestido elegante como se suponía debía hacerlo, durante la cena pudo observarla bien, muy hermosa fue lo que pensó, ojos iguales a los de su padre amatista, cabello negro azabache, y una tez blanca, que conseguía resaltar a los anteriores atributos, su figura como podía observar perfecta, al menos no podía decir que no se sentía atraído a ella al menos físicamente, se acerco mas, tanto que ya casi se encontraba a su lado, fue cuando ella noto su presencia.
-Sr. Hiraguizawa¿se le ofrece algo?-
-No en realidad-la miro –pero creo que deberíamos seguir el concejo de nuestros padres, muy pronto estaremos casados y tratarnos de otra forma que no sea por nuestros nombres seria poco práctico, no te parece Tomoyo.-
Ella lo miro, no podía creer lo que le sucedía, frente a ella, estaba un hombre con la actitud mas indiferente a la vida que hubiera conocido, no es que fuera una gran romántica, pero siempre se imagino compartiendo su vida con un hombre cálido y que compartiera su pasión por la vida como ella, y no a alguien como el.
-¿Tenemos un trato?-
Miro la mano extendida de el, y pensó que sino era muy tarde para huir, alejarse de todo, pero entonces llego la imagen de su padre enfermo, dándose cuenta que no seria capaz de darle un disgusto tan grande a el, en sus estado actual-Trato hecho-dijo entrelazando sus manos con la de el.
Notas de al autora: Espero que les haya gustado el capitulo, hace tiempo quería escribir un fic puramente de Eriol y Tomoyo, hasta que al fin se me ocurrió esta idea, y bueno apareció este fic, que espero disfruten, quisiera saber como siempre sus opiniones a través de un review, que apreciaría mucho, pues me dice que les gusto, lo que me motiva para escribir mas.
