Bueno generalmente estribo mucho pero casi nunca termino mis historias, no soy buena poniendo finales ;n; pero bueno, a esto, entre a un "Amigo Secreto" en el grupo de Ravaille Uke y pues… ¡Aquí esta mi historia! Cumplí mi parte con mucho gusto.
Quiero agradecer a mi novio por ayudarme con la historia n u n
Dedicado: Mi amigo secreto fue Daniela Arribasplata
Pareja: Eren/Levi(LeviNyo osease mujer y además sorpresita x3)
Disclaimer: Sip esa cosa que tengo que poner, pues todos los personajes le pertenecen a Hajime Isayama, pero la historia es mía.
Advertencias: Pues no realmente, pero tal vez algo de lagrimas en cierta parte. (FYI: No es tragedia para aclarar)
Oh, cabe aclarar que la historia es en un.. Universo alterno en el tiempo de los piratas entonces no hay titanes ni nada de eso.
Ahora si, ¡Espero lo disfruten!
Prologo
Un niño se encontraba corriendo emocionado hacia la bahía, era la hora al fin, podría ver aquel barco, del que los adultos tanto hablaban, zarpar. La emoción lo recorría de forma infantil como a cualquier niño de 10 años le pasaba al ver algo emocionante y poco común.
-Casi, ya casi… que no se vaya, que no se vaya- murmuraba para si mismo aumentando un poco el ritmo de su carrera casi llegando a su meta.
Derrapó levemente al llegar a las escaleras de madera, la humedad de el mar provocaba que estas se pusieran resbalosas y por culpa de eso el pobre Eren casi cae de bruces al piso, para su buena suerte logro reponerse y bajo de golpe los peldaños que le quedaban cayendo parado sin problemas sobre la fría y húmeda arena. Era época de invierno y todo aquello estaba helado en esos días.
-¡Ahí esta! Wooh, que grande es…- dijo mientras un barco, claramente pirata, pasaba frente al puerto de su pueblo. Aquel barco nunca paraba ahí pero cada cierto tiempo pasaba frente, espantando a los padres y maravillando a los chiquillos curiosos.
Imponente, era la palabra perfecta para describir aquella, en su forma, bella embarcación. Un aire fantasmal la rodeaba, con la pintura negra ya algo desgastada por navegar tanto, y unas partes ya con moho. Las grandes velas negras se izaban y encorvaban por el viento haciendo que todo se deslizara por el mar sin problema alguno. Y al final, pero no menos importante, la bandera pirata izada hasta arriba, ondeando en el viento con una calavera atravesada por un hueso de un lado y de el otro una espada. Arriba apenas se alcanzaba a divisar la tripulación caminando de un lado a otro cada quien ocupado en su trabajo.
Eren estaba maravillado por aquel barco, nunca lo diría frente a sus padres pero a el le encantaría estar subido en uno de esos barcos, ser un pirata, navegar y conocer los mares mas peligrosos y los océanos mas embravecidos. Sentir el viento revolver su pelo con cada brisa marina.
-Dudo que te guste estar en el mar cuando hay tormenta…- una voz, tranquila y seria, aunque de igual forma sonaba infantil, sacó a Eren de su ensoñación haciendo que su mirada viajara del barco a su nuevo acompañante.
Una niña, rondando la misma edad que él, se encontraba parada a la orilla de la playa, dejando que con cada ola que sus pequeños y descalzos pies se mojaran un poco, llevaba un vestido azul marino, el pelo corto para ser mujer y una mirada seria poco normal en una niña de su edad.
-¿Por qué no?- pregunto animado el menor mientras se acercaba a la chica –Yo digo que sería muy divertido, e interesante- murmuró lo ultimo dejándose notar la emoción en su voz.
La niña, un tanto desconfiada, se alejo discretamente cuando el chico se acercó lo suficiente, pero contesto la pregunta desviando solo un momento sus obscuros ojos al chico antes de regresarlos al mar.
-Podrías morir…- murmuró simplemente mientras sus hombros se elevaban un poco, como si le restara importancia al asunto con aquel simple gesto.
Eren, a diferencia de la chica que resultaba mas tranquila e incluso podría decirse tímida, o solo un tanto apática, la miraba con todo el descaro posible de un niño de su edad, haciéndose una y mil preguntas sobre la chica, desde las ganas de preguntarle, que hacia ahí, hasta el, por que su pelo era tan corto y obscuro.
-¿Y?- como si no entendiera en lo absoluto lo que la palabra "morir" significaba, Eren se encogió de hombros animado mientras su mano iba hasta su cadera ladeando un poco la cabeza mientras pensaba –No me importaría morir si cumplo mi sueño por hacerlo- dijo simplemente.
La chica parpadeo unos segundos un tanto desconcertada por la respuesta que había recibido, y por un momento se vio ligeramente sorprendida volteando su mirada hacía el chico que se había puesto a divagar de nuevo en sus pensamientos y ensoñaciones. Se quedó observando ahora mas directamente al chico que ya había llamado su atención, lo observaba como si estuviera leyéndolo, no entendía del todo el gran entusiasmo que tenían los seres humanos, en especial los niños. Antes de que se percatara los brillantes ojos esmeralda ya estaban posados sobre los suyos y una amigable mano se extendía hacia ella.
-Me llamo Eren, Eren Jaeger – dijo presentándose con ánimos hacia la chica ampliando una sonrisa infantil e inocente.
La niña se mordió el labio de forma leve mientras pensaba en como responder aquel gesto. Levantó levemente la mano pensando durante unos segundos si aquello era una costumbre humana, estrechar manos, los había visto hacer eso una que otra vez.
-Levi… Levi Ackerman- dijo levemente mientras juntaba su mano con la de Eren estrechándola de forma leve haciéndolo solo durante el tiempo necesaria y soltándolo en poco tiempo.
Eren siguió hablando sobre cosas triviales, lo típico de los que los niños de su edad hablaban, manteniendo la atención de Levi sin problemas, la cual, aunque no lo mostraba casi, estaba bastante interesada en oír lo que el menor tenía que contarle, aunque en ciertos momentos ella le hacía preguntas a Eren que lo hacían preguntarse por que le cuestionaba aquello si era algo tan obvio, pero solo lo ignoro, dando por hecho que Levi era una niña bastante peculiar aunque le gustaba hablar con ella.
-Debo irme- murmuró Eren levantándose de la arena limpiándose la ropa sin mucho entusiasmo, había oído la voz de Armin y Mikasa que iban hacia donde se encontraban, buscándolo probablemente.
Cuando se habían sentado en la arena, no recordaban realmente y no le daban mucha importancia, volteó la mirada viendo el pelo rubio de Armin asomarse por donde sabía que probablemente se encontraría Eren.
-Te quedaras mas… - Volteó a donde estaba Levi, o a donde debía estar, por que ahora solo se veía la marca de que ahí se había sentado la chica pero no parecía haber rastro de a donde se había ido –Levi… ¿Levi?-
Eren se asomó por las rocas solo unos segundos hasta que escucho que lo llamaban sus amigos, lo buscaban, probablemente su madre estaba preocupada por que ya era tarde.
-¡Aquí!- dijo mientras subía las escaleras de madera volteando el rostro solo unos segundos hacia el mar buscando algún rastro de Levi pero no lo encontró, suspiro de forma leve, tal vez la varía en el pueblo en algún otro momento.
