«DDR» Inuyasha©Rumiko Takahashi.
El destino es el que baraja las cartas, pero nosotros los que las jugamos.
˜Arthur Schopenhauer.
Por un error.
Viñeta #1. El hechizo de amor.
El gruñido era la único que tenía que soltar el imponente demonio al sostener a su joven protegida que no podía zafarse del suave pero firme agarre a la que estaba sometida.
—Suélteme señor Sesshomaru… debo ir con mi amado. ¡Jake-samaaaaaaaaaa!
El grito se perdió en medio de ese forcejeo; el grupo de Inuyasha miraba a un golpeado Jaken en el piso.
—¡Qué desastre!... —Ante la mirada fulminante de su compañera 'humana' agregó con rapidez—: No me mires de esa forma 'Kagome' no es mí culpa lo sucedido.
—En parte lo es —comentó entre dientes—, si no hubieras dejado sola a 'Rin' en aquella cueva; ella no hubiera conocido a esa 'bruja' y est...
—Señora Kagome —El monje 'Miroku' intentó aplacar su ira— no es culpa de nosotros, cuando Rin se tropezó durante el entrenamiento quisimos ayudarla pero la demonesa lagarto nos atacó y pensamos que ella no podía caminar en ese estado…
—Nos centramos en la pelea y dejamos a Rin en la cueva, yo la revisé y estaba vacía… no sé en qué momento apareció esa bruja. No había forma de adivinarlo.
—Pero eso no pasó —recalcó la sacerdotisa con enojo—, si el monje Miroku no fuera tan mujeriego —enfatizó— no se hubiera fiado de su falsa belleza.
El monje sudó frío al notar la presencia de Sango y la mirada acusadora de la sacerdotisa, quien tenía la expresión de «se lo voy a decir».
—¿Qué paso aquí? —La cazadora de demonios preguntó al ver la rara escena— ¿Por qué Rin está tratando de zafarse de Sesshomaru?
Su esposo sonrío con nerviosismo en parte lo que había sucedido era culpa suya; Inuyasha bufó y comento:
—Lo que hay que hacer es buscar a esa maldita bruja para que revierta ese hechizo de amor y Rin deje su obsesión por el duende ese. —señalo con sus garras hacia Jaken que en ese momento empezaba a despertar.
—Mi amor… despertaste… ven a mis brazos… —Rin no podía mostrar más euforia y excitación, poco le importaba aquel raro líquido verde que tenía encima. Ella sólo quería estar con Jaken para sorpresa de todos. Sesshomaru gruño en señal de enojo. Era inaceptable lo sucedido, dejaría para después los cuestionamiento del por qué le pidió a Inuyasha que la entrene y no a él, después de todo ambas 'dagas' que él le había obsequiado a su protegida habían sido esculpidos con sus propios colmillos.
Sango estaba desconcertada, la sacerdotisa susurró en voz baja:
—Durante el entrenamiento Rin se lastimó, culpa de Inuyasha…
El bufido del medio-demonio hizo que la sacerdotisa se enojara más y si pensarlo dijo en voz alta:
—Inuyasha… ¡Siéntate!
Sesshomaru se hubiera burlado de no ser por el gran trabajo que le estaba dando contener a Rin. Kagome continúo con el relato.
—Inuyasha la dejo en una cueva y antes que preguntes por qué no la llevó con él… Miroku —comentó entre dientes— venía siendo perseguido por una demonesa lagarto.
—¿Qué hiciste para ser perseguido de esa manera… monje pervertido?
—Sanguito… —río con nerviosismo.
Kagome suspiró con fastidio no iba entrar en mayores detalles y se limitó a decir:
—Ellos no habían detectado que en lo profundo de la cueva estaba una bruja. Ella quería robar la juventud de Rin pero al ver al monje lo reconoció…
—Sanguito yo nunca tuve nada que ver con ella —Se apresuró aclarar—, me parece increíble haberla encontrado aquí.
El silencio era mortal; Sango miraba a su esposo con una expresión asesina. Ella no tuvo problema en comprender que si había una poción de amor de por medio seguro que era para Miroku pero no entendía cómo terminó cayendo sobre Rin y está 'enamorándose' del pequeño demonio que acompañaba a Sesshomaru.
Kagome entendió su dilema y le explico lo poco que sabía.
—Miroku se negó al decir que la conocía; la bruja se indignó tanto que dejo de lado a Rin e intento herir al monje, pero al no lograrlo tramó echarle encima una 'extraña poción de amor' para que él se enamore de ella y convertirlo en su esclavo, cuando lo iba hacer apareció Sesshomaru que sin ningún esfuerzo mató a la demonesa lagarto pero al ver herida a Rin...
—… Se molestó con Inuyasha y lo atacó; asumo que casi se lleva a la bruja por delante con ese ataque.
—Así es Sango —comentó con reproche la sacerdotisa—, bueno... la bruja intentó evadir ese ataque porque Sesshomaru arremetió contra Inuyasha, ella cayó y en ese momento Rin salía de la cueva así que…
—… Le cayó encima la poción y ¿adivino? —Cuestionó con sarcasmo—: Jaken estaba cerca. —afirmó con seguridad.
—Así es... No sé qué hará Miroku pero debemos ubicar a esa bruja… porque tengo la certeza que Sesshomaru lo va masacrar si no revertimos ese hechizo.
El gruñido del demonio y su mirada letal hizo que el monje se pusiera de color azul, sobre todo cuando escucho que Rin gritaba a todo pulmón sin lograr zafarse del demonio.
—¡¿Te casas conmigooooo… Jaken-sama?!... ¡¿Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii?!
Jaken abrió los ojos en señal de desconcierto; el monje estaba en serios problemas.
Continuará…
«N/A¹» Hi! La idea me venía dando vueltas hace rato será algo corto pero divertido y estimo terminarlo a más tardar el viernes; aprovecho para invitarlos a leer mis actualizaciones del día y que se suscriban a mi página del Facebook me encuentran con el mismo usuario. ^^
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