Los personajes de D: Gray man no me pertenecen, sino a Katsura Hoshino, la historia en general si es mía.

Hace mucho tiempo atrás existió una raza superior llamados a sí mismos como "Deidades", criaturas bellas, dotadas de gran fuerza e inteligencia, además de poseedores de la inmortalidad y de una gran bondad. También estaban sus contrarios, criaturas inferiores a ellos, muy inteligentes, pero débiles.

Aun así, los humanos eran conocidos por ser una especie obstinada, así que deseosos de la inmortalidad, comenzaron a hacer experimentos aprovechando de la bondad e ingenuidad de las deidades para capturarlos.

Así fue como la pelea más encarnizada comenzó, ambas partes perdían fuerzas, las deidades estaban furiosas por la avaricia del humano, no solo habían atrapado a sus queridos hermanos y hecho cuanto horror pudieron, les habían matado, habían encontrado su punto débil…uno que inclusive ellos desconocían tener.

La pelea duro varios siglos, ambos bandos perdían más y más de sus gentes, pero la batalla dio fin con los humanos victoriosos y las deidades completamente extintas.

Con el paso de los años, los humanos fueron recuperándose, la guerra fue puesta en el olvido y las nuevas generaciones desconocían tal bestial acto de parte de su propia especie.

Pero eso solo deja varias interrogantes, que lastimosamente jamás se podrán saber.

¿Cómo es que perdieron las deidades? ¿Cuál era su debilidad? ¿Realmente se extinguieron? O tal vez fueron obligadas a ocultarse…sea cual sea la razón, el humano debe sentirse avergonzado por su acto tan ruin y tal vez suplicar para que la "Divinidad Máxima" origen de las divinidades, no se levante y cobre venganza por su tan horrible pecado.

— La Divinidad Máxima ¿No se unió a la guerra?—pregunto curioso un niño de aproximados 7 años, cabello plateado y ojos del mismo color, portando una pijama azul con dibujitos de estrellas

—Según cuentan, si La Divinidad Máxima muere…sus hijos le acompañaran—le hablo con voz afable un joven de cabello negro sujeto en una coleta baja y ojos cafés oscuros

—Mana ¿Realmente el humano provoco algo tan feo?—pregunto con ojos aguados, el pelinegro le sonrió acariciando su mejilla cariñosamente

—Allen, eso solo es una historia para reflexionar…no sucedió realmente—

— ¿¡Enserio!? ¿Eso quiere decir que las deidades aún existen?—pregunto con un brillo en los ojos

—Te dije que era muy joven para escuchar esta historia ¿Cuándo me harás caso?—pregunto molesto un castaño de ojos del mismo color

—Debí hacerte caso Nea, aunque también ya es tarde para lamentarse—rio nervioso

—Se buen chico Allen y ya duérmete—ordeno brusco el castaño ganándose un golpe de parte del pelinegro

—Descansa—le deseo besando su frente

—Yo también quiero uno—pidió Nea y Mana solo sonrió besando su frente—No me refería a esto—hablo decepcionado de sí mismo

— No, por favor Mana…quiero saber más—le suplico el pequeño albino, el aludido negó gentilmente

—Mañana te responderé todas tus dudas, pero ahora descansa Allen—el chico hizo un puchero, pero se acomodó para dormirse

—Buenas noches Mana…Nea—lo último lo dijo a regañadientes

—Buenas noches Allen/Enano—hablaron los mayores al unísono…

¿Por qué me traicionaste? Re-realmente te amaba…te matare ¡Juro que te matare!—la oscuridad cernía a esa persona, incapaz de ver su rostro, incapaz de verse así mismo…

Los humanos ciertamente son criaturas repugnantes; y aun así no pudo evitar enamorarse de uno de ellos, protegiéndolo en la guerra…dándole inmortalidad…sin saber que él sería la causa de la destrucción de su especie.

Se creía que solo destruirían a las Deidades matando a su "Creador", conocido como La Divinidad Máxima, nadie nunca supo cómo era su apariencia, que habilidades tenia o al menos si existía.

Según los antiguos relatos encontrados hace mucho tiempo atrás, las deidades perecieron aun sin saber la causa, desintegrándose ante los ojos humanos…se especula que huyeron cobardemente tal vez a otro planeta, otros dicen que La Divinidad Máxima fue encontrada y asesinada en el acto, causando así la muerte de todos sus descendientes.

Pero hay otra teoría al respecto.

La Divinidad Máxima era resguardada, haciéndola pasar como humano…pero que solo ellos puedan diferenciarlos. Las Deidades desconocían si morirían junto a su creador, así que tomaron esa decisión, muy a pesar de que se haya negado demasiadas veces…simplemente no podía dejarles con la guerra. Con mucho esfuerzo lograron convencerlo…abandonándole a su suerte. Para su disgusto.

La Divinidad Máxima fue encontrada por un joven humano, la Divinidad oculto su verdadero yo autoproclamándose humano, ya que inclusive el desconocía si sus queridos "Hijos" morirían con él. La guerra no parecía afectarles a muchos humanos viviendo su vida normalmente, sembrando la tierra, recogiendo los cultivos, etc.

Entonces lo supo. Los humanos no llevaban a la guerra a personas enfermas o con alguna disfunción del cuerpo…a menos que no sea como sacrificios. Todas las deidades estaban en la guerra, ellos no padecían las mismas cosas que los humanos. Por eso no había excusa para no estar...a menos que estuviera en maternidad…porque si, también luchaban embarazadas

La Divinidad Máxima, sin saberlo…comenzó a desarrollar extraños sentimientos por ese joven de melena oscura y sonrisa deslumbrante, el cual no asistía a la guerra solo por el hecho de haber perdido la vista.

Ambas almas se enamoraron, La Divinidad Máxima le conto la verdad a su amado quien después de haber recibido el don de la inmortalidad y haber recuperado la vista…le traicionara vilmente.

Aunque claro, esa solo es una teoría que un tonto romántico invento para darle drama y un sentido a la de por si trágica historia.

Pero lo único verdadero, es que un humano fue bendecido por la inmortalidad y que posiblemente siga con vida…buscando a La Divinidad Máxima para destruir su maldición.

Allen se levantó abruptamente, su respiración entre cortada y empapado en sudor, la puerta fue abierta abruptamente mostrando a un Mana sumamente preocupado

— ¡Allen!—grito acercándose a su lado

— ¿Mana?—se extrañó el niño correspondiendo el abrazo

— ¿Estas bien?—le pregunto el mayor acariciando sus blanquecinos cabellos

—S-si—se separó del pelinegro, totalmente confundido— ¿Por qué lo preguntas?—pregunto mirándole

—Porque gritaste niño idiota—ambos miraron molestos al castaño recargado en la pared

—Nea—reprendió el mayor mirándole con reproche, el aludido coloco sus manos detrás de su nuca desinteresadamente

—Si sigues con esa actitud no continuaremos—sentencio dejando pálido al castaño

—Pero, pero—

—Nada de peros, Ve a Tú habitación ahora mismo—el castaño desistió, pero no sin prometer que se la cobraría después, causando sonrojo en Mana y terror en Allen

— ¿Tuviste una pesadilla?— le pregunto, Allen parpadeo varias veces

—Y-yo…no sé, tuve un sueño, pero olvide de que trataba—

— ¿Te parece si duermo contigo esta noche?—Allen asintió feliz haciendo un espacio al pelinegro

El mundo sucumbirá ante la codicia humana, los humanos causaran su propia muerte o simplemente desaparecerán…justo como ellos lo hicieron.

Allen era un niño cuando descubrió lo que era, proveniente de una familia poderosa y tan antigua como la historia, aunque su familia no era la única antigua, también estaban los Lee, los Chang, Los Camelot…Walker entre otras no tan conocidas.

Allen tenía a su mejor amigo, un año mayor que él y ciertamente siempre dudaba porque lo era, su amigo era demasiado ¿Cómo decirlo? ¿Abusador? Siempre coqueteando con las mujeres, bebiendo a pesar de ser aun muy joven, obligándole a apostar y metiéndose en líos muy grandes por su culpa.

Y también una gran amiga de la cual posiblemente este enamorado, una chica atractiva, amable, cariñosa, muy inteligente además de ser la única en no caer en los constantes coqueteos de Cross. También tenía otros amigos que solo veía cuando había una junta de familia, la cual no era muy a menudo.

Habían elegido entrar a la misma escuela, donde su abuelo era el director en esta…lo cual no le hacía querer entrar a esta.

El tiempo para el era un martirio, algunas veces sus sueños se volvían tan reales que terminaba por gritar, provocando que Mana se preocupara por él y consolara en las noches…le frustraba mas no poder recordarlos, siempre había alguien atado pero no podía ver su rostro, gruñía por lo bajo y cada vez que intentaba acercársele sus gruñidos se hacían más bestiales, lo cual en cierta forma terminaba espantándole.

—Allen, cuando miembros de la familia llegan a una cierta edad…es peligroso para ellos la existencia. Por eso debemos decirte la verdad—le había dicho una vez Mana una vez estando solos

— ¿A qué te refieres Mana?—

—Nuestra familia tiene siglos de antigüedad…Por lo tanto tu vida correrá peligro…—

—También la de Lenalee y Bak lo son ¿Ellos también corren peligro?—

—Escúchame Allen ¿Recuerdas la historia de reflexión que te conté cuando eras más pequeño?—

— ¿La de las deidades?—

—Exacto, esa historia es verdadera—el chico abrió sus ojos sorprendido—la familia Walker es la que termino con la guerra, tus ancestros fueron los que destruyeron a las deidades—

—Imposible—susurro sintiendo un nudo en su garganta—Mana, por favor dime que es una broma—suplico sintiendo las lágrimas acumular en sus ojos, el peli-largo negó

—Allen, debes entender que tu familia no es mala, ellos fueron los que les trajeron la paz—

— ¡Pero destruyeron a las deidades! ¡Eso no es paz!—cayo de rodillas—Las deidades eran inocentes…el humano solo se aprovechó de ellas—sollozo aún mas

—Allen, tu realmente eres un buen chico. Por eso nadie mejor que tú para controlarlo—el pequeño le miro confundido

— ¿Eh?—fue lo único que su cerebro pudo procesar, Mana acaricio su mejilla izquierda, haciéndole un profundo corte con sus uñas, grito preso del dolor— ¡Mana!—grito tratando de comprender porque su adorado padre le hacía eso

—Allen Walker, desde ahora tienes el poder de controlar a mi guardián—hablo el pelinegro brindándole una sonrisa, Allen estaba en shock, sujetando con fuerza su ojo izquierdo que aún no paraba de sangrar

— ¿Ma-mana? ¿Por qué?—pregunto con un hilo de voz

—Mi querido hijo, cuando tu vida corra peligro…ve al sótano, ahí hay una puerta sellada, ahora solo tú puedes abrirla—el chico cayo inconsciente después de eso, a la mañana siguiente apareció en su cama, sin pensarlo se llevó una mano a su ojo y corrió al cuarto de baño solo para ver que su rostro seguía igual, entonces para el solo había sido un sueño, tal vez una pesadilla. Suspiro aliviado y jamás le conto a nadie de eso, aunque había veces en las cuales iba al sótano donde su Padre Nea le encontraba antes de siquiera abrirlo, ese lugar estaba prohibido para cualquiera de la casa, de niño siempre tuvo la curiosidad de entrar, pero con el paso del tiempo esa curiosidad desapareció, ahora había vuelto con mayor intensidad

—Basta chaval, deja de querer abrirlo—le había llamado la atención su tío Tikky una vez cuando era niño

—Pero…realmente quiero entrar—hablo el haciendo un puchero, el mayor sacudió sus cabellos

—Escucha enano, desiste…no podrás entrar aunque lo intentes. Ni siquiera yo puedo—se quejó ahora Nea

—Eso es extraño, el Conde siempre mantuvo asegurada esa puerta, ninguno de nosotros puede abrirla…pero solo llega tu amante y la puerta se abre con tan solo su toque—

—Mana es de buen corazón, tal vez por eso—aseguro con molestia

—O tal vez porque es Humano—

— ¡Cállate!—grito su padre molesto— ¿¡Y que si Mana es humano!?—

—Cálmate Nea, no pelees enfrente de Allen—hablo Mana apareciendo en el lugar y sujetando al confundido niño, ambos mayores chasquearon la lengua—Allen, te he dicho que no puedes bajar al sótano—le reprendió sin sonar severo o como un regaño

—Lo siento…no volveré a bajar—se disculpó, lo menos que quería es que su padre se enojara con el

—No es necesario, pero es peligroso para ti—le dijo sonriéndole, el pequeño niño asintió

Tikky y Nea se fulminaban con la mirada

—Cálmense ambos ¿Qué importa que Mana sea humano?—hablo una niña colgándose del cuello de Tikky—Yo me podría considerar una aberración ¿No?—la chica sonrió siendo gentilmente apartado por Tikky

—Road, ser hibrido no te convierte en aberración andante—hablo Nea acariciando los azabaches cabellos de la niña

—Lo sé, después de todo no soy la única en la familia—hablo sonriendo— ¡Nos vemos Nea! Tikky quiero jugar—

Cuando era niño, no comprendió porque su tío Tikky catalogo a Mana como Humano… ¿Qué no todos lo eran? Aun no comprendía eso.

Su familia había hecho una gran fiesta para celebrar su cumpleaños, Mana y él se habían negado, pero jamás podrían con la familia Noé por si solos…y menos cuando se unía Nea a la discusión

—Allen, es mejor que te arregles—ordeno su abuelo en su absurdo traje de ¿Payaso regordete? Asintió mirando a su abuela quien cada vez lucia más hermosa, su cabello blanco rizado y esa piel blanca, además de poseer ojos plateados, de esbelta figura muy a pesar de su edad y un elegante vestido blanco con encaje pegado al cuerpo.

—Abuela Hevlaska—saludo el joven besando su mano

—Siempre tan galante y caballeroso…mi pequeño destructor—saludo la mujer brindándole una sonrisa, no tardo en regresar el gesto, su abuela le apodaba "Destructor" su abuelo "Mi pequeño dolor de cabeza" ciertamente todos en su familia le tenían un seudónimo.

Se despidió y subió a arreglarse, pronto llegarían sus amigos y tendría que estar al pendiente de Cross cada segundo, su mejor amigo sí que era un dolor de cabeza.

El primero en llegar fue su querida amiga Lenalee, quien portaba un sencillo pero lindo vestido negro, abierto de la parte de las piernas, su cabello negro con mechas verdes estaba sujeto en dos coletas

—Hola Allen-Kun Feliz cumpleaños—saludo la chica dándole un abrazo

—Hola Lenalee, por favor pasa—la chica le entrego una caja con papel de adorno blanco y listones rojos—G-gracias Lena. Pero no era necesario—

—Ya lo sé Allen-Kun pero yo quise hacerlo—le hablo la chica haciendo un puchero, el albino se sonrojo

— ¿Seré presentado algún día?—esa otra voz le sobresalto, mirando inexpresivo al chico pelirrojo detrás de su amiga, su ojo derecho era cubierto por un parche y el otro era de un color verde esmeralda—Hola—saludo el desconocido sonriendo ampliamente y colocando sus manos detrás de su nuca

—Ho-Hola—saludo por cortesía

—Lamento eso, Allen-Kun él es Lavi, Lavi él es Allen-Kun…mi amigo de infancia—presento la chica sonriendo nerviosamente

—Un placer Lavi—saludo extendiendo su mano

—El gusto es mío Allen—le correspondió el saludo

Allen miraba de vez en cuando a Lavi, ese pelirrojo era demasiado sociable además de que nunca se separaba de su amiga, lo cual le ponía ligeramente celoso ¿Acaso era su novio?

Pronto llego su amigo Bak, su enamoramiento por Lenalee era más que obvio pero la china no daba indicios de percatarse

— ¡Hola Bak! Al fin llegas—saludo alegre, al menos ya no sufriría solo

—Lo sé, Lo sé, mi presencia siempre es requerida—su amigo fue callado por una joven de cabello corto y naranja, vestía una blusa negra y pantalón de mezclilla además de poseer hermosos ojos ¿Rojos? Por algunos segundos se perdió mirando esos extraños ojos

— ¿Qué tanto miras? ¿Tengo algo en la cara?—pregunto brusca, se crispo por la actitud de la chica

—Fou, no debes ser grosera con él—reprendió el rubio mirando severamente a la chica

—No importa Bak—le restó importancia

—Él tiene razón. Mis más sinceras disculpas—hablo la chica haciendo una ligera reverencia, el rostro de Bak era de total asombro— ¿Qué?—pregunto curiosa mirando a su amigo rubio

—Tu-tu-tu-tú te-te disculpaste—hablo consternado y señalándola, a la chica le salió una vena palpitante

— ¡Deja de señalarme!—grito golpeándole con brutalidad—Además ¿No planeas presentarme?—sujeto a Bak del cuello zarandeándole

— ¡Eres demasiado violenta! ¿¡No puedes actuar como una persona amable!?—Allen comenzaba a creer que esa chica era algún tipo de novia

— ¡Baka-Bak!—la chica parecía molesta

—Mi nombre es Allen Walker un placer conocerte…—saludo el albino extendiendo su mano y sonriendo cálidamente

—Fou, el placer es mío anciano—la chica le correspondió el saludo, dejando tieso a ambos chicos por diferentes razones

—Soy de la misma edad que Bak—hablo Allen llorando dramáticamente, enseguida se acercó Lenalee a hablar con ellos y conociendo a la novia de Bak…que resulto no ser su novia, sino una clase de amiga de la infancia

La fiesta dio inicio, por más que espero la llegada de Cross este no daba señales de asistir, el timbre fue tocado y el corrió a abrirla, si bien su familia era adinerada, no tenían personal solo los que limpiaba la casa, lo demás lo hacían ellos…así era mejor

—Al fin abres idiota ¿Por cuánto tiempo me ibas a tener esperando?—Allen miraba furioso a su amigo pelirrojo y en su mente pasaron varias escenas que bien podía llevar a cabo

—Cállate idiota…esa no es manera de tratar a un amigo—quedo boquiabierto al ver a una rubia parada al lado de su amigo, tenía una blusa blanca de manga larga y un chaleco negro, además de tener un pantalón ajustado de cuero y botas de tacón alto

— ¿Podrías dejar de mirarme así? Harás que me sonroje—parpadeo varias veces

—Lo siento—se disculpó sonrojándose

—Pero que chico tan lindo, dime lindura ¿Tienes novia?—su sonrojo fue en aumento

—Basta Klaud, Allen solo es un crio—le reprendió, la chica sonrió enrollando su cabello coquetamente

—Por favor pasen—se hizo a un lado y ambos chicos pasaron

Toda la fiesta se la pasó entre amigos y su prima Road pronto se unió al grupo y así como inicio la fiesta finalizo, sus amigos fueron yéndose en el mismo orden en el que llegaron

— Allen—llamo su padre, se acercó a Mana—Te quedaras solo en casa ¿O prefieres ir a dormir con alguno de tus amigos?—

— ¿Por qué me quedare solo?—pregunto extrañado

—Tus tíos deben arreglar algunas cosas fuera de la ciudad, tu padre y Yo saldremos por algunas horas—

— ¿Dónde irán?—

—Es una sorpresa—fue lo único en decir

El albino se dirigió a su habitación una vez que todos se despidieron de él, estaba cansado y solo quería dormir mucho, se sacó su vestimenta y se acostó en la cama únicamente con bóxer, esa gran casa por esa noche era únicamente de él ¿Por qué no aprovecharlo?

La oscuridad de su habitación jamás fue tan espeluznante, se había quedado solo muchas veces de niño…y aunque siempre terminaba por bajar al sótano donde se sentía seguro a un sin poder abrir esa puerta y quedar profundamente dormido recargado en la misma, ahora ya no podía hacer eso, cuando le prometió a Mana no volver a bajar lo había cumplido, debía admitir que fue más difícil de lo que pensó.

Se supone que solo bajaba por curiosidad o cuando estaba asustado de algo, pero desde su promesa, había descubierto que bajaba más de lo pensado, muchas veces deseo bajar y abrazar la puerta, cuando dormía soñaba que bajaba al sótano, parecía que estaba enamorado de esa gran puerta de metal, lo cual le parecía preocupante y también estaba ese extraño sueño.

Mana le dijo que en el sótano había una puerta sellada, pero nunca nadie entro a este, la puerta del sótano estaba totalmente sellada, eso le hacía preguntarse si cuando al fin alguien lograra abrir esa puerta…debía abrir otra más ¿Los explosivos servirían?

Sin darse cuenta el sueño llego a él.

Te mataran, ¿Escuchas? Te mataran sino me liberas—esa voz suave y a la vez enojada le estremeció. Allen estaba de pie frente a algo siendo cubierto por la oscuridad

¿Qui-quién eres?—pregunto temeroso acercándose lentamente a la entidad desconocida

Tsk—siguió avanzando sin temor, esa voz ya la había escuchado, pero no podía recordar donde— ¿Qué lugar es este?—pregunto mirando a su alrededor, totalmente oscuro sin ningún tipo de luz

Eso ya lo deberías saber ¿Cómo es que ahora si me escuchas?—

¿Eh? ¿A qué te refieres?—

Olvídalo, baja y libérame antes de que alguien que no sea yo te mate—

¿Qué? ¿Planeas matarme?—

Por supuesto, tu eres solo mío—ante esa extraña declaración se sonrojo violentamente, su corazón se aceleró y sus piernas temblaban ligeramente

¿A qué te refieres con eso?—pregunto nervioso

Che ¿Qué eres idiota? Es obvio que soy el único que puede matarte—

Creo que yo paso—hablo regresando por donde vino, el ser en las tinieblas comenzó a insultarlo para que volviera

Se levantó pesadamente de su cama, froto sus ojos para adaptarse a la oscuridad, al parecer aun no amanecía

— ¿Qué extraño sueño?—se dijo así mismo levantándose y yendo al baño, pero paro en seco al escuchar una risita proveniente de algún lugar ¿Qué no estaba solo? Camino prevenido a la puerta que daba al pasillo

—Debería ser fácil encontrarlo ¿¡Porque no lo encontramos!?—

— ¡Cierra el pico Shinosuke! Cielos, para ser una deidad no eres nada agraciada—sus ojos se abrieron sorprendido ¿Había dicho Deidad?

—No me insultes idiota, muchos de mi especie fueron deformados por la materia oscura—

—Si claro, y yo soy un hibrido—

— ¡Cállate! Esas escorias no deberían existir, esas son criaturas nacidas de la traición a nuestra especie—

—No hace falta que me lo digas Shinosuke, ahora solo encuéntralo—

—Ese estúpido Hibrido, me divertiré asesinándolo—el albino estaba en Shock ¿Había un hibrido en su casa? ¿Qué rayos era un hibrido?

—Te encontré—su corazón se aceleró y su puerta fue destruida, cayó al piso desorientado, su ojo izquierdo comenzó a dolerle

Ven a mí— esa voz en su mente, era sin duda la misma que en su sueño

—Mierda, no es tiempo para alucinaciones—hablo esquivando los ataques y corriendo despavorido por los pasillos

No digas estupideces ¡Ven a mí!

— ¿¡Quien lo haría!?—Grito molesto—Dices que me mataras ¿Por qué he de ir a ti?—

Porque soy tu única manera de salir con vida— paro en seco, esas cosas le seguían y su ojo izquierdo le dolía horrores, se tocó para mitigar el dolor pero solo descubrió que estaba sangrando ¿Se habrá herido cuando la puerta fue destruida?—Tsk…entonces date por muerto

— ¡Déjame concentrar!—grito en medio de una crisis mental ¿Qué debía hacer? Después de todo no sabía si esa voz en su mente no era solo un producto de su mente…o si solo se trataba de otro extraño sueño…un sueño ¡Eso es! ¿Por qué no lo pensó antes? Sin pensarlo mucho se pellizco…varias veces pero no funcionaban

¿Qué mierda estás haciendo?—le pregunto extrañado la voz en su mente

— ¿Qué no es obvio? ¡Intento despertar!—

¡Esto no es un sueño!—

— ¿¡Y yo como voy a saberlo!?—grito desesperado y adolorido, las criaturas se aproximaban a paso veloz

¡Solo ven!—

— ¿¡Y donde carajo estas!? ¡Ni siquiera me has dicho!—

No lo sé—se produjo un silencio bastante incomodo

—Eres un idiota—hablo con aura deprimente

¡Cállate!—

Sintió un agudo dolor en su brazo izquierdo, instintivamente se hizo hacia atrás, viendo ahora a sus atacantes

—No son deidades—hablo con seriedad

— ¿¡Quién diablos te crees para decir eso!? ¡Tú estúpido hibrido!—

— ¡Se suponía que las Deidades eran criaturas hermosas, no criaturas horripilantes!—hablo furioso y sin saber la razón, ambas criaturas le miraron furiosos, sus colmillos sobresalían de su boca dejando escurrir baba, sus manos era garras y sus pies eran tipo raíces ¿Qué eran esas cosas?

—Date por muerto Hibrido asqueroso—

Cerró sus ojos esperando su final "¡Muévete!" grito esa voz en su mente, pero ya era demasiado tarde….

Fin del capitulo