Disclaimer: Pokémon no me pertenece.

Advertencias: OoC, AU.

Pareja: HotBloodShipping [Gold/Pearl].

Nota: Participante del reto: Luvdisc, enamora, del foro: Gotta Catch 'Em All!


—¿¡Podrías dejar de molestarme!? —Su voz suena ligeramente más aguda de lo usual denotando tanto la frustración que tiene como el cansancio, es obvio que Pearl no anda de humor para los «mimos» de Gold. Si es que así se le podía llamar al hecho de que el mayor empezará a tocar donde no debería.

Suelta una suave risa—. Te ves adorable cuando te molestas —indica pensando que el otro le seguía el juego como en otras ocasiones y es que a su parecer Pearl exageraba, no es como si le estuviera haciendo cosas que con anterioridad no había realizado—, ¿en serio no te gusta sentir mis manos sobre tu piel? —Coquetea descaradamente con el otro antes de acariciar una de las piernas ajenas.

Sus orbes anaranjados le ven tratando de advertirle, en serio no tiene ganas de ningún juego así que se levanta del sofá, sólo entonces es cuando Gold se da cuenta que el otro iba en serio con respecto a no tener ánimos. Así que rápidamente se levanta tras el rubio para seguirle—. ¡Lo siento! —grita sin querer, es obvio que se puso nervioso porque no le gusta (para nada) que Pearl ande molesto con él.

Ni repara en voltearlo, va rumbo a la habitación que ambos comparten y cierra la puerta tras él, usualmente no suele hacer aquello pero tiene ganas de dormir y Gold no entiende eso. Había decidido ver la película con este ya que prácticamente le estuvo rogando casi toda la semana anterior así que no podía negarse pero para empezar ni la estaban viendo —al menos en lo que respecta a Gold quien andaba tocando bajo su ropa—.

Los golpes tras la puerta dejan por fin de sonar y sonríe, agradece que Gold no sea tan insistente—. Al menos —susurra aquello antes de ir directo a la cama sin importarle mucho que pueda hacer el otro, es decir, lo ama pero en aquellos momentos quiere tener un largo sueño. Ya nunca debe dejar tantas cosas pendientes para un mismo día.

No sabe cuánto duro la tranquilidad pero fue bastante poco ya que sólo había logrado cerrar un momento sus ojos. Levanta su mirada para donde la puerta sólo para toparse con Gold en el umbral, al parecer recordó donde estaba la llave de repuesto. Y antes que pueda decir algo el otro se empieza a disculpar.

—… Yo, bueno, no quería hacerte sentir mal, pensé que podríamos hacer cosas en el sofá y no esperaba que estuvieras agotado. Perdón, vamos Pearl yo sé que me amas —Pearl no puede evitar imaginar a Gold como si fuera un cachorro rogando por su amor cosa que le hace suspirar. En serio ama a ese idiota pese a que sea un pesado la mayoría de veces.

—Ya cállate. No seas idiota, idiota —más que hablar suena a una orden lo primero y el de ojos ámbar no puede evitar quedarse callado unos minutos esperando que el otro acepte sus disculpas—, sólo metete a la cama y déjame dormir —pide antes de dejar de mirar al ajeno.

Asiente y obedece a aquella petición, retira algunas de sus ropas para estar más cómodo y se posiciona para dormir—. ¿No me darás beso de buenas noches? —indaga con una voz baja tratando de no molestar al otro.

Ante la infantil petición de su novio decide darse la vuelta para darle un rápido beso en la mejilla—. Ya duerme —pide.

—Pearl.

—¿Si?

—Te amo —luego de esa confesión se apega más al cuerpo del menor sin tocar de más, lo que menos desea es que le haga el contrario dormir en la sala como en alguna ocasión ha pasado. Aunque luego abre los ojos—. Deberías decir que me amas también —indica antes de morder su labio inferior a forma de puchero.

—Uh… claro, te amo Gold… ahora déjame dormir —pide moviéndose para quedar mejor sobre los brazos ajenos y así luego de un largo día dormir, que mejor manera que acabar abrazado con el otro.