Pecados de amor.
Gundam Wing
Por: Ivanov Shinigami
Summary: No me importa cometer todos y cada uno de estos pecados, no dejare que te apartes de mi lado Duo.
Disclaimer: Los personajes de Gundam Wing no son míos, esta es solo una historia de fanáticos para fanáticos, es ficción, no tiene ninguna relación con personas, instituciones o hechos reales. Que la disfruten.
Parings: 1x2.
Category: Yaoi, shonen ai, AU, Occ.
Raiting: es para todo público, yo señalo el NC – 17.
Warnings: shonen ai, lemon... Si consideran ofensiva esta historia, no se lea por favor, no deseo dañar u ofender a ninguna persona con el contenido de este texto, arigato.
Notas: - Diálogos –, " Pensamientos", - Sueños-, (FlasBack)
Notas 2: Inspirado en el fic Royai Les mêmes rêves de Sherrice Adjani de Full Metal Alchemist.
Capitulo 1: Ira.
En definitiva había llegado el momento de actuar. El soldado perfecto que constantemente visitaba el anden donde aquel chico de cabellera larga arreglaba su Gundam solo para estar cerca de el, debía hacer algo, antes de que su cordura colapsara. Hecho que logro sorprender a todos los demás chicos, que aquel ser de hielo que jamás mostraba sus sentimientos, Heero Yuy, preparado para morir por su misión, no estallará cual olla a presión ese día fue todo un milagro, y ellos ya se habían anticipado a su reacción.
Sabían de antemano lo que Heero sentía por Duo, solo que Heero no se animaba a decirlo y Duo simplemente no lo negaba, solo que no le gustaba ser el primero. ¿Cómo era posible que ni siquiera se animaran a decirlo?, ninguno de los dos tomaba la iniciativa.
Wufei y Trowa por ejemplo, cinco minutos antes de que el soldado perfecto entrara al andén ya se encontraban resguardados dentro de sus Gundams; implorando a los cielos que no fueran blancos del poder de su puntería por su magnum que siempre cargaba. Otros menos osados como Quatre y Hilde, ni siquiera se atrevieron a entrar ese día al andén. Duo Maxwell por su parte entro radiante y con una sonrisa que hubiera podido calmar la ira del hombre, claro de no ser porque esa sonrisa era la causa de dicho mal humor.
(Flash Back)
Hace tres días todos recibieron la tradicional invitación para asistir al cumpleaños de la señorita Relena Darlian, y como era de esperarse a esos bailes se iba en pareja.
Heero estaba leyendo un libro en el patio central del Instituto, sentado en una de las bancas de metal, a un lado de el una invitación color rosa pastel con el nombre de Relena plasmada en ella con letras doradas, la cual llamaba la atención, lo había vuelto a invitar después del incidente del año pasado. Pensaba que era un lugar relajante para poder estudiar, sin que esa niña rubia lo molestara una vez más.
Cuando un joven con apariencia atractiva se acerco a el con malicia, con trabajos había obtenido una invitación de Relena y eso por su amiga Dorothy quien se la consiguió a cambio de un poco de dinero, eso lo hacia rabiar, el rogaba por una invitación a la fiesta de su amada y el otro idiota la obtenía de la propia mano de la festejada y la miraba con desinterés, pagaría caro ese desprecio que la señorita Relena hacia el por culpa de ese ojos de hielo, como lo llamaba comúnmente y sabia como fastidiarlo, solo faltaba que la victima accediera gustosa.
- Heero Yuy, no te esperaba encontrar aquí – dijo pero el ojiazul ni se inmuto en verlo a la cara y continuo leyendo, lo que hizo que el rubio se fastidiara - y mucho menos con una invitación de la señorita Relena a lado de ti, después de que el año pasado la rompiste en la cara de la cumpleañera, ¿y ya sabes a quien invitaras este año?, ¿acaso será a la señorita Relena con quien bailaras de nuevo?, ¿te volverá a monopolizar? - fue la pregunta que dio inició a ese conflicto bélico, denominado: "Heero Vs Duo".
Heero fastidiado por aquellas palabras dejo de leer y por fin miro hacia aquellos ojos azules temerosos por su respuesta.
- No, Relena no me interesa en lo mas mínimo, no se repetirá, además de que no estoy interesado en ir – fue la fría respuesta con voz perfectamente modulada que dio el ojiazul, sonaba muy indiferente.
- Bueno, estas en tu derecho de negarte a ir, después de todo no es obligación, en ese caso, ¿te importa si invito a Duo Maxwell? – respondió un chico rubio de bellos ojos azules llamado Erick Ludock, con toda la mala intención en mente, aun que Heero no mostro un indicio.
- ¿Duo?... ¿Por qué habría de importarme? – Despego la vista del libro una vez más y enfoco al chico rubio quien solo trago saliva, cayendo en la sospecha por primera vez de que Duo Maxwell, no solo era un compañero más a su lado, no solo era un huérfano como el, no era solo un soldado, si no que además era...
- Bueno como son muy amigos, pensé que te incomodaría que otro chico invitara a Duo, pero sabiendo eso, no tengo nada mas que buscar a Maxwell, nos vemos en la fiesta Yuy – le dijo despidiéndose con una falsa sonrisa y así se alejo del chico de ojos cobalto que lo miraba fríamente.
Una pregunta se tornaba en la mente del ojiazul, ¿Qué planeaba ese tal Erick?, ahora que lo analizaba, el no era gay, estaba interesado en Relena y solo en ella, de echo estaba muy molesto cuando se entero de que rompió la invitación de la chica la primera vez, ¿Por qué estaba interesado en Duo?, pero por otra parte, ¿Por qué tendría que importarle?, Duo podía hacer con su vida lo que quisiera, no tenia nada que ver con el, solo eran pilotos de Gundams.
Cerró el libro de manera abrupta sintiéndose frustrado y se levanto de la banca dirigiéndose al cuarto, ya estaba atardeciendo y no tardaría en oscurecer, mejor iría a infiltrarse a la red de Oz para ver que tramaba, no sin antes ver aquel pedazo de papel rosa pastel, lo dudo un poco y se quedo largo rato mirándola, hasta que al final lo tomo llevándolo consigo.
Entro a su dormitorio y ahí, acostado en la cama vecina, estaba el chico de la pregunta de oro, Duo Maxwell, arqueando las cejas en señal de disgusto al no poder entender lo que decía el libro. También estaba leyendo el mismo libro que Heero, literatura, tenían examen la próxima semana, solo que para una persona tan alegre y vivaz como el ojivioleta le era difícil concentrarse en algo tan… "¿Aburrido?".
- ¡Heero! – exclamo contento Duo levantándose de la cama y dejando caer el libro sobre ella – que bueno que llegaste, necesito que me ayudes, no se que hacer, Erick Ludock vino a invitarme al baile de la fiesta de Relena, me tomo por sorpresa puesto que a mi no me interesan los chicos, pero… - dijo el trenzado confundido sentándose nuevamente en su cama.
- Hn… - fue la típica respuesta que dio el ojiazul encendiendo su computadora mientras se sentaba en el escritorio.
- ¿Me estas escuchando? – pregunto molesto el ojivioleta al ver como era completamente ignorado por el ojiazul.
- ¿Quieres ir al baile conmigo Duo? – pregunto tratando de sonar desinteresado sin despegar su mirada de la laptop, lo que provoco que el trenzado palideciera.
- ¿A… A que viene esa pregunta Heero?, ¿me estas invitando tu también? – murmuro el ojivioleta sorprendido por las palabras del soldado perfecto.
- Solo trataba de recrear la escena que tuviste antes, ¿Qué le contestaste a Erick?, supongo que no lo mismo que a mi – dijo nuevamente el ojiazul sin despegar su vista de la computadora.
- Pues, le dije que lo pensaría, no es que los hombres me gusten, solo que me tomo por sorpresa y ninguna chica que llame mi atención me ha invitado, así es que no se, mejor me niego, no soy una mujer – dijo riendo a carcajadas.
- Pero le dijiste que lo pensarías, eso quiere decir que no te son tan indiferentes los hombres después de todo, te pudo confundir con una mujer por la manera en que respondiste – volvió a decir el ojiazul.
Aunque poco diplomática y seca fue la mejor respuesta que el chico bonito pudo darle. Se puso de pie molesto, camino hasta donde se encontraba Heero, se coloco a una distancia peligrosa de él, lo obligo a mirarlo a los ojos colocando ambas manos sobre sus mejillas para que prestara atención y con voz pausada pero que bien sirvió para intimidar hablo.
- Vera soldado, existen hombres menos estúpidos que saben que no soy una mujer y soy atractivo que hasta llamo la atención de los hombres por mi larga cabellera, mis ojos con extraño color violeta, piel blanca y cuerpo delgado y atlético – dijo molesto el trenzado sin despegar sus chispeantes ojos violetas de los fríos azul cobalto.
Con el orgullo herido por haber sido llamado estúpido y por que por primera vez una persona lo despreciaba y lo peor de todo era que eso le afectaba. Se puso de pie tomándolo fuertemente de la muñeca, recordándole quien era llamado el soldado perfecto – ¡Eres patético!, ¡no se como pude preguntar eso y menos aun no se como alguien puede invitar a una molestia como tu a algún lado! – le dijo furioso a Duo, quien arqueo las cejas en señal de fastidio.
Todo dialogo quedo en el olvido, mordió su labio hasta el punto de hacerlo sangrar, se soltó del agarre del ojiazul y estampo su mano en el rostro del soldado, fulminándolo con la mirada. Dejando su mano plasmada en su mejilla al rojo vivo y saliendo de la habitación no sin antes decirle unas palabras que hicieron al ojiazul enardecer de furia...
- ¡Te demostrare cuan molesto puedo llegar a ser y como mas de una persona me deseara! – y con esa ultima frase el portazo fue lo único que se escucho en toda la habitación.
(Fin del Flash Back)
Y desde ese incidente, Duo Maxwell había procurado estar rodeado del mayor número posible de seguidores y seguidoras. Esos tres días, su dormitorio se había transformado en un sitio de regalos, sin mencionar su escritorio y los pupitres en clases, donde encontraba diariamente más de una docena de notas. Los alumnos nunca antes había estado tan celosos de Duo, por no mencionar que Heero Yuy nunca antes había deseado llevar a cabo una masacre dentro de la institución.
Quatre ya lo sospechaba, desde que su don le dijo que los sentimientos de Heero por Duo eran diferentes a los de un compañero, esas punzadas que sentía el ojiazul en el pecho al ver como el trenzado se alegraba de recibir más y más regalos e invitaciones a comer o simplemente una insinuación lo estaban volviendo loco.
Aunque frente a el trataba de parecer sereno, cualquier movimiento en falso que hacia Duo con alguien mas bastaba para hacerlo gritar y maldecir a los cuatro vientos, claro, en su cabeza solamente, no dejaría que vieran como eso le afectara, no le daría el gusto a ese baka trenzado.
Y así pasaron los tres días de no pensar en nada que no fuera Duo Maxwell, no lo podía superar, no podía concentrarse en su trabajo, ni en las misiones, ni en nada.
Pero el día de la fiesta, una acción solamente basto para que probara su ira, fue la gota que derramo el vaso, ver como otro hombre que no era el le había robado un beso frente sus ojos del ojivioleta sin importarle nada, habían desatado toda esa irá y celos que ya no podía controlar por mas tiempo, ese era el plan de ese bastardo de Ludock, vengarse de lo que le había echo a Relena utilizando a Duo, ahora todo tenia sentido, y el trenzado como estaba molesto, le seguía la corriente con tal de hacerlo rabiar.
Después de la fiesta, el doctor J los cito a todos en el andén general de la colonia 01. Aclararía todo eso ese mismo día.
Entro al anden furioso después de cambiarse ese estorboso traje, ya se había hartado de todo eso, todo el día estuvo detrás de Duo hasta en la fiesta, cuando de pronto ese idiota de Ludock lo tomo por la cintura, lo miro como si lo retara y sin mas por hacer le planto un beso al trenzado, el cual solamente se sonrojo.
Les ordeno a todos los que estuvieran ahí, incluyendo a Trowa y Wufei que estaban encerrados en las cabinas de sus gundams que salieran. Ellos obedecieron sin objetar nada, la cosa se pondría muy fea, aun que a Wufei no terminaba de gustarle pero tenía que acceder, la voz y rostro hecho una furia de aquellos ojos como el mar ayudo bastante. Cerro de un golpe la puerta de acero y la aseguro. Estando los dos a solas hablo sin importar que su voz traspasara las gruesas paredes de metal.
- ¡Duo!, ¡¿se puede saber por que te estabas besando con el imbécil de Ludock? – grito airado acercándose a Duo, quien solo se limitó a verlo de reojo desde la cabina de su gundam.
- No es ningún imbécil, por lo menos el se dio cuenta que no soy una molestia y no como tu, y con quien me bese no creo que sea de tu incumbencia - le dijo sin prestarle mucha atención y siguió con su labor.
- ¡Basta! – grito subiendo al gundam del trenzado y topándoselo cara a cara sumamente enojado.
Duo, quien se encontraba de pie frente a la cabina alzo por primera vez la vista al escuchar ese "basta"de manera desesperada y no lleno de frialdad como últimamente se expresaba. Pero para su sorpresa Heero Yuy ya no se encontraba debajo del gundam a unos metros de el, había escalado hasta quedar frente a el haciéndose, se dejo caer de lleno en la cabina, topando con el asiento sin poder hacerse mas hacia atrás y quedando en medio del metal y del hombre que lo miraba intensamente con ese precioso par de ojos azul cobalto, que así como podía impresionarlo de la misma manera podía hacerlo temblar.
Fuera de si le alzó la barbilla con una de sus tibias manos y sin importarle que mas tarde se enfrentaría a sus golpes, lo beso desenfrenadamente. Las mejillas de Duo se tornaron rojas y sus bellos ojos amatistas se agrandaron por la sorpresa, solo podía apretar la dura piel del asiento de su cabina, el soldado perfecto lo estaba besando.
Un beso tan apasionado que jamás lo había sentido, un sabor sumamente adictivo, la mezcla de odio e indiferencia no ayudaban mucho, pero fue un buen motor para accionar aquel sentimiento que ya no podía guardar Heero.
Cuando sus cuerpos exigieron aire, se separaron lentamente, Duo sintió como su labio inferior seguía la misma trayectoria que los labios de Heero, lo mordía de una manera muy seductora hasta que este se soltó, quedándose con los labios ligeramente enrojecidos por la pasión, unas mejillas más rojas que un tomate y unos ojos completamente sorprendidos, pero el ojiazul aún la miraba molesto, sus ojos azul cobalto aun chispeaban de rabia.
- Dime que beso mejor que ese desgraciado, ¿crees que teniéndote todos los días cerca de mí, puedo olvidar que eres el único hombre que me produce celos al estar con alguien mas?, ¡maldita sea Duo!, no puedo soportar que otros te miren y mucho menos besen al hombre de quien estoy enamorado – le dijo con furia apretando los hombros del ojivioleta con sus manos, el cual lo miraba de una manera sorprendida aun sin decir nada.
El sorprendido no solo fue Duo, que había hecho hasta lo imposible por escuchar esas simples palabras de afecto. Ahora Heero también quedo sorprendido por la reacción de Duo hacia el. Una mueca en forma de sonrisa se dibujo en los labios del ojivioleta y con un brusco jalón lo atrajo hacía el, devolviéndole con el mismo frenesí ese beso, haciendo que Heero cayera sobre el en el asiento de la cabina.
Lo tomó entre sus brazos y lo abrazo fuertemente, pegando su cuerpo al del ojivioleta, sin apartar sus labios de los de el se deshizo de todas las herramientas que les estorbaban. Mientras Duo ya ocupaba sus manos en algo más. Quedando como testigos los gundams y más aun el mismo DeadSycthe, que Duo Maxwell solo le pertenecía al soldado perfecto.
Al poco tiempo mientras jugueteaba con sus castaños cabellos sueltos, alcanzo a susurrarle sensualmente al oído.
- Duo, júrame que siempre serás mío - El trenzado solo pudo darle la débil respuesta en un quejido de placer.
Entonces, se puede decir que para calmar la irá del soldado perfecto, que daría su vida por su misión y por sus seres queridos, no se necesita otra cosa que no sean los labios de la única persona que lograba hacerle perder la razón, que lograba sacar a relucir su sentimiento de ira, ese era Duo Maxwell.
Continuara…
OoOoOoOoO
Notas de la Autora. Palabras dulces de un conejo:
¡Ohayou!, He regresado después de una larga travesía ja, ja, ja, espero que me hayan extrañado durante este tiempo que me he ausentado ja, ja, ja (se oyen grillos al fondo, nadie me extraño T.T).
Explico rápido, este es el Capitulo 1 llamado Ira de este fic titulado Pecados Capitales, espero que les guste, es que con la universidad no he tenido tiempo de subir los demás fics rápido, además de que en este momento estoy de vacaciones, pero hay mas tiempo de subir los demas XD, pero ojo, prometo no tardar demasiado, es frustrante no terminar ninguno de mis fics (Bueno casi ninguno).
Este fic nació por que cada uno de nosotros posee los pecados capitales, solo que Heero no los deja relucir como cualquier persona normal, ósea que este fic es desde su punto de vista, veremos como cada pecado sale a la luz gracias a lo que Duo le hace sentir XD.
Lo que me queda por decir es lo de siempre...
Dudas, criticas, comentarios, jito matazos, naranjazos, ladrillazos y todo lo que termine en zos es bien recibido, no me enojo, todo menos virus ya saben. Dejen reviews porfis, porfis, mientras mas dejen mas rápido subo el otro cap (chantaje ¬¬) jejeje n-n, no de verdad, es una estimulación para mi, lo juro jeje.
Matta ne!
Propaganda: lean Si Volviera a mi, Los Templarios, La Atlántida, Mi chica de hielo, Abecedario de amor, Abecedario amoroso, 100% Perfecto Girl, Amor de sangre, Carta de amor, Mi chica de hielo y Water Kiss n-n. ¡Chuus! (¡Besos!).
