Esta es una historia que tengo en mente hace bastante, espero que les guste porque estoy poniendo esfuerzo en ello. Es la primera historia que escribo por este medio, a pesar de haber escrito historias anteriormente todavía no logro familiarizarme del todo con este sitio, así que pido disculpas si ven algún tipo de error.

Sé que el capítulo es corto, solo es una introducción.

DISCLAIMER: Los personajes no son de mi autoría, solo doy uso de ellos para mi historia.


Walter observaba a Paige como si su vida dependiera de ello. Sus ojos cerrados, sus labios entreabiertos, sus brazos bajo su cabeza y su cuerpo bocabajo, definitivamente esta mujer le parecía realmente hermosa.

Era consciente que si ella se enteraba de alguna manera que él la dejaba de observar solo cuando parpadeaba mientras dormía aquella noche, probablemente le preguntaría por qué la observa y por qué no siguen con su trato de "solo compañeros de trabajo", no tenía ganas de pensar en una excusa para justificarse. Sonará raro siendo Walter O'Brien IQ 197, pero no quería negarse más.

¿Cómo había llegado una bonita Paige dormida a sus ojos? Digamos que en una "fiesta" del equipo ella tomó de más, terminó ebria y diciendo cosas carentes de coherencia, pero que al mismo tiempo le causaba gran ternura, con paciencia la hizo dormir luego de que ella le diga que se vaya y que no la mire mientras descasaba.

Claro que sus pedidos le dieron igual, él no solía seguir órdenes, menos si podía tener el placer de ver a Paige dormir.

Así que ahí estaba, viendo como ella dormía cuan acosador. Verla dormir era como el paraíso, ella se veía tan tierna incluso con los ojos cerrados descansando con una respiración apenas perceptible.

Aunque, Paige siempre se ve bonita…