Hola, tenía esta idea rondando en mi cabeza y tenía que escribirlo, es demasiado hermoso. Espero les gusté.
Experiencia infantil.
-Ayer-
"No olvides que tenemos que ir por tu padre a la estación mañana, Izuku" Recordó la madre del ya mencionado como por centésima vez, pues estaba muy emocionada de que su esposo por fin regresara a casa luego de que su trabajo lo hubiera llevado lejos.
"Entendido, entendido. Estaré allí después de clases" Dijo con una sonrisa "Nos vemos mañana por la tarde, oka-san" Se colocó sus zapatos y emprendió su marcha de vuelta a los dormitorios de la Academia.
-Hoy-
El entrenamiento se podía definir de una manera: brutal. Si bien para todos había sido más bien llevadero, Izuku había tenido un mal momento intentando lidiar con Bakugou, luego de que este fuera emparejado junto a él. El entrenamiento: Luchar cuerpo a cuerpo sin utilizar sus quirks. Estaba de más decir que Bakugou no se había medido con sus puñetazos, desde el inicio él no había hecho más que esquivar los arrolladores golpes de su contrincante, el problema era que el del quirk explosivo parecía haber estado entrenando mucho, demasiado, su combate cuerpo a cuerpo. Tal vez debido a la humillación que recibió en su último combate contra, precisamente, Midoriya.
"¡Muere!" Gritó Katsuki mientras pateaba fuertemente el estómago del otro sin medirse, es más, parecía que quería hacer todo el daño posible. El peli verde se sujetó el área afectada, se le había ido el aire de los pulmones.
"Ya basta" Indicó severo Aizawa mientras se colocaba rápidamente entre ambos "Bakugou, el punto del entrenamiento era desarrollar y evaluar el combate cuerpo a cuerpo de tu compañero, no estás en una pelea real" El rubio solo chistó y desvió la mirada enojado. "Midoriya" Llamó el profesor "Ve con Recovery Girl, hasta a mí me dolió esa última patada" Ordenó mientras daba por terminada la sesión.
…
Todos, menos Midoriya claro está, regresaron a su salón de clases luego de ducharse y volver a vestirse. El entrenamiento había sido agotador, se notaba quienes practicaban seguido ese estilo de combate.
Los labios de Recovery girl se apartaron del chico, este sentía su energía drenarse pero su cuerpo aliviarse al mismo tiempo.
"No faltas cada semana, Midoriya-san" Regaño con serenidad la anciana "¿Por qué ya no me sorprende?" El chico solo pudo sonreír, los parpados le pesaban.
Dio las gracias y se marchó. El camino hasta su salón fue rápido y por inercia, conocía el camino como la palma de su mano, arrastraba los pies. Cuando llego y abrió la puerta, se sorprendió de encontrar una cara extraña ahí. Un alumno que parecía mayor a él estaba de pie junto a Aizawa al frente del salón.
"Ah, Midoriya" Habló Aizawa "Que bien que llegas, entra, nos servirás para demostrar el punto de este tema".
Sin pensarlo mucho caminó hasta quedar frente al escritorio del profesor frente a la clase.
"Este de aquí es Minamoto, es un estudiante que va un año avanzado a ustedes, tiene un quirk muy especial que me ayudará a probar mi punto" Explicó el profesor "Empieza a cargarlo" Le dijo al joven Minamoto mientras los ojos de este se tornaban rosáceos "Es muy importante que sepan, que no importa que tan poderosos sean" Empezó a explicar "Siempre se encontraran con quirks que podrían comprometerlos de alguna manera" Hizo una pequeña pausa y se dirigió al chico que estaba frente a ellos dos "¿Midoriya, tienes algo importante que hacer en lo que resta del día?" Interrogó, tal vez por el cansancio, tal vez por no haber dormido anoche esperando a que ese día llegara, o tal vez la patada de Kacchan lo había aturdido, pero el joven negó lentamente con la cabeza y rascándose un ojo somnoliento "Bien" Dijo Aizawa "Lánzaselo" Le indicó al otro alumno.
Cuando los ojos del alumno mayor empezaron a destellar, Midoriya pareció darse cuenta de lo que ocurría, un momento de lucidez le hizo recordar a su padre quien llegaba hoy y él debía estar en la estación de trenes después de clases. Por un acto reflejo se agachó en el momento en el que el quirk de su senpai salía disparado de sus ojos. Escuchó una exclamación de sorpresa por parte de Aizawa por sus acciones pero ya era muy tarde, el rayo de los ojos del mayor ya había salido disparado y en una milésima de segundo atravesó el salón en forma descendiente, al ser Midoriya más bajo en estatura este paso por encima de las cabezas de Shoji, Kyoka, Sero, parecía que le iba a dar a Tokoyami pero al ser este bajito, se salvó por un pelo… o por una pluma en este caso.
El desafortunado fue Todoroki quien solo pudo abrir ligeramente los ojos por la sorpresa al verse envuelto en un aura rosa, en unos segundos sintió como su conciencia se iba desvaneciendo a cada momento, era muy curioso, pues sabía que su conciencia se iba, pero sentía mucha paz a medida de que cerraba los ojos y un sentimiento de… nostalgia.
El salón quedo en silencio, nadie movía un músculo. Atónitos observaron como el cuerpo de Todoroki se encogía envuelto por una luz cegadora. Cuando la luz se disipó, solo quedo un pequeño cuerpo en su lugar.
"¿Un… niño?" Interrogó Sato observando con shock a su compañero de al lado "Lo convirtió en un niño" Repitió afirmando su oración.
Y así era, como sí hubiese regresado en el tiempo, Todoroki de hace 13 años estaba sentado sobre una silla muy grande para él, parecía tener unos 3 años como mucho, sin poder ver más allá del gran escritorio que tenía enfrente. Un sonoro Awwww se escuchó por parte de las chicas, y es que el bebé que tenían en el salón era de las cosas más tiernas que nadie hubiese visto jamás.
La palmada que Aizawa se dio en la frente llamo la atención de todos.
"Midoriya quienes decirme ¿qué demonios ocurrió?" Preguntó esté intentando bajar su cabello.
"¡P-p-p-perdón!" Exclamó este, el cansancio parecía habérselo esfumado "¡Lo olvide! Hoy tengo que ir con mi madre a la estación" Hablaba frenéticamente "Y-y-y estaba cansado porque Kacchan-" fue interrumpido por el susodicho.
"¡Maldito Deku, no me metas en tus asuntos! ¡Muérete!" Gritó como suele hacerlo.
Un hipeó interrumpió la discusión que se encontraba al frente del salón. Todos regresaron su mirada a la parte posterior del mismo. El pequeño, quién había sido olvidado momentáneamente, empezaba a dar signos de querer llorar. No sabían si era por el repentino gritadero o el hecho de encontrarse en un lugar "nuevo", pues al ser un niño pequeño no se ubicaba dónde estaba, pero el pequeño rápidamente miro en todas direcciones intentando encontrar un refugio.
Miro al frente hacia arriba, donde una enorme cabeza de cuervo lo miraba, ojos penetrantes, dio una exclamación, casi un grito del susto. Miró a su derecha, un hombre robusto con labios carnosos y apariencia de tipo malo lo miraba desde arriba, lo cual solo lo hacía más aterrador. Miró a su izquierda, una chica de apariencia amable y suave. Sin pensarlo, y como pudo, se bajó de la silla y corrió a aferrarse de la falda de la susodicha. Esta se sorprendió sin saber qué hacer.
"Oh, debe estar asustado" Habló de repente el alumno Minamoto "Es normal pues no sabe dónde está ni donde están sus padres. Normalmente buscan a la figura que más confianza les inspira, es como un instinto, aunque no recuerden quienes son, su instinto les dice que ya conocen a esa persona y que los cuidará" Explicó basado en su experiencia "Es curioso, pues el 99% de las personas que eh convertido en niños buscan a una mujer" Finalizó su explicación.
"Simplemente genial" Dijo sarcásticamente el profesor del curso "¿Quieres decirme cuánto tiempo estará así?" Preguntó.
"Perdón, Aizawa-sensei. Pero usted me dijo que lo cargara todo así que estaba al 100% de mi capacidad" Se disculpó el joven "Yo diría que entre unas 16 a 17 horas, depende de la edad" Reveló.
La mandíbula de todos cayó estrepitosamente. Perfecto, ahora tendrían que cuidar de Todoroki bebé por demasiadas horas.
Momo miró al niño que seguía sin querer despegarse de su falda, la miraba con ojos suplicantes y un poco vidriosos por las lágrimas.
"Yo lo cuidaré" Dijo sin pensarlo. Al ver la cara de interrogación de todos, incluidos Aizawa y Minamoto, agregó "Parece sentirse protegido conmigo, y ha corrido hacia mí en cuánto me ha visto ¿no?" Lo sujetó por debajo de las axilas y lo levantó para sentarlo en su regazo "Creo que me tiene confianza".
"De hecho" Murmuró el profesor viendo como el niño se abrazaba de inmediato por la cintura al cuerpo de su compañera y escondía su rostro en ella. Dio un suspiro pesado, había pensado en tener esa clase a esa hora porque era la última del día, pensó, erróneamente, que Midoriya no tendría nada que hacer y seria el perfecto conejillo de indias. Todo se había salido de control muy rápido "Bien, te agradezco Yaoyorozu, desde este momento lo pongo a tu cuidado porque sé que eres quizá la alumna más responsable y sabrás manejar la situación" Aizawa tenía una mezcla de pesadez y a la vez un tono de disculpa en su voz "Nada salió como esperaba, el punto de esta lección era demostrarles que no importa que tan poderosos sean, o que tan bien dominen sus quirk. Siempre deben estar preparados para una situación inesperada y saber analizar a su enemigo antes de que este ataque. Porque puede dejarlos indefensos, como pueden observar en el caso de Todoroki".
La clase siguió con Aizawa explicando maneras de evitar ser desarmado en un instante, Midoriya disculpándose reiteradamente por no haber estado en todos sus sentidos y el alumno de segundo año retirándose al ya haber prestado su servicio.
La clase iba por la mitad cuando Yaoyorozu sintió como Todoroki se movía en su regazo por fin. No se había despegado como por media hora de ella. Entonces separó su rostro y miró hacia arriba, hacia su salvadora, como la había nombrado ya. Momo se sintió incomoda por la directa mirada del pequeño quien la observaba con grandes ojos brillantes, llenos de ilusión y que parecían escudriñar cada facción de su rostro.
Miradas curiosas de todo el salón observaban como estos dos se miraban fijamente, Yaoyorozu parecía hipnotizada por aquellos ojos heterocromáticos. Jirou no pudo evitar soltar una pequeña risa, lo que saco de su ensoñecimiento a la de cabello oscuro. Su rostro se tiño de rosa al ver cómo, de vez en cuando, las miradas de sus compañeros se desviaban para mirarlos. Sin embargo, al pequeño Todoroki parecía darle igual, el seguía mirando fijamente el rostro de aquella mujer.
…
Las clases por fin habían finalizado, la campana sonó y todos se levantaron de sus asientos. Todos menos Yaoyorozu quién hablaba con Aizawa.
"¿Segura que puedes hacerlo?" Interrogó este "Fue, en parte, mi culpa. Puedo llevármelo conmigo" Dijo para luego extender sus brazos. A lo que el pequeño Todoroki solo atinó a abrazarse con más fuerza y volver a ocultar su rostro en el cuerpo de la chica. Esta, al no estar acostumbrada, dio un pequeño brinco.
"N-no se preocupe, Aizawa-sensei" Expresó no tan segura como a Aizawa le hubiera gustado "Yo puedo hacerme cargo de él. Además, solo serán alrededor de unas 16 horas, ¿no? ¿Qué tan difícil puede ser?" El profesor la miró con resignación, parecía ser la única opción así que, agradeciendo una vez más, se retiró del salón esperando que nada malo ocurriera.
La chica, en realidad, no estaba muy segura de que hacer. Nunca había cuidado de un niño y no tenía hermanos menores, la única experiencia que tenía eran el sentido común, lo que alguna vez había leído en algún libro y los ejemplos en persona que había presenciado de las amigas de su madre o en los eventos a los que llevaban bebés. Hubiera deseado haber puesto más atención.
Intentó ponerse de pie, pero de inmediato sintió como Todoroki se negaba a abandonar su posición, quizá temiendo a ser separado de ella. Lo sujeto de los costados intentando separarlo, pero este seguía reacio.
"¿Necesitas ayuda?" Interrogó Iida acercándose a ella por un lado "No tengo hermanos menores, pero recuerdo como mi hermano me calmaba cuando era pequeño"
"También quiero ve-" Empezó a hablar Aoyama pero de inmediato se vio interrumpido.
"¡Quiero ver!" Se acercó corriendo Ashido cuándo ya hubo guardado sus cosas "¡Es lindísimo!" Exclamó, pues, de hecho, lo era.
Pronto se vio rodeada por todos sus compañeros quienes veían unos con asombro y otros con recelo, como era el caso de Bakugou quién no quería aceptar que le daba curiosidad.
"¡Oh! Mira cómo te abraza, pareciera que no quiere dejarte ir" Molestó Jirou murmurando entre dientes sabiendo perfectamente los sentimientos que tenía su amiga por el joven. Algunas risas se escucharon y algunos otros comentarios parecidos al de Jirou.
Todo el salón se silenció cuando escucharon los quejidos del pequeño quién parecía abrumado por la situación, empezó a temblar al sentir el llanto aproximarse. Yaoyorozu, como por instinto, colocó una mano detrás de la espalda del niño y acarició con movimientos muy suaves, logrando tranquilizarlo en el acto.
Todos sus compañeros, sin excepción, se sonrojaron por la escena presentada por su compañera frente a ellos.
"Yaomomo, perdona que te lo diga, pero te ves lindísima actuando como una madre" Comentó sin poder callarse la boca Kaminari, quien era uno de los más sonrojados. Muchos de ellos, en silencio, asintieron estando de acuerdo con el comentario.
"¿Pero qué dices?" Preguntó avergonzada la chica, luego soltó un suspiro "Chicos, no quiero ser grosera, pero realmente creo que debemos darle espacio" Inquirió con los ojos cerrados.
"¡Estoy de acuerdo, chicos!" Intervino el presidente del salón de inmediato "En vez de ayudar, estamos estorbando" El chico de gafas se volteó hacia su compañera "Lo dejo en tus manos Yaoyorozu-san"
…
Si les gustó no olviden dejar sus comentarios, tengo una meta de comentarios y hasta no llegar a ella no subiré la segunda parte, donde está todo lo bueno 7u7 Besos!
