Mi corazón pesaba enormemente, esta vez, me había pasado… no debí haberle gritado aquellas cosas a Nowaki, no cuando sólo él quería saber el motivo de mi perturbación. ¡Estúpido Shinoda-san! Todo había sido por causa de él.

°°°Flash back°°°

-¡Kamijou-kun… hace tanto tiempo! – me saludó en el tren que me llevaría de regreso a casa

-Shinoda…san…

-¿Así es como saludas a alguien que no has visto en años? – preguntó, acercándose un poco más

Instintivamente, retrocedí un poco. Era una suerte que tuviese que bajar en la siguiente estación.

-¿Qué sucede? ¿Ya no te agrado? – nuevamente acortó la distancia entre nosotros

-Nunca me has agradado – pensé

-¿Acaso serán… los celos de tu nuevo amante? – preguntó con intención clara

Lo miré con sorpresa, ¿Cómo sabía de Nowaki?

Él sonrió ante mi sorpresa.

-Siempre he amado esa expresión tuya de sorpresa pero… estoy algo molesto, ¿Sabes?

Las puertas se abrieron, permitiéndome la salida.

Anticipándose a mis movimientos, Shinoda-san me tomó del brazo, bajando conmigo.

-¿Qué cree que hace? – mascullé molesto

-Tendremos una charla – explicó en voz baja

Me zafé de él bruscamente, con el enojo aumentando en mí.

-¿Quién te crees? ¡No tenemos nada de qué hablar!

Me sentí intimidado por su mirada, ¡El demonio Kamijou se sintió intimidado por vez primera!

-Andando, llamamos la atención – me jaló a la salida

Mi corazón latía fuertemente, ¿Qué tal si Nowaki estaba fuera de la estación esperándome? ¿Cómo le explicaría este asunto de amanecer en camas extrañas cuando era más joven? Rogué porque no estuviese ahí.

-Su nombre es Kusama, ¿Cierto? Kusama Nowaki…

Mi corazón dio un vuelco, ¿Qué tanto sabía él de mi vida?

-¿Por qué sabes eso?

¿Mi voz estaba temblando?

-Al fin encontré tu punto débil… ¿Qué tiene ese chico de especial?

Realmente me sentí desesperado, Nowaki era mi punto débil y este tipo era capaz de cualquier cosa con tal de salirse de la suya.

-Seamos conscientes, él es universitario y, por si no fuera poco, estudia medicina, ¿Realmente será capaz de protegerte en todo sentido?

¿Cuál era su punto?

-Creo que ahora entiendes mi dilema pero… - me acorraló contra un árbol del parque - ¿Cuánto tiempo durará ese tipo llamado Nowaki?

La sangre se me heló al saber que él me estaba chantajeando con dañar a Nowaki, ¿Realmente sería capaz de hacer algo tan atroz?

-¿Por qué hacer esto? – pregunté con miedo – Eres un hombre casado y con un hijo…

-El primer amor no se olvida, Kamijou-kun – murmuró, acercando peligrosamente su rostro

-Shinoda –san… pare por favor – rogué

Dejó escapar una risita.

-¿Por qué habría de hacerlo? Al fin puedo tenerte para mí…

Cerré los ojos con fuerza, tratando de pensar en el bien de Nowaki. Esperé unos momentos sin que nada ocurriese, abrí los ojos luego de unos instantes.

-Es hora de que te acompañe a casa – murmuró divertido

A cada paso que daba sentía temor, temor por toparnos con Nowaki y que algo malo pasara.

Llegamos al edificio en donde giré para impedir que me siguiera hasta mi departamento.

-Por favor, será mejor que hasta aquí llegue usted – expliqué

-No importa, seguiremos viéndonos – afirmó

-¡Eso no sucederá! ¡Tú y yo tenemos nada que ver!

-Será mejor que te cuides, Kamijou – kun – se dio media vuelta, empezando a alejarse – También cuida muy bien de Nowaki, la ciudad ya no es segura…

Lo mire, petrificado de miedo.

Llegué al departamento, aún sintiéndome impotente ante las palabras de Shinoda –san.

-¡Hiro-san, bienvenido! – me recibió Nowaki

Aún me hallaba un poco perdido en mis pensamientos.

-¿Hiro-san?

-Oh, lo siento…

-¿Estás bien? Pareces algo perturbado…

-No es nada, sólo estoy algo cansado – respondí, dirigiéndome hacia la cocina para beber un poco de agua.

Nowaki cerró de un portazo el refrigerador, sujetándome de las muñecas.

-No trates de engañarme, Hiro-san – habló seriamente - ¿Qué sucede?

No podía engañarlo pero al menos debía aparentar.

-¿Qué? ¡No seas idiota! – respondí, zafándome y caminando hacia la sala

Nowaki volvió a tomarme de las manos y yo intenté zafarme, ocasionando que ambos cayéramos al suelo con pesadez.

-¡Para, Nowaki! – exigí, tratando de quitarlo de encima de mí

Nowaki se hincó, estrechándome entre sus brazos.

-Confía en mí, Hiro-san – murmuró

No deseaba que él notara mi temblor. Sin pensarlo, lo aparté con rudeza.

-¡Deja de decir tonterías! ¡He dicho que…!

Para cuando reaccioné, supe que había lastimado a Nowaki sin querer.

-Ah… yo…

Una llamada de emergencia a su celular interrumpió.

-Lo siento, debo irme al hospital – dijo, tomando su maleta y saliendo sin decir más

Ni siquiera pude pedirle perdón…

Nowaki…

°°°Fin de flash back°°°

Mi mundo era Nowaki y, si las cosas no estaban bien entre nosotros, significaba que mi mundo no estaba bien.

En cuanto él regresara, le pediría perdón por mi comportamiento y le diría alguna excusa… No era bueno mintiendo pero debía intentarlo por su bienestar.

El timbre sonó.

Me levanté de inmediato, con la esperanza de que fuese Nowaki. Sin embargo, me llevé una desagradable sorpresa.

-¿Salió de nuevo? – preguntó Shinoda-san


JOJOJO ESTÁ RARO PERO TENÍA GANAS DE ESCRIBIR OTRO FIC XD