Había un pueblo en medio del bosque, donde todos vivian en paz y en armonía, conviviendo uno con los otros, humanos y pokemons, incluso en el bosque había nuevos pokemons que aun no se habían descubierto, y algunos jóvenes iban a pasear al bosque para observar aquellos pokemons curiosos, pero claro, estos jóvenes, y los ciudadanos tenían prohibidos capturar estos pokemons, ya que aun le estaban estudiando, pues eran demasiados pokemon nuevos y se requiere tiempo y paciencia para estudiarlos. Era un día maravilloso, y mas para un chico de unos 12 años que por fín conseguía su primer pokemon, pero cambiará su vida cuando vea el pokemon oculto que se ''añadió'' a su equipo sin que el se diera cuenta… era extraño, ese pokemon…no era normal. Su primer pokemon era un charmander, pero había otro más… como si hubiera aparecido de repente en una poke ball suya.
Ese pokemon era muy raro…era de tipo fantama. El pokemon tenia un gran poder…demasiado poder, ¿ que diablos era ese pokemon? No se sabía, solo sabe que tenia un inmenso poder y con ello aprovecharía la suerte.
No se dio cuenta de las consecuencias de tener ese pokemon, hasta que pasaron 6 años…el pueblo estaba totalmente vacía, no había ni rastro de pokemon, personas, ni nada… se veía una niebla inmensa y aquel mismo chico, corriendo por su vida, mientras que sus ojos cristalinos reflejaban terror, tristeza y dolor, sus lágrimas recorrían por sus mejillas hasta caer en el suelo, pero se tropezó con una piedra pegando un grito de dolor, sintiendo como su tobillo sufrió como una gran punzada. Miraba de reojo hacia atrás viendo una silueta de pokemon pero el hermano del chico apareció delante del chico, con una gorra en su cabeza de color azul y el pel revuelto y castaño, con un pikachu en el hombro que salió al combate, poniendose enfrente de su entrenador. El hermano mira de reojo al chico que aun estaba en el suelosorprendio de que su hermano siguiera hay..vivo-
Hermano: ¿ a que esperas? ¡ sigue corriendo! ¡ yo le entretendré!
el chico, atónito y conmocionado, le saltean unas lágrimas de entre tristeza y alivio, asintiendo suavemente, incorporandose suavemente aunque quejandose de dolor por el tobillo empieza a correr hacia el lado contrario de su hermano, mientras miraba hacia atrás muy preocupado por su hermano, por un momento se pensó no dejarle solo, pero sabía que su hermano era muy cabezota, y por eso no se lo pensó dos veces. Cuando estubo unos minutos corriendo se iba parando poco a poco, exhausto, cayendo de rodillas bastante cansado, cerrando los ojos jadeando, cuando oyó el grito de su hermano a lo lejos-
hermano: ¡ AAAAH! ¡ PIKACHU NO!
el chico miró detrás de el aún con los ojos mega abiertos, temiendo lo peor, pero no podía retroceder, no puede…ese pokemon iba a por el, y a por todos que se interponían en su camino. Llorando a lágrima viva siguió corriendo tropezandose de vez en cuando pero no dejará que su cansancio le gane. Cuando llegó a un descampado cayó de rodillas sintiendo enormes mareos y sus ojos empezaron a sangrar, cuando se dio cuenta por la sangre que caía de la hierba levantó ambas manos hasta mirarselas, con puro terror-
n-no…..
¿?: ggguuuussssttttt
se oía justamente detrás de aquel muchacho, era una voz aterradora y susurrante, que podría dar escalofrios a incluso al mas valiente. El chico miró poco a poco hacia atrás pegando un grito de puro terror, pero no podía verse lo que pasaba, pues la niebla se densaba mucho mas y poco a poco…
después de 20 años, nadie sabe de la ciudad labanda, todavía...
fin del capitulo
próximamente capitulo 2.
