bueno aqui va mi intento de historia, seria genial que nadien la leyera ya que no es muy original, pero la tenia hace mucho tiempo ademas de que no pierdo nada con ponerlo aqui, bueno sin mas espero que les guste y si no...bueno entonces...no se :P

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no pose ningun derecho sobre ningun personaje de Naruto ya que son propiedad de masashi kishimoto

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Era un día muy normal en la aldea de Konoha

Era un día muy normal en la aldea de Konoha. Los niños jugando libremente por el parque, las madres viendo a sus hijos entretenerse… y unos cuantos ninjas preparándose para sus misiones. Como dije todo era normal…pero si nos adentramos un poco podremos ver a un joven de alrededor de unos 4 años en una casa que estaba bastantemente desordenada. El chico era de pelo rubio y tenía su pelo de una forma muy puntiaguda. Sus ojos era de un color azul cielo, capaz de hipnotizar a cualquier mujer que o mirase de directamente a los ojos.

El niño estaba a aun durmiendo. Se levanto muy lentamente mientras se frotaba los ojos con los dedos de su mano derecha, ya que con la luz del sol no podía fijarse muy bien en lo que lo rodeaba. Una vez hizo esto, se fue dando cuenta que estaba en su cuarto. O así le llamaba ya que no parecía para nada aquello. Las paredes estaban completamente destrozadas, su "cama" era una pila de papeles sucios y viejos…

Después de ver esto el chico solo pensó con pena "un nuevo día, y una nueva golpiza" eso lo dijo ya que sabía que los aldeanos nuevamente le pegarían por haber salido de su "pieza". Aunque eso es lo que pensaba el ya que aun no sabía la verdadera razón por la cuan los aldeanos le pegaban diariamente, siempre se preguntaba por qué. Pero él no lo sabía…solo sabía que era odiado por toda su aldea por una razón desconocida.

El niño se levanto para poder vestirse salir a comprar unos ramen instantáneos, ya que era la única comida que podía comer con el dinero que le daba el líder de la aldea. Que era como un padre para él, ya que lo cuidaba y lo alimentaba pero como era el líder de la aldea no tenía mucho tiempo para verlo y cuidarlo demasiado.

Cuando iba a salir se dio cuenta de que no tenía demasiado dinero así que se dirigió hacia la torre del hokague para pedirle un poco para poder comprar su comida. Cuando se dirigía hacia allí se dio cuenta de que lo miraban con unos ojos que representaban un odio indescriptible. Era algo que a cualquier persona le hubieran dado ganas de matarse ahí mismo pero él era diferente a todos, ya que desde que nació fue mirado con esos ojos, es decir ya estaba completamente acostumbrado. Siguió su camino sin preocuparse de nada, pero llego el momento que el chico menos quería que llegase. Uno de los aldeanos lo comenzó apuntar gritando – ¿maldito demonio porque sales? ¿Acaso quieres matarnos? Sabes muy que no te dejaremos. Vamos a matarte- unas vez terminado esto aparecieron unos aldeanos acompañándolo y solo con una meta… matar a chico rubio que iba feliz caminando.

Por otro lado en joven se asusto tremendamente así que no espero un segundo más y salió corriendo en busca de un escondite, mientras detrás del ya no solo venían 3 o 4 aldeanos sino que ahora era alrededor de 40 o más. El niño solo se preocupaba de arrancar ya que no quería ganarse otra golpiza por parte de los aldeanos. Corrió hasta que pudo encontrarse un unos votes de basura y se escondió en uno de ellos, para que la gente no lo hallarla. Pero para la mala suerte del chico uno de los aldeanos pudo darse cuenta de que algo se movía entre la basura así que fue averiguar dándose cuenta que el chico zorro, como le decían ellos estaba ahí.

Cuando dijo esto toda la gente se abalanzo hacia el joven golpeando por donde podían, pegándole con palos, piedras y todo lo que encontraban. En niño solo podía llorar por el dolor que le infligían los aldeanos, no podía hacer nada ya que no tenía las fuerzas suficientes como para hacerlo.

Después de alrededor de 2 horas después de haberle pillado, los aldeanos se comenzaron a casar y dejarlo de golpear, algunos de ellos estaban felices y comenzaron a decir – muere maldito monstruo, esto es por lo que le hiciste a nuestro familiares -. Pero el joven no sabía porque se desahogaban con él, si la n había hecho nada a sus familiares ni a nadie.

Los aldeanos se fueron, dejando al chico casi muerto en el suelo. El ya no podía ni llorar por la golpiza que le había dado así que quedo inconsciente pero lo raro era que cuando se quedo inconsciente apareció en un tipo de alcantarilla llena de suciedad y un olor extremadamente putrefacto. El chico intento acostumbrarse al olor y continuo por el camino hasta que llego a donde había una puerta bastante grande. Se fue acercando de apoco a la reja pero paró en seco cando escucho un voz muy aguda. Que daba mucho miedo, también acompañado de una sed de sangre que un humano nunca podría tener. Se quedo mirando una sobra que se comenzaba a ver desde dentro de esa puerta. Hasta que la sobra hablo nuevamente pero diciendo – mocoso eres muy fuerte…has podido sobrevivir a una golpiza que no cualquiera habría podido- el joven aun asustado se acerco un poco más a la puerta y dijo – ¿q-quien eres tú? – la sombra se acerco igual a la puerta dejando ver a un zorro gigantesco con 9 colas en la parte trasera era realmente grande y daba realmente mucho miedo. El niño por instinto dio un paso atrás y se quedo callado pero luego de nuevo pregunto mucho más decidido y con mucha confianza - ¿Quién eres? – el zorro solo rio entre dientes y dijo – yo no tengo nombre mocoso pero los humanos me llaman kyuby, el rey de los demonio llamados bijus – el rubio levanto el seño en actitud de no comprender lo que decía el zorro, pero no se preocupo, ya que no sabía nada de lo que él le había dicho. El zorro nuevamente hablo diciendo – ¿mocoso…quieres saber porque los aldeanos te pegan cada vez que pueden? – dijo el zorro. El chico ante la pregunta solo se quedo helado. Como iba a saber ese zorro porque la gente lo golpeaba si nunca antes lo había visto en la villa. Se decidió y le dio un si al zorro, recibiendo de este una sonrisa maniática, cosa que asusto mucho al chico. Después de tan macabra risa dio su respuesta al chico – los aldeanos te pegan y te odian porque tú tienes encerrado dentro de ti a un demonio que ataco esta aldea hace más o menos 4 años, y adivina quién era ese demonio – dijo el zorro sarcásticamente en lo último. El chico entendió inmediatamente a lo que se refería con aquello, y entendió inmediatamente que lo que decía era verdad ya que era una razón más que necesaria para que los aldeanos lo atacaran, que lo odiasen tanto, que nunca lo dejaran en paz por nada del mundo. El chico seguía pensando todas estas cosas pero salió de aquellos pensamientos cuando volvió a escuchar la voz del zorro diciéndole – ¿mocoso quieres poder para vengarte? Si lo quieres así, yo te puedo entrenar… ¿que me dices? – el chico pensó si era lo correcto vengarse de aquellos que le pegaban diariamente desde que el tenia memoria, pero eso no era lo que él quería. Lo que él quería era volverse fuerte y demostrarles a los aldeanos que él era una persona digna de su respeto. Así que le dio su respuesta al zorro…ya estaba decidido lo que iba a ser y no tenía ni la más mínima duda – no, no quiero vengarme…pero si quiero hacerme fuerte, y demostrarle a esos malditos que puedo ser una persona digna de su respeto y mas…aunque no sé si tú quieras entrenarme de todas formas – el zorro solo sonrió entre dientes y acepto ya que tarde o temprano sabia que el chico se le acabaría esa confianza y la aprovecharía para apoderarse de su cuerpo y volver a ser libre.

Después de quela conversación el joven comenzó a despertarse aun adolorido por la golpiza anterior miro hacia el horizonte y se dio cuenta de que ya era tarde alrededor de las 4pm, se acordó de la conversación con kyuby y se pregunto cuándo comenzaría el entrenamiento. De repente escucho una voz que hace unos pocos minutos había escuchado…era la de…kyuby. Se asusto un poco pero recordó que tenía un trato con él y lo perdió. Le pregunto cuándo comenzaría el entrenamiento y el zorro solo contesto – ahora, así que anda hacia el bosque de las afueras de la villa…te aviso que el entrenamiento durara alrededor de unos 8 años – el chico solo quedo estático pensando que le iba ser hacer el zorro para que estuvieran durante tanto tiempo entrenando, pero recordó el motivo de ese entrenamiento y acepto encantado, mientras empezaba caminar en dirección a los bosque.