Summary: Días grises que jamás iban a poder olvidar. Que eran Weasleys, que eran Blacks... que eso era lo de menos. Este fic ha sido creado para los "Desafíos" del foro "La Noble y Ancestral Casa de los Black".


Disclaimer: Si todo esto me perteneciera, George aún tendría a su gemelo con él.


N/A: La palabra que tocó para esta viñeta fue "hermano".


Su estrella.

Todos los meses de mayo eran un infierno para George Weasley. Pero el segundo día del mes era el peor de todos ellos.

Como cada año, ignoró las cartas de sus padres, los llamados por la red Flu de sus hermanos, y los gritos de Angelina, para ir por su cuenta al cementerio de Hogwarts. Ya se estaba volviendo tradición, y no pensaba cambiarlo por nada del mundo; era el aniversario, su aniversario, y el único día del año en que se sentía preparado para mantener una conversación con su gemelo, su amado y extrañado Fred.

Se despertó más temprano que ningún otro día en el año, procurando no despertar a Angelina, quien dormía a su lado, ni a la pequeña Roxanne, la bella bebé de pocas semanas que los había mantenido varias horas despiertos en la noche. Se preparó para irse, no sin antes entrar a la habitación del pequeño Freddie, la fiel y exacta copia suya, y por consiguiente, de su hermano. Roncaba suavemente, y George sonrió inconscientemente al verlo. Le recordaba tanto a Fred...

Desapareció en la cocina de su casa, para volver a aparecerse en el cementerio de Hogwarts. El sol aún no salía, y unas gotas de lluvia -o de rocío, quizá, no lo sabía- caían sobre él. Respiró hondo, y miró al cielo. Todo estaba cubierto de nubes, y no se veía absolutamente nada más que una estrella justo al lado de la luna.

Una estrella. Fred.