Ni Dragon Ball, ni sus personajes no me pertenecen son de Akira toriyama.
Convivencia en familia.
Después del cumpleaños de Bulma aquel día fue tan largo que parecía interminable. Sin embrago, aquel día fue inolvidable tanto para Gohan como para Videl; y como recién casados su vida cambiaría por completo, Gohan no podía evitar esconder su gran felicidad que irradiaba hasta la fecha, para Videl verlo feliz todos los días no tenía precio.
Serian padres y sin duda una nueva etapa en sus vidas estaba por comenzar y para compensarlo la primogénita de Mr. Satán se le ocurrió una gran idea y esa idea era una convivencia en familia.
¿Por qué no pasar un rato con su familia?
No estaba mal… pasar un día de campo con la familia de Gohan y la de ella lo ameritaba. Pero las cosas se le había salido de control, como debía de esperarse, Milk no pudo con la tentación de invitar a los demás, se "suponía" que solo era en familia, que solo sería más que en privado, además ya no podía hacer nada al respecto todos ya estaba enterados, que más daba, otra reunión con la gran familia Z sin olvidar al señor Bills y Whis.
Gohan quien no pudo evitar que su esposa volara, solo por tratar de que no hiciera mucho esfuerzo por su embarazo. Sin importarle Videl se encontraba volando por los cielos abrazando entre sus brazos un panda de peluche, hacía tiempo que no practicaba la técnica de vuelo después de tomar la decisión de llevar una vida normal, girando un poco la cabeza a unos cuanto metros se encontraba su suegro quien iba comiendo en el camino un tazón de ramen, virando su mirada hacia otro punto el señor Piccolo cargaba en ambos costados canastas de comida para los demás, luego Trunks llevaba en sus pequeñas manos una bolsa de pan al vapor y por último fijando su mirada al ex-justiciero acompañado de su hermano menor sobre la nube voladora, Gohan no pudo evitar comer un pan al vapor pero Goten exigió que le convidara al menos una.
― ¡Goten! ¿Quieres una? Te invito una ―dijo Trunks.
― ¡Lo dices en serio Trunks! ―dice feliz Goten.
―Claro ―Goten tan rápido como pudo se acercó a su mejor amigo disfrutando un delicioso pan al vapor.
Videl se fue acercando a su esposo abrazándolo por la espalda sin soltar al panda con el otro brazo ―Que malo eres Gohan.
―No es que quisiera darle una, es solo que… estas son tuyas ―sonríe.
― ¿Mias?
―Así es ―la mira a los ojos.
―Gracias, cariño ―dándole un beso en la mejila.
―No agradezcas Videl ―termina por decir.
Una felicidad, que dentro de algunos meses formaría una familia con el hombre que amaba.
Una felicidad, que ni un villano que se presentase y ni el mismísimo universo se lo podía arrebatar tan fácilmente de las manos.
Una felicidad, que forjaría más y más sus lazos como una pareja.
Solo era felicidad.
