Looks Annoying
Desde que tenía memoria, por lo menos del Rukongai y luego del Seireitei, todos le miraban de esa misma manera. A él le molestaba, para Madarame Ikkaku el que le observaran de esa forma tan particularmente odiosa e irritante sólo merecía una cosa, y eso era la muerte. No es que detestara a las personas que fuesen curiosas o, en otro caso, no comprendieran lo que era ser distinto o que gustaran cosas diferentes... ¡Pero es que ya era el colmo, joder!
A donde iba las miradas se clavaban en su persona... No, mejor dicho, en su tan 'extraña y excéntrica' calva; cada una de esas almas que allí vivían le observaban y escudriñaban con sus ojos como si fuese la cosa más rara del mundo... ¡Malditos ignorantes! ¡Él era el tercero más fuerte del escuadrón de Zaraki! ¡Merecía aunque sea un poco de respeto! ¿O no? Pero claro, aún con todo eso su alrededor no cambiaba y se mantenía igual.
Recordaba también el hecho de que muchas personas ya le habían preguntando el por qué de su calva, entre ellas incluía gente de su escuadrón, los cuales creían muy curioso el hecho de que el tercero al mando no tuviese ni un solo cabello en su cabeza; ¿y qué les respondía? Ah... Pues lo mismo que a todos, y lo seguiría diciendo por siempre...
—¡No les importa una jodida mierda!
