Disclaimer: Bleach es propiedad de Tite Kubo. Este Fanfic no es con ánimo de lucro.
Advertencia: Algo de OoC.
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• Fake •
¿A eso se había visto reducido?
Volvió a observar incrédula a Gin Ichimaru. ¿Cómo había sido capaz de llevar todo el tiempo semejante carga? Vamos, esto es imposible, ¿verdad? Levántate y vuelve a esbozar otra de tus extrañas sonrisas. Las lágrimas seguían bañando su rostro marchito y mallugado, pero miraba fijamente al hombre que yacía frente a ella.
¿Cómo había empezado todo esto? ¿Qué lo había provocado?
—Seré un Shinigami y cambiaré las cosas.
¡No había ningún motivo para hacerlo! La vida en el Rukongai era llevadera, a ella le gustaba vivir así. Nunca faltaban las aventuras y estar a su lado le era lo único necesario. Tan sólo recordar como el pequeño Gin había comenzado su plan de vida, le rompía el corazón
—Y así terminarán… Sin que Rangiku tenga que llorar.
¡Basta! Tomó su adolorida cabeza entre sus manos sangrantes. ¿Por qué recordaba todo aquello? Le hacía sentirse culpable, le dolía aún más. Pensar que era la causante de que Gin estuviese así en esos momentos, era lo que menos quería hacer.
—Rangiku, no resultó.
¿Qué dices, tonto? No lo entiende, deseaba que dejara de decir cosas tan raras. Limpió sus mejillas y restregó levemente sus orbes azulados mientras se acercaba aún más al varón de cabellos blancos.
—Al final no pude recuperar lo que te habían quitado...
¿Quitado? El único que le había quitado algo era él. Y ya éste le había restituido hasta lo último. Vamos, tú no eres así. No lo digas como si fueras un vil perdedor derrotado.
—Me alegra poder decir que lo siento.
¡No! ¡Deja de expresarte así! Tú estás más vivo que nunca, la muerte no puede apropiarse de alguien tan esquivo y enigmático.
Mentiroso. ¡Eres un mentiroso! ¿Cómo podía dejarla? Si realmente le importase ella, no se hubiera ido. No la haría llorar, ni gritar desconsolada. Era su culpa, ¡ahora era su culpa, el que Rangiku Matsumoto estuviera sufriendo! Y lo peor era, que ahora no lo volvería a encontrar. Por mucho que entrenase y corriera, él no regresaría a su lado. Lo odiaba, odiaba que...
Su azulada mirada se desencajó cuando miró el pálido rostro masculino. ¡Su sonrisa! ¡Le había sonreído antes de abandonarla! No, era otra de sus mentiras. Era falsa, como tantas que su rostro había dado anteriormente. No podía ni debía creer en nuevamente en él. Pero, en lo más profundo de su alma, sabía que ella era la que se mentía. Sabía que finalmente, Gin Ichimaru brindaba una sonrisa sincera. Y a ella.
Le había obsequiado su única sonrisa honesta.
Y no pudo evitar hacer lo mismo también. Y con ternura, depositó un suave beso en los labios risueños y sangrantes del ex-Shinigami. Después de tanto tiempo aguardando, era lo menos que podía hacer.
—Gracias por tus mentiras, Gin. Gracias — susurró tristemente la vice-capitán, antes de salir huyendo de ahí.
Ahora, era cuestión de seguir viviendo. Después de todo, Gin Ichimaru se había pasando la vida con engaños para que ella pudiera continuar sonriendo. Lo que menos querría él, era que siguiera llorando. Y cumpliría fielmente con sus últimos deseos.
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Fin.
N/A:
Demasiado trágica últimamente, será por culpa de películas tristes y canciones igual de alegres; añadiendo imágenes angsts de Gin/Ran fue como salió este mini one-shot (¿drabbe?).
En fin, dedicado a Kibume. Hermosa, no te preocupes. Ya me he repuesto de mi inicial decepción. Después de todo, aquí en internet hay tanta información Fake. ;3
Esperando que fuese del agrado general...
See you around...~