Perdón, por lo que te hice ayer.

Una lagrima se derramo en tu me mejilla al recordar aquel primer beso. La primera desde la muerte de tus padres.

Sasuke camino por las calles de Konoha, hace unos meses había vuelto, en esos meses no había visto a la pelirosa la kunoichi parecía bastante reacia a volver a verlo, antes de siquiera darse cuenta la lluvia lo había atrapado, se dejo mojar, después de todo solo era agua.

Y entonces paso, al final de la calle viniendo hacia la esta Sakura, la niñita molesta.

Era extraño para el verla pasar a su lado sin siquiera dirigirle una mirada, cuando de pequeña lo volvía loco con su maldito:'Sasuke-kun'.

La lluvia hacia que la ropa que ella llevaba se le pegara al cuerpo y eso, aunque el nunca lo iba a admitir, le encantaba.

No la tomes del brazo.

Sin embargo lo hiciste.

No la empujes contra el árbol más cercano.

Sucumbiste ante este último pensamiento, pero de todas formas lo hiciste.

¡Mierda, Uchiha!, ¡Ni se te ocurra besarla!

Te importo una mierda todo y de repente estampaste tus labios contra, los carnoso y rosas, de ella, la pelirosa se mostró reacia al principio, pero luego la lucha en sus bocas se hizo presente.

No es fácil despertar… si ya no estas.

Aquí, frente al espejo tenes que admitir que la cagaste, que realmente fuiste un bastardo y que ahora estas sufriendo las consecuencias, solamente a vos se te ocurre acostarte con Karin en su cama, se te hace un nudo en la garganta de solo recordar su rostro, casi podías ver su corazón romperse en miles de pedazos dentro de su pecho, y eso te hacia mierda.

Buscar tu beso en otros labios.

Lo habías intentado con Karin, aunque la mirada de Naruto te había matado y aun escuchas sus palabras.

La estas matando, Teme.

Si, la estaba matando.

Soñé, que te volví a tener.

Son las tres de la mañana y ya estas cansado de despertarte con un bulto entre tus piernas, por lo que desististe de dormir.

-Estamos jodidos-le dijiste al bulto entre tus piernas sintiéndote completamente idiota.

Que puedo respirar por que me das lo que yo busco en otros brazos.

Los recuerdos te quitaron el aliento y te impidieron respirar, mientras apretabas la mandíbula y entre cerrabas los ojos, querías llorar.

De nuevo.

Pero eso era algo que desde luego no te podías permitir, por que eras Sasuke Uchiha, por que sos Sasuke Uchiha.

Mírame, y así de frente déjamelo saber, si ya no hay nada…no vas a volver.

Ella no va a volver.

Te dijiste por milésima sexta vez, y sabes que esta vez, si la queres de vuelta vas a tener que tragarte tu orgullo, tu ego y todo como lo que te identificas a vos mismo, y esta es la pregunta que aun te estas planteando.

¿Ella lo vale?

Que si me tocas ya no te desases.

Ya no la ves por las calles, nunca, no sentís, su chacra y eso te hace agonizar, en una ocasión, te atreviste a preguntarle a Naruto, pero el solo negó con la cabeza, vos solo lo miraste mal mientras en tu cabeza resonaba una jodida pregunta.

¿Don de mierda esta Sakura?

Esa misma tarde la viste saliendo del hospital, mas blanca que de costumbre con los ojos color jade oscuros, sin vida y el corazón se te fue al piso, ella no era Sakura, no era la misma ojiverde de la que te habías enamorado esa era la replica muerta y sin vida, una persona que solamente vos habías creado.

-Que se te infle el pecho de orgullo-pensaste con ironía mientras la veías caminar completamente desenfocada y sin esperanza.

Y me ves, jugando a no extrañarnos, evadiéndote…Para caminar.

Después de ese día se veían las caras en las calles, pero vos la ignorabas olímpicamente, y en cada jodida ocasión podías verla romperse…otra vez.

Y te ves, de nuevo así llorando.

La oíste llorar cuando pasaste al lado de su consultorio, quebrándose, sola en la seguridad de su oficina y cerraste los ojos, encimado en tu dolor, oyéndola caer, y tu sin tener las suficiente fuerza para levantarlos a ambos.

Pero hay que pensar que no hay vuelta atrás.

Por una milésima de segundo te preguntaste a ti mismo si debías entrar besarla y hacerla tuya en aquel consultorio donde tantas veces te filtraste en su ventana y la hiciste tuya…Demasiadas veces.

Trate, te intente detener, tu forma de besar hace dudar.

El monstruo en ti se sosiega diciéndose ha si mismo que le aviso, que el no tenia nada para dar, y que ella lo había aceptado así, y que la culpa era solamente de ella, mientras que la parte humana, se regodeaba en su dolor.

Tú sabes que esto no es pasado.

-Ya amaneció-pensaste con amargura, este calvario era demasiado para vos, lo que había pasado era solamente fruto de una noche de sake, con Naruto y Karin había estado ahí, oportunista, esperando hasta que vos cayeras en los efectos del sake para acostarse.

Era y es una jodida perra.

Perdón, y ¡Ahora escúchame!, no dejas de soñar ni de desear que esta noche sean mis manos.

Ella aun seguía durmiendo en su cama, con las ojeras marcadas debajo de sus ojos, con sus labios blancos, y su piel sin vida, entraste a su habitación y casi al instante, ella despertó.

Mírame y así de cerca dime lo que ves, si ya no hay nada y no vas a volver.

-Aléjate-gimió mientras se tapaba, y esos ojos esmeralda te traspasaban.

-No-tu vos sonó justo como querías que sonara baja, sin que ella se de cuenta de que con esa petición te había roto en dos-vine a hablar.

-¡Gran conversación voy a tener con alguien que lo único que saber decir en 'Hn'!-exclamo ella airadamente.

-Tienes que escucharme-rugiste-Te…, bueno mierda, te necesito conmigo.

En cuanto soltaste esas palabras, abruptamente a causa de tus nervios y tu noche en vela, sus ojos te mostraron resentimiento.

-Ve a buscar a Karin-soltó con ironía-por que evidentemente a ella si la necesitas.

¿Por que me tocas?, ¿Por qué te desases?

-Créeme-le susurraste con voz ronca, justo en el oído-a ti te necesito mas.

Tu boca paso a estar sobre la suya en una fracción de segundo y la danza comenzó.

Y me ves, jugando a no extrañarnos…Evadiéndote para caminar.

-¿Por que me hiciste eso, Sasuke?-pregunto entre tus labios.

-Yo estaba borracho-confesaste mientras hundías una mano en los cabellos de la ojijade-y ella hizo algo, yo no recuerdo haberme acostado con ella, creí que…eras tú.

-No podes ganar siempre, Sasuke-te dijo alejándose de ti-, no podes tener todo, sin embargo así es-suspiro-no quiero verte mas, Sasuke.

Y ahí estaba el golpe que te dejo sin aliento, justo allí, podías ver en sus ojos determinación, pensaste en rogarle, pero jamás te rebajarías a aquello.

Jamás.

Y te ves, de nuevo así llorando…Pero ahí que pensar que no hay vuelta atrás.

Escuchaste el sollozo de ella al salir del cuarto, pero ni siquiera te planteaste el volver, Sakura no quería que lo hicieras.

Y me ves, jugando a no extrañarnos…Evadiéndote para caminar.

Miraste hacia otro lado cuando la Hokage te llamó, eso no era bueno por que estaban todos allí, no faltaba nadie, todos tus conocidos y los de…Sakura.

Y te ves otra vez así llorando, pero hay que pensar que no hay vuelta atrás.

-Lo lamento mucho-musito antes que nada la rubia-Sakura…ella, ella esta…

-¡¿Ella esta que?-grito Naruto.

-Ella esta muerta-dijo finalmente Tsunade mientras una lágrima viajaba desde la comisura de su ojo hasta su mejilla.

-No-gemiste en voz alta y todos te miraron, sorprendidos-¡No!-gruñiste-¡Tiene que haber algún error!, ¡Es sabido que aquí, en Konoha son todos unos incompetentes!

-Lo lamento, Uchiha-suspiro ella, mirándolo con pena-su cadáver esta en la morgue si te queda alguna duda.

-¿Quién la mató?-preguntaste con voz fría, ese infeliz, iba a sufrir, y el se encargaría de eso.

Si me quieres tener…y no vas a volverme a ver, si no vas a volverme a ver.

-Ella se suicido-anuncio con voz monocorde-, ella se fue…ella ya no va a volver.

Y ahí fue cuando viste tu mundo caerse a pedazos, miraste a Naruto que abrazaba a la chica Hyuuga y sonreíste.

Al otro día, justo a la hora del funeral de Sakura, encontraron el cuerpo sin vida de Sasuke.

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