Capitulo 1.
Edward POV
No sé en qué momento mi peor pesadilla se convirtió en realidad, si era un día cualquiera, bueno no cualquiera, era el cumpleaños de Bella, un día muy feliz para mí aunque para ella no, desde la mañana que nos vimos en el instituto estuvo de malas, cosa que me esperaba ya que me amenazó para que no le comprara ningún obsequio de cumpleaños y se molestó bastante cuando Alice le comentó de la "pequeña" celebración que íbamos a hacer en la casa; pero nunca imaginé que todo se saldría de control.
En el momento en que Bella se cortó aunque solo fue una simple gota de sangre la que broto, eso desato la pesadilla. Los pensamientos de mi familia se desbordaron haciendo un caos. Pero uno es particular me hizo ponerme alerta, cuando escuche los pensamientos de Jasper solo tuve unos segundos para reaccionar, aunque ahora que lo pienso mi reacción no fue la más acertada, por estar concentrado en Jasper no puse atención a la fuerza con que avente a Bella para quitarla del camino y ella fue a dar a la mesa haciéndose más daño y provocándolo aún más, si no hubiera sido por la reacción de Ross y Emmet no habríamos controlado a Jasper.
Sin contar con la gran ayuda de Carlisle para curar a Bella en la casa, bueno así lo quiso ella. Lo que más me atormenta en no haber podido sostener su mano mientras la curaban, que sintiera mi apoyo y compañía, pero de verdad era una agonía estar ahí parado oliendo su dulce sangre. Me sentí derrotado cuando tuve que ceder a la petición de Bella y Carlisle, para que fuera a hablar con Jasper,
Para tranquilizarlo pero no estaba seguro de poder hacerlo, el dolor y la impotencia que sentía eran muy grandes para que él no lo notara y que mis palabras la reconfortaran. Salí de la casa para tratar de tranquilizarme y buscarlo después. Al cabo de10 minutos fui a buscarlo, lo encontré a unos 10 km. del río.
-¿Cómo se encuentra Bella? Edward
-Bien, Carlisle la está curando, se le incrustaron muchos vidrios en la herida del brazo
- Lo siento tanto, todo esto es mi culpa, debería de tener más dominio después de tanto tiempo de llevar este estilo de vida.
- Si es verdad, pero sé que es más difícil para ti por tú pasado
- Eso no es una justificación, pero su sangre es…
-Si lo sé es demasiado tentadora para su propio bien.
-Eso tampoco es una excusa para mi comportamiento, estoy realmente afligido y no solo contigo y Bella, también con Carlisle y Alice; en estos momentos estarán pensando lo peor de mí y con justa razón, tal vez estén arrepentidos de haberme aceptado en su familia. Alice debe de estar avergonzada de mi debilidad, yo sé cuanto significa Bella para ella y que ahora este herida, no me lo perdonará, ni yo me puedo perdonar.
-Por favor Jasper –lo interrumpí - no digas tonterías, sabes perfectamente que para Alice eres lo más importante y que no existe nada que pueda separarla de ti. En cuanto a Carlisle, entiende y perdona estas "debilidades".
-Sí, y ¿ tú? Podrás perdonarme y Bella, no tengo cara para verla de frente
-Ella me pidió que te dijera que no está enojada contigo… y yo sé que es algo más fuerte que nosotros, no te preocupes ni te atormente más.
-Entonces ¿por qué te estás atormentando tanto?
-Ya sabes que mi mayor preocupación es que Bella salga lastimada a causa de lo que soy y hoy se hizo realidad ese temor, no solo por ti, también por mí, ese empujón que le dí le hizo más daño que cualquier otra cosa. Siempre tengo que estar atento a mi fuerza cuando estoy con ella, un simple descuido puede ser fatal, hoy lo comprobé, creo que lo mejor que puedo hacer es alejarme de ella.
-¡Hey! No te sientas así, todo lo que paso hoy fue terrible, pero tendremos que se más cuidadosos para que no se repita.
-¿Es que no lo entiendes? Me siento tan mal, tan impotente…
-Sé lo que sientes mejor de lo que te puedes imaginar – me sonrió ligeramente Jasper.
-De acuerdo, tú también sientes mis emociones- le sonreí levemente, para después suspirar – se supone que yo debo animarte a ti y no al revés.
-Somos hermanos recuerdas, en las buenas y en las malas. El simple hecho de que vinieras a hablar conmigo me hace sentir mejor.
-Me alegra escucharlo, voy a regresar a la casa para ver como está Bella, ¿quieres que lo diga a Alice que venga?
-No es necesario Edward- contestó la dulce voz de mi hermana
-No sé porque no me sorprende que llegues en el momento justo-
Nos sonreímos ligeramente, y Alice me dijo:
-Carlisle está por terminar de curar a Bella, será mejor que te des prisa. Y deja de atormentarte, la decisión que estas tomando no es la mejor "para nadie".
-Gracias Alice- le contesté con un poco de sarcasmo y fastido al no poder tener ningún plan secreto para ella.
Cuando llegue a la casa, escuche la conversación que estaba teniendo Bella con Carlisle acerca de mi transformación y mi postura sobre el alma, sé que ella lo minimiza y realmente no comprende mi punto de vista, cosa que reafirme cuando escuche esta conversación.
Cuando me ofrecí a llevarla a su casa mi cabeza realmente era un caos, con todas mis ideas revueltas y sin saber que decir en este momento. Fue Bella la que no soporto más y rompió el silencio, sabía que no entendería mi estado de ánimo ni mucho menos las ideas que tenía en ese momento.
Mi argumentación sobre cómo sería mejor su vida si su novio fuera un simple humano, no ayudaron ni a ella ni a mí, pues al mencionar a Newton (que realmente no sé porque fue el primero en el que pensé) Bella estalló de indignación y no llegamos a nada.
Pero ella no tenía idea de lo cerca que estuvo de perder la vida, ya fuera por causa de Jasper o por mí, pero yo sí y no soportaba la idea de perderla a causa de lo que soy, realmente no culpaba a nadie solo a mí, si yo hubiera tenido la fuerza suficiente para alejarme de ella desde un principio nada de esto habría pasado. Recordé los acontecimientos con James y pensé que ya solo eran un mal recuerdo, que ese peligro estaba muy lejos de nuestras vidas.
Ya en su cuarto me percaté de su incomodidad a causa de la herida, estoy seguro que no se quería quejar por no hacerme sentir mal, pero sus gestos no me pasaron desapercibidos. Fui por un par de analgésicos para que pudiera dormir sin tantas molestias, a pesar de sus protestas.
Antes de dormir me pidió que la volviera a besas, puse en ese beso todo lo que sentía por ella, memorice la textura de sus labios y su sabor, porque sabía que ese sería nuestro último beso. A pesar de eso mientras la veía dormir estuve debatiéndome si era lo mejor que podía hacer por Bella, mi debate interno duró toda la noche, pero finalmente me convencí, lo más apropiado era dejar que Bella hiciera su vida sin mí, que tuviera la oportunidad de disfrutar su vida sin peligro a que su propio novio pudiera herirla. Lo mejor era que yo me fuera lejos.
A la mañana siguiente Jasper y Alice se marcharon a Denali, fue un poco difícil convencer a Jasper de que Alice lo acompañara y que fueran con Tanya, pero al final lo logramos, así yo estaba un poco más tranquilo sabiendo que no estaba solo y vagando por quien sabe dónde.
La decisión de irme seguía fija en mi mente, aún no sabía cómo comunicárselo a mí familia y mucho menos a Bella.
Comunicarle a mi familia mi decisión fue algo sumamente difícil, los reuní a todos cuando regresé de la casa de Bella:
-Tengo algo que decirles, es muy importante y me gustaría contar con su apoyo he tomado la decisión de dejar a Bella e irme lejos de aquí
Todos me miraron sorprendidos, yo esperé su reacción. La primera en sobreponerse fue Esme
-Pero Edward ¿por qué? Si Bella es el amor de tu vida, has cambiado tanto desde que estas con ella que pareces otra persona
-No lo ves Esme, esa es la razón por la que me alejo; Bella es lo más importante que tengo y no puedo soportar, ponerla en peligro cada que la beso o la abrazo, no entiendes el tormento que es para mí estar con ella y tener que medir con que fuerza la tomo de la mano, la abrazo o la beso. El ponerla en peligro simplemente por lo que soy, por lo que somos.
-Lo que sucedió fue un accidente, ¿lo sabes no?
-Sí pero eso no cambia las cosas, no cambia lo que somos, lo que soy.
Carlisle fue el siguiente en hablar:
-Edward creo que es una decisión precipitada, y antes de que me digas otra cosa te pido que lo pienses por unos días, reflexiona si es lo mejor, tal vez exista otra solución menos drástica.
-No creo que cambie de opinión…
-Por favor Edward solo te pido que te tomes unos días para que reflexiones y si eso es lo que quieres te apoyaremos y nos iremos todos.
Cuando termino de hablar, la mirada enfurecida de Rosalie fue de Carlisle hacia mí.
-No veo la necesidad de que todos nos vayamos a otro lado solo por las inseguridades de Edward y mucho menos por una insignificante humana…
-Rosalie –Dijo Esme- contrólate y no seas grosera con tu hermano, tenemos que apoyarlo en este momento que más nos necesita. Además no tienes porque quejarte, ya que se supone que tú estás en la universidad.
Rosalie me lanzó una mirada furiosa pero ya no continuó discutiendo.
-Por una vez estoy de acuerdo con Rosalie- le dije a Esme, quien me miró sorprendida –no veo la necesidad de que todos se vayan con migo…
-Eso es algo que está fuera de discusión- dijo Carlisle- y no solo es por ti, también es por Bella; imagina como se sentiría si nos quedamos, sería más difícil que superara la separación, si se da el caso es mejor una ruptura limpia, así es más fácil que sane.
La idea de provocar que toda la familia se mudara se agregaba a todas las preocupaciones que tenía en ese momento, pero era algo que podíamos discutir después. Lo más importante en ese momento era mi decisión de alejarme de Bella y por más vueltas que le daba no encontraba otra solución, sabía que le haría mucho daño pero también tenía la esperanza de que se olvidara de mí y pudiera rehacer su vida, pues la mía estaba destruida pues no existía posibilidad alguna para sanar, ella era lo mejor que había tenido en casi cien años de "vida" y sabía que estar sin ella sería insoportable pero estaba dispuesto a sufrir con tal de que ella estuviera a salvo.
-Lo siento Carlisle he tomado la decisión y aunque lo piense mil días no cambiaré de opinión, no les pido que abandonen su vida, solo les pido que respeten y apoyen mi decisión por favor –
- Hermano- dijo Emmett – sabes que aunque no estoy de acuerdo con tu decisión te apoyaré. Aunque si hubiera algo que te pudiera convencer para que cambies de opinión...
-Gracias Emmett, pero no lo hay – tuve que interrumpir a mi hermano, ya no soportaba estar ahí.
Ahora fue Alice la que habló.
-Estas cometiendo un grave error Edward, nos vas hacer sufrir a todos, esto no va ha salir bien he tenido una visión…
-No, no digas más y te pido por favor que ya no veas en el futuro de Bella, tenemos que dejar que siga adelante sin entrometernos.
Alice se cruzó de brazos y poniendo una cara obstinada se quedó callada.
La mirada de dolor que me dio mi familia me rompió más el corazón, pero no iba a dar marcha atrás, estaba convencido de que era lo mejor, aunque no lo pareciera, para Bella
Los siguientes días con Bella no fueron los mejores porque yo estaba decidido a mantenerme distante y así irla preparando para la separación. Pero no quería alargar demasiado las cosas, pues así sufriríamos más los dos
En casa ya estaba todo listo para partir, Carlisle había dicho en el hospital que nos mudábamos porque le habían ofrecido un gran trabajo de improviso en los Angeles y la decisión debía de ser tomada de inmediato. Alice y Jasper se fueron después de que hablamos, días después lo siguieron Rosalie y Emmet; solo estaban Carlisle y Esme, que se quedarían para esperarme y así partir los tres juntos, sabía su verdadera intención, estaban ahí para apoyarme lo cual agradecía infinitamente, no sabía como me iba a sentir cuando lograra convencer a Bella de que lo nuestro no podía continuar.
Antes de que llegara a la escuela sonó mi celular, era Alice, lo cual no me sorprendió ya estaban avisados de que llegábamos hoy en la noche a Denali, hasta había tardado en comunicarse con migo, ha es verdad había apagado mi celular para no hablar con ella y que tratara de convencerme de no irnos.
-Hola Alice –
-Edward, por favor no hagas esto, hablemos antes…
-No, es algo que ya está decidido y no voy a cambiar de opinión –
-Está bien, entonces voy a ir a hablar con ella para despedirme y decirle que siempre podrá contar con migo como su amiga que soy-
-No Alice, lo siento pero te prohíbo que vengas, lo único que lograrás es empeorar las cosas y se lo pondrás más difícil a Bella, es mejor que pierda contacto con todos nosotros.-
-Pero Edward, por favor déjame despedir de ella es lo menos que se merece …
-No Alice y no insistas, adiós estoy por llegar al instituto en la noche hablaremos.-
Colgué el teléfono sintiéndome desesperado y dudando por primera vez si realmente era lo correcto lo que iba hacer, viendo el dolor que iba a causar mi decisión, no solo en Bella o en mí, sino también en la mayor parte de mí familia.
El ver llegar a Bella en su vehículo, sentí un vacío en el estómago, aunque mi decisión no había cambiado eso no la hacía más fácil.
Sentía el dolor de ella como mío y me dificultaba pensar en cómo decírselo, pero ya no había vuelta de hoja, se lo tenía que decir hoy.
En el almuerzo Bella me sorprendió sacando la cámara fotográfica que le había regalado su padre, y le pidió a Jessica que tomara unas fotos de todos los compañeros. Era como si quisiera tener un recuerdo de ellos, como si pensara irse o tal vez que nos iríamos los dos, estaba en un error.
Cuando termino el día, el cual fue sumamente largo, le pedí a Bella que si podía ir a su casa en ese momento, ella accedió. Antes pensaba echar una carta al buzón para su madre, me ofrecí a llevarla yo porque así ahorraría algo de tiempo, no quería retrasar el momento del adiós más de lo necesario.
El trayecto lo hice rápido a pesar de haberme detenido en el correo y llegue antes que ella. Le sugerí que fuéramos a dar un paseo por el bosque para hablar, pues tenía que regresar a su casa a borrar las huellas de mi existencia.
Al detenernos me habló con gran firmeza en la voz:
-Esta bien, hablemos –
-Bella, no vamos- le dije, inhalando una gran cantidad de aire. Vi la sorpresa dibujada en su rostro
-¿Por qué a hora?
-Es el momento adecuado, no podremos seguir por mucho tiempo aquí. En el trabajo, Carlisle se hace pasar por un treintañero pero no puede ser así por siempre-
-Cuándo dices nosotros… - susurró
-Me refiero a mi familia y a mí –
Su respuesta no me sorprendió.
-Entonces voy con ustedes –
-No el lugar a donde vamos no es aptó para un humano
-El sitio apropiado es el lugar en donde tú estés –
Esta conversación no estaba funcionando, tendría que ser más drástico si esperaba que por lo menos dudara de mi amor y tal vez tardaría varios días en convencerla.
-No te convengo-
-No seas ridículo, eres lo mejor de mi vida-
-Mi mundo no es para ti-
-Lo que paso con Jasper no fue nada, no tiene importancia-
-Es verdad, es algo normal, dado nuestra naturaleza-
-Me prometiste en Phoenix que siempre estarías con migo, recuérdalo- me dijo con desesperación.
-Solo si era bueno para ti, pero ya no lo es –
-No, esto es por mi alma ¿verdad? Carlisle ya me haló de lo que piensas, y no quiero mi alma si tú no estás con migo, es más es tuya, haz con ella lo que quieras.
Me sentí impotente y desesperado, con cada palabra me hacía dudar de mi decisión. Después de un momento traté otra estrategia, una muy vil, pero esperaba que diera resultado.
-Bella, no quiero que vayas con migo- le dije fríamente, sin quitar la mirada de sus ojos, pude ver cuando la comprensión de lo que realmente le estaba diciendo llego, el dolor infinito en esos hermosos ojos color chocolate.
-¿Tú… no… me quieres? -
-No – le conteste de nuevo con la mayor frialdad que fui capaz.
-Bueno, eso cambia las cosas- dijo con tranquilidad, lo cual me sorprendió bastante.
-De cierta forma te he querido, pero me cansé de intentar ser lo que no soy, humano, he permitido que esto llegara demasiado lejos y lo lamento.
-No lo lamente por favor- me dijo con convicción.
-No me convienes Bella- invertí mis primeras palabras dándoles otro sentido. Por un momento se quedó sin palabras a pesar de haber abierto la boca, pero después me dijo.
-Si eso es lo que sientes –
Solo pude asentir con la cabeza, no podía permitir que mi dolor saliera a flote y derrumbara la muralla que había logrado construir.
-Quiero pedirte un último favor, si no es mucho pedir- le dije con gran pesar, pues al ver el dolor en su rostro tuve miedo de que atentara contra su vida. –No hagas ninguna tontería, ¿entiendes? Es por Charlie él te necesita de verdad –
-Lo haré –
Me aleje un poco de ella antes de hacerle una última promesa:
-Te haré una promesa a cambio, no volveré ni te hare pasar por esto otra vez. Podrás retomar tu vida como si yo nunca hubiera existido – Vi como iba desfalleciendo pero en este momento ya no había marcha atrás.
-No te preocupes, eres humana y olvidaras con rapidez, el tiempo cura todas las heridas
-Y tú- me preguntó – ¿me olvidaras?
-No, pero no te preocupes los de mi especie nos distraemos con facilidad – le sonreí a pesar de que eso era la menos que quería hacer en eso momento – No te molestaremos más, no te preocupes.
Abrió sus ojos con gran sorpresa y dolor al comprender lo que le había dicho.
-Todos se han ido, solo yo me quedé para despedirme de ti –
-Alice se fue sin despedirse- su dolor era tan intenso que se podía palpar
-Ella quería despedirse pero la convencí de que no hacerlo, una ruptura limpia es lo mejor. Adiós Bella- le dije mientras me alejaba lentamente de ella.
-Espera- me pidió con agonía en la voz.
Por lo que no pude resistirme a darle un último beso en la frente, fue tan rápido y ligero como el roce de una pluma y después corrí desesperado hacia su casa, dando un rodeo, para cumplir con mi promesa.
Ya en su casa quite las fotos en las que salía yo y guarde los regalos que le habíamos hecho, mi familia y yo, por su cumpleaños. Iba a llevármelos, no sé lo que me impulso a palpar debajo de su cama y descubrir una tabla suelta baja su cama, ahí puse los obsequios y las fotos, la deje igual que antes y baje dispuesto a irme y dejar mi corazón atrás, pero algo hizo que me detuviera a escribirle una nota a Charlie para que supiera en donde se encontraba, obviamente falsifique la letra y firma de Bella.
Al terminar salí rápidamente de su casa con el corazón destrozado, pero sabiendo que en el bosque había otro igual.