Hola a todos, perdón quizás para los que seguían esta historia es raro ver que se allá borrado y ahora re-subido, lo siento es que hace mucho tiempo que no entraba a esta página y había perdido mis ganas de terminar los fics. Por ahora continuare esta historia y editare ciertos detalles que a mi parecer estaban mal redactados, espero que sean pacientes y la magia de "mi pequeño GRAN secreto" los siga motivando a leer, estaba vez si planeo terminar esta fanfic así que solo les pido un poco de paciencia porque mis intenciones son subir nuevos capítulos y revelar más sobre la historia.

En fin espero que no me golpeen por el tiempo en que me demore en aparecer y solo me queda decirles, disfruten :D.

.

.

.

.

Capitulo 1:

Temprano por la mañana salí de mi casa despidiéndome de mi pequeña hermana y mi madre, estaba con energías para comenzar un nuevo día de entrenamiento y perfeccionar esos remates rápidos que para mí desgracia me tenían unido al creído "Rey de la corte" Kageyama Tobio. A pesar de que en un comienzo nos llevábamos mal últimamente nuestro nivel de competitividad ha ido en disminución, ya que estando en un mismo equipo pasamos más cooperándonos el uno al otro para ser los mejores de Japón.

Pff… -me queje soltando un bufido- … me pregunto, ¿Cuánto más poder seguir aguantando esta farsa? –encimado en mis pensamientos deje que mis movimientos fluyeran, y sin percatarme ya había llegado a la escuela donde algunos estudiantes se encontraban ya para realizar sus actividades diarias. Como siempre deje mi bicicleta segura en unos de los postes y me dispuse a entrenar un poco antes del inicio de clases. Aunque la mayoría de las veces iba corriendo alborotadamente hasta la cancha esta vez me contuve e intente despejar mi mente, porque a pesar de que en la mañana estaba con todo el ánimo del mundo para jugar ahora estaba siendo torturado por el pequeño secreto que oculto. Quizás se pregunte ¿de qué secreto hablo?, es decir, ¡Soy Hinata Shoyo! El muchacho más alegre y vivaz de toda la escuela Kurasuno, pues lamento decirles que todos tenemos nuestro lado que no queremos dar a conocer y debido a mi imprudencia he hecho un problema bastante grande, en donde sí se llegasen a enterar, todo se arruinara.

¡HEY ENANO! –el grito despectivo de Bakeyama logro captar mi atención, mire directamente hacia aquella mirada determinada y temeraria que me atravesaba por completo. Moví mi cabeza de un lado a otro despejándome de toda culpabilidad, puse mi mejor sonrisa y volví a crear el mismo espectáculo que he dado desde que pise este instituto.

¡YAH! ¡QUE NO SOY ENANO! –Y así una vez más un día nuevo paso, continuamos perfeccionando nuestras técnicas y manteniendo cada vez un grado mayor de confianza entre nosotros, hasta el desagradable de Tsukishima se había vuelto amistoso y eso ya es mucho que decir. Inevitablemente sonreí al ver todo lo que hemos pasado en estos meses, todas esas tardes intensas de práctica donde más de uno terminaba con los brazos morados por las caídas y golpes en la cabeza, esto último va más dirigido a mi que a los otros, pero en fin nada podría destruir este hermoso momento… o al menos eso pensé.

Shoyo Hinata… -un voz resonó por la cancha e hizo que perdiera mi concentración al momento de rematar, lo que provoco que me golpeara la cabeza con la pelota-

Fije mis ojos en la dirección de dónde provino esa voz delicada pero exigente, quizás no fue una buena idea ya que apenas mantuve el contacto visual con "Ella" mi piel se puso extremadamente blanca y un sudor frío calo mis huesos, ahora si estaba seguro que mi secreto estaba a segundos de ser descubierto.

T...Tu… -intente no hacer evidente mi nerviosismo, pero para personas tan perspicaces como Kageyama, Tsukishima, Nishinoya y el capitán Daichi era imposible mentirles descaradamente. Derrotado al saber cómo acabarían las cosas me levante y camine directo hasta donde se encontraba "ella", la mire de arriba abajo y pude darme cuenta que no había cambiado nada, seguía siendo esa chica alta de cabello rojo con atributos bastante notables de mirada fría y calculadora, sin duda alguna Neizy Yamanaka no ha cambiado en absoluto.

Pero mira en que andas Hinata, no sabía que ahora te gusta el voleibol pero ¿no crees que sea peligroso que mientas de esta manera? –su inquebrantable voz hizo eco al gimnasio captando la atención de todos los que estaban ahí, como era de esperarse Tanaka y Nishinoya fueron los primeros en preguntar sobre quien es ella-

Oi Hinata, ¿quién es ella?, ¿la conoces?, ¿a qué se refiere con que mientes? –la confundida voz de Noya-sempai hizo que apareciera aquel nudo de culpabilidad en mi garganta, estaba claro que todos en este lugar se preguntaban lo mismo que él y peor aún esperaban muchas más respuestas y explicaciones de las que me podía excusar. Con los ojos cristalinos levante mi mirada a cada uno de los muchachos, no quería que todo acabara así pero dadas las circunstancias no me quedaba de otra más que decirles, era eso o que se enteraran por esa arpía que se hacía llamar mi amiga.

Y… yo…-de mi boca no salía palabra alguna, intente tomar aire antes de continuar- de…debo decirles algo que he mantenido oculto… durante mucho tiempo… -fueron los segundos más incómodos y horribles de mi vida, la confusión estaba inundando toda el lugar y es que ni el propio profesor entendía la situación-

Vamos "Shoyo" Hinata, porque eres tan valiente para algunas cosas y tan cobarde para otras… - sus palabras llenas de veneno hizo que una de mis venas estallara, ya no aguantaba más su presencia, dejando de lado mi racionalidad y perdido en la angustia me lance contra aquella mugrosa víbora arañándola por cualquier lado visible de su rostro. Los gritos de "sepárenlos" y "¿Qué rayos crees que haces Hinata?" retumbaron por mis oídos, naturalmente la reprobación a los ojos de mis superiores y compañeros fue lo único que pude observar mientras Tanaka-sempai y Yamaguchi ayudaban a la "extraña" muchacha que estaba con un hilo de sangre brotando de su labio. Le di una mirada de satisfacción por haberla herido aunque sea un poco, al menos mi rabia se había estado disipando con ese golpe que le di mas no me duro mi victoria por mucho tiempo ya que a los pocos segundos la mano de Ukai-sensei me hizo a entender que estaba en graves problemas.

Demonios, ¿Cómo es que paso esto?, he sido cuidadoso con cada uno de los pasos que he dado en cuanto entre a esta escuela, ¿por qué ahora todo lo que había logrado se estaba destruyendo en solo un momento? lo que más me pesaba era que no había excusa alguna sobre el golpe que le di a Neizy… acabo. Desde un inicio sabía que esto no duraría para siempre, pero no creí que acabaría de este modo. Para mi desgracia la aparición de esa "víbora mal nacida" logro sacar lo peor de mí dejándome como lo peor del mundo y volviendo esto uno de los momentos más terribles en la historia de la escuela Karasuno.

Solo por favor pido en estos momentos que dejen de verme como un parasito, no se defrauden, no se molesten conmigo, no me abandonen.

.

.

.

¿reviews?