Nota autora: ¡hola! Lo sé, lo sé prometí subir y acabar pronto mi otro fic "tan cerca y a la vez tan lejos" de esta pareja que tanto me gusta. Pero lo siento, estoy atascada. Intentaré en estas vacaciones terminar el capítulo (que por cierto me está encantando) y subirlo cuanto antes. Como todos sabéis, nada de esto es mio, si lo fuera no habría matado a Sirius. Que va, me lo habría quedado para mi solita. Es una viñeta, no sé si seguiré subiendo más viñetas de esta pareja o de otras parejas, la verdad es que no lo sé. Según lo que surga.

Nada más, esto va dedicado a todas las personas que se dignaron alguna vez a leer algo mio. Tanto si les gustó, como si no.

...

Que James Potter fuera a la biblioteca era un suceso bastante extraño, puesto que él nunca la había pisado. Hasta ese día. Más era a aún más raro verlo sentado en la mesa que está al lado del pasillo de criaturas mágicas con un libro en la mano, leyendo.

Seguramente si alguno lo viera, sería tan extraño que volvería a mirar por si se había equivocado de persona y sus ojos, un tanto enrojecidos de tanto estudiar, le habían engañado. Pero todo era comprensible si, tras quedarse un rato mirándole, se daba cuenta que su mirada no estaba posada en ese libro abierto por una página cualquiera, que su postura despreocupada sentado únicamente por dos patas de la silla y su sonrisa irresistible tenían algo que ver con cierta chica que, unos metros más adelante, se encontraba demasiado concentrada estudiando como para haberse dado cuenta de que era observada.

Si, sin lugar a dudas, era muy raro ver a James Potter en la biblioteca. Pero más raro era aún que esa chica pelirroja, si esa que siempre llega puntual a la biblioteca cada día, se sentase justamente en el mismo sitio todos los días y que abriese el libro para estudiar profundamente. Sin duda era extraño que, Lily Evans, llegando siempre de las primeras a la biblioteca decidiese sentarse justamente en esa mesa, a poco más de tres metros de James Potter.

Cualquiera podría llegar a imaginar que ambos actuaban para ver al otro, pero todo quedaba olvidado cuando veía como uno molestaba o insultaba al otro. Aunque si fuera un poco más curioso y se fijase en los pequeños detalles, se daría cuenta de que esos "piérdete Potter" y esos "vamos Evans, no hablemos de egocéntrica que tu eres la primera en serlo" eran su manera de decirse te quiero. Una manera algo extraña pero que, al final y al cabo, no era nada fuera de lo común teniendo en cuenta en dónde estudiaban y quiénes eran esas dos personas ¿no?

...

Dicen que dejar RR alarga la vida, es más, dicen que si dejas un RR un Sirius Black de la vida aparecerá en tu vida para volverte loca.

Muchos besitos

Siriusila9