EN MIS PENSAMIENTOS
Summary: Un hechizo proveniente de un antiguo libro le da extrañas ideas a Juvia, las cuales son puestas a prueba con inesperadas consecuencias. ¿Podrá ser ésta la oportunidad que ella ha estado esperando para que Gray le exprese su amor?
Disclaimer: Fairy Tail y sus personajes pertenecen a Hiro Mashima
- - - - - - - - - - - - - - - o - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - o - - - - - - - - - - - - - - -
CAPÍTULO 1: El conflicto
Un gran libro abierto sobre una mesa, con dos ávidas lectoras se encontraba en el gremio, pero éstas tenían una inesperada oyente de la cual no se habían percatado.
– Así que un hechizo que puede hacer que conectes tus pensamientos con otra persona… Eso puede ser interesante – se escuchaba decir a la pequeña Levy, sentada en una mesa del ruidoso gremio, mientras otra peli azul escuchaba atenta, pero discretamente a sus espaldas.
– Sería mucho más sencillo combinar tus ataques con los de otra persona si pudieras transmitirle lo que piensas – decía entusiasmada una rubia sentada junto a la pequeña.
Juvia fue más específica en sus pensamientos y comenzó a imaginar las posibilidades... "Si Gray-sama pudiera escuchar los pensamientos de Juvia, si pudiera entender cómo Juvia lo ama, él se daría cuenta de que debía estar sólo con ella… y quizás, podrían ser uno" ése sólo pensamiento le hizo sonrojar. La idea de conectarse con su amado de aquella manera, tan íntima, le hizo decidirse: Debía averiguar de qué hechizo hablaban sus compañeras. Se dio una vuelta cerca de la barra del gremio para no levantar sospechas, mientras un plan surgía en su cabeza.
– Lucy-san, Levy-san – dijo educadamente, acercándose a las aludidas – Mira-san dijo que tenía una misión que podía interesarles – mintió descarada pero decididamente.
– Eso es maravilloso, Juvia – dijo Lucy, levantándose de un salto de su asiento – Así podré asegurar la renta de este mes ¡Vamos, Levy! – dijo tomando a la pequeña peli azul del brazo, arrastrándola en dirección a la barra del gremio, sin escuchar las quejas de ella.
En cuanto el libro que revisaban quedó desatendido sobre la mesa, Juvia se acercó a mirarlo con cautela, agradeciendo que había pocas personas allí a esa hora de la mañana. No parecía un tipo de magia compleja, según pudo ver, pero no se molestó en revisar con cuidado, ya que no demoraría mucho en verse su mentira descubierta. Desprendió la página del libro en cuestión y se marchó rápidamente del gremio, con el entusiasmo de tener una nueva estrategia para conquistar a su amado.
Gray, por su parte, sin saber qué peligro le acechaba, se encontraba buscando fruta en el mercado, hasta que inusitadamente se sintió algo extraño… paró un momento, mareado. Un montón de sensaciones y pensamientos le embargaron, pero eran tantos que se sintió abrumado por ellos ¿es acaso que algo le había enfermado?
Miró las frutas en su bolsa y luego alrededor, en todas direcciones, pero simplemente no se lo explicaba.
Le sobrevino un súbito calor, como si alguien hubiese subido la calefacción de repente. Se apoyó en la pared más cercana y los reclamos de la gente le indicaron que se había quitado parte de la ropa.
Una imagen intrusiva se estaba integrando a su mente: como si en un espejo se estuviera mirando, lentamente, viendo cada detalle de su propio cuerpo, pero desde fuera. La situación era tan extraña y novedosa… Buscó desde qué lado era la imagen que veía, sólo para encontrar a Juvia que sonreía esperanzada desde una esquina. Otra imagen más venía ahora a su mente, él sosteniéndola de la cintura firmemente, besándola como si en eso se le fuese la vida, pero esto no parecía algo que él había imaginado.
La pobre Juvia no daba más de felicidad porque su plan comenzaba a dar resultados, Gray estaba a unos metros de ella, y sabía que la observaba, como pocas veces lo hacía, y sentía la confusión en su mente. Pero sin importar lo que pasara creía con firmeza que Gray comprendería que esta era la única manera de que ambos pudieran demostrarse lo que sentían de una vez por todas.
Gray se acercó con la mirada fija en ella, con una pregunta muy clara en su cabeza "Esto es cosa de ella ¿Qué diablos está pasando?".
"Tranquilo, Gray-sama" escuchó desde dentro la respuesta, con la voz de ella resonando en su cabeza, pero seguro de que no había movido sus labios siquiera "¿Pero qué rayos?". La cara de confusión de Gray hizo que Juvia continuara "Gray-sama está unido a Juvia a través de sus pensamientos". La cara de Gray reflejó su desconcierto. "Está bien, estoy enloqueciendo… ya no basta con encontrarla en todos lados, ahora oigo su voz en mi cabeza" pensó el pelinegro, a lo cual escuchó la risa de Juvia, quien ya estaba frente a él.
- Juvia también puede oír la voz de Gray-sama en la suya - "Esa hermosa, hermosa, voz" agregó mentalmente, olvidando que Gray también podía oír ahora sus pensamientos. Cuando se percató de aquello, se sonrojó profusamente, pero Gray parecía confuso y totalmente enfadado.
"O sea que ésta es una más de sus locuras..." pasó por la cabeza de Gray, antes de que él pudiese controlarlo. "Juvia no está loca, sólo enamorada… y Juvia no tendría que recurrir a estas cosas si Gray-sama fuera más sincero con sus sentimientos" pensó ella en respuesta, sonrojándose nuevamente. Gray estaba igualmente sonrojado, ya que jamás había oído a Juvia defenderse así antes, pero claro, nadie dice todo lo que piensa, pensó "¿Así que estoy conectado a tus pensamientos? ¿Pero cómo y por qué?"
– Juvia no pensó que Gray-sama se molestaría tanto –dijo acompañado de un suspiro, agregando mentalmente que "Juvia sólo quería que Gray-sama pudiera entender lo que Juvia siente por él".
– Juvia, yo entiendo eso, pero dime ¿el fin justifica los medios para ti? Porque esto me hace sentir muy invadido – "el único lugar seguro que toda persona tiene son sus pensamientos y ya ni siquiera eso tengo ahora… esto es más grande que cuando te metiste en mi casa" dijo rememorando la oportunidad en que la encontró esperándolo vestida de maid en su hogar.
Juvia veía en su cabeza las imágenes del recuerdo de Gray, de ella con su disfraz "Juvia se veía mejor de lo que pensaba"
– ¡Aaaagh, ése no es el punto! – Indicó Gray llamando la atención de la gente que iba pasando por el lugar "No sé qué intento hacer explicándole, si no va a entender… Sólo se entiende a sí misma, además la gente está comenzando a mirarnos extraño".
"Juvia cree que las gente lo mira a usted, Gray-sama" dijo Juvia bajando su mirada por su torso.
"Es cierto, mi ropa… bueno, al menos tendrán algo bueno que mirar" pensó antes de volverse a mirar si encontraba alguna de sus prendas.
"Juvia preferiría que sólo ella lo pudiese mirar" pensó Juvia mientras le seguía "Juvia no quería hacer enojar a Gray-sama, sólo quería volverse una con él" dijo en sus pensamientos.
"Esa frase es muuuuy sugerente" sonó la voz de Gray divertida en la cabeza de Juvia, aunque no pareció haberlo dicho intencionalmente.
Juvia, cuya imaginación siempre se ha caracterizado por ser muy activa, se aceleró y comenzó a imaginar un escenario donde él la desnudaba y tomaba, en plena barra del gremio, sin embargo, rápidamente tomó consciencia de que Gray también podía ver lo que ella había imaginado.
– ¿¡Qué!? – "¿Así que ese es el tipo de cosas que imagina? Bueno, eso estuvo... interesante…"
– Juvia lo lamenta, no pudo controlarlo – "y fue su frase la que lo produjo"
– Si eso ocurre a menudo será un poco problemático – "Soy humano, por Dios santo y eso sería como tener el cerebro enchufado al porno" pensó sin querer.
"Juvia no piensa en eso tan a menudo… bueno, sí, pero no tan seguido, bueno, sí, pero... nunca pensó que pasaría algo como esto... en el libro parecía más sencillo" pensó Juvia recordando la hoja que había extraído del tomo de Levy.
"¿Qué libro?" preguntó Gray, viendo imágenes, pequeños extractos del recuerdo de Juvia sobre lo ocurrido esa mañana en el gremio.
– Vamos a ir directamente al gremio a deshacer este enredo – dijo Gray encontrando su camisa enredada en un poste y poniéndosela "a menos que quieras seguir compartiendo tus fantasías eróticas conmigo" agregó mentalmente. Si bien Juvia negó con la cabeza y se sonrojó nuevamente, una nueva tanda de imágenes de la misma fantasía de antes volvió a reproducirse en la cabeza de Gray.
"Okay, eso luce bien... pero ese no es el punto... no deberías estar compartiendo algo que no planeas ni quieres compartir con nadie"
– Gracias, Gray-sama – "esto fue una mala, mala idea"
– Al menos te das cuenta de eso… ¡Vamos! – dijo encaminándose hacia el gremio "¿Qué pasaría si intento pensar en otra cosa cuando piensas en eso, haremos cortocircuito o algo?" Se preguntó Gray sonoramente en sus pensamientos "Juvia no lo sabe… creo que hay muchas cosas de esta magia que Juvia no sabe" respondió mentalmente la chica.
– Bueno, tendremos que averiguar... – Indicó Gray.
En el gremio Lucy y Levy estaban confundidas porque Mirajane les había dicho que no tenía misiones para ellas… claro, cabía la posibilidad de que Juvia se hubiese equivocado, pero todo parecía extraño. De momento la conversación de ellas rondaba el hecho de que Lucy no tendría con qué pagar su renta este mes si Natsu y Happy no se animaban a hacer misiones, por lo que no habían notado que el libro que antes leían estaba cerrado y con menos páginas que en un inicio.
– ¡Levyyyyyyyyy! – Gritó Gray desde la entrada del gremio, seguido por una avergonzada Juvia.
Levy se volvió hacia la puerta sin comprender por qué Gray la llamaba
– Levy, tieeeeeenes que ayudarme – dijo Gray acercándose rápidamente cuando logró ubicarla, hincándose frente a ella para hablar – tengo un problema con un hechizo de un libro que sólo tú puedes deshacer.
Levy pestañeo rápido, sin comprender nada, mientras Juvia seguía a Gray, guardando la distancia.
– ¿Gray, cuál es la prisa? – dijo Lucy desconcertada por la urgencia de su compañero.
– Juvia las escuchó hablar de un hechizo esta mañana y decidió probarlo conmigo – dijo con cara de sufrimiento.
– Hoy en la mañana estuvimos hablando de varios estudios sobre el uso ético de la magia… – dijo Levy mostrando el título en letras doradas del tomo que tenía sobre la mesa.
– Es uno para conectar los pensamientos de las personas – dijo Gray.
– Pe-pero eso no es posible, es sólo una teoría que se está investigando, nadie ha podido hacerlo – dijo Levy en respuesta.
– Puede hacerse, créeme – dijo suspirando – el problema ahora es deshacerlo.
Levy miró hacia donde Juvia se encontraba, ya que parecía estar avergonzada y casi hundiéndose en sí misma, apoyada contra una pared a cierta distancia, y luego volvió a mirar a Gray.
– Haré lo que pueda – dijo tomando el libro y buscando las páginas donde se encontraba el estudio del cual estaban hablando más temprano. – Estoy segura de que aquí estaba, pero falta una página – indicó Levy.
– Espera un momento – dijo Gray volviéndose hacia Juvia y aproximándose a ella. – Necesitamos la página que falta. – dijo en tono autoritario.
Juvia debatía si entregársela "Si Gray-sama hace esto perderán la oportunidad de saber lo que el otro piensa de ellos" argumentó.
"Si no deshacemos esto terminarás odiándome porque comenzaré a pensar cosas muy feas de ti" argumentó Gray "además, ya sé dónde está escondida la página".
Juvia se llevó una mano al pecho, sabiendo que la había metido por debajo de su ropa, ajustándola entre sus pechos "Gray-sama no se atrevería…".
"Lo dices como si no te gustara la idea" pensó, motivando una serie de imágenes de él desnudándola lenta y suavemente en su cabeza. Estuvo a punto de darse cabezazos contra la pared por haber pensado aquella frase, pero sólo apoyó la espalda contra la pared junto a ella.
– Debes dejar de hacer eso – dijo, acentuando mucho la primera palabra.
– ¿Es idea mía o se miraban como si estuviesen flirteando? – aprovechó de decir Lucy al oído de Levy
– No lo sé – contestó, alzando luego la voz hasta donde Gray y Juvia se encontraban – ¿Gray, tienen la página?
Gray miró a Juvia, quien estaba muy sonrojada por haber compartido aquella fantasía con él y la vio desabotonar la parte superior de su traje… no era la intención de Gray mirar, pero se encontraba sobreestimulado después de todas esas fantasías. Juvia le miró repentinamente con los ojos muy abiertos, al darse cuenta "¿Gray-sama, quiere ver?" Gray se volvió inmediatamente hacia otro lado, completamente avergonzado "Si Gray-sama quiere ver, está bien... es el único al que Juvia dejaría ver".
Gray rió suavemente "esto es demasiado extraño… no deberías estarme dando permiso para mirarte, deberías estarme pasando ese papel para salir de todo este embrollo". Juvia le ofreció el papel prolijamente doblado y Gray lo tomó, percibiendo la calidez que desprendía en sus dedos.
– La página que falta – Dijo acercándose a Levy y entregándosela.
– Gray, es idea mía o ustedes se están llevando bien –dijo Lucy con un tono insinuante. "La rival de amor está envidiosa de la cercanía de Juvia y Gray-sama" escuchó Gray resonar en su mente de parte de Juvia. "Lucy no tiene envidia, sólo quiere molestarme" Pensó Gray en respuesta.
– ¿Lucy, podrías ayudarle a Levy con lo del hechizo? – preguntó haciendo caso omiso de su comentario.
– Está bien, pero sólo si me ayudas a convencer a los chicos de salir en una misión – dijo Lucy estirando su mano, ofreciéndole un trato.
– Está bien, buscaremos una misión. – "aunque no prometo no luchar con Natsu durante ésta" agregó mentalmente. – ¿Ahora, qué hacemos nosotros?
– Esperar, de momento, hasta que descubramos algo… – Respondió Levy, haciéndole pensar que "eso no suena alentador".
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - o - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - o - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
Tengo escritos al menos 3 capítulos de esta aventura, los cuales subiré cada dos semanas. Mi idea es hacer una historia de a lo menos 6 capítulos esta vez, pero esta vez me forzaré a mi misma a mantener la constancia. Ya que he decidido renunciar a mi trabajo por motivos personales, supongo que tendré el tiempo necesario también para hacerlo.
Espero que nos estemos viendo prontamente y que me puedan dejar sus comentarios respecto a la historia. Besos
