Al habla la escritora~ Quería hacer un fanfic largo desde hacía bastante sobre la historia de Estados Unidos, empecé uno hacía bastante, pero por tonterías mias acabé dejandolo abandonado y cuando quise volver a seguir no me convenció, así que decidí empezar uno nuevo gracias a los ánimos de mi ruso y una bielorrusa que en el fondo es una fangirl enfurecida (Con amor 3 XD)

Bueno, son una serie de drabbles sobre la infancia, la juventud y madurez de Alfred F. Jones. ¡Así que allá va!

Couples: RussAme y FrUk

Advertencias del capitulo: RussAme por un tubo y un inglés furioso [?]


Aun recuerdo ese día como si fuese ayer y no quiero olvidarlo nunca.

-¡Alfred!

El grito sonó por la ladera haciendo revolotear a algunos pájaros de algún árbol cercano. El adulto empezó a correr por donde creía que había ido su pequeño, aquello que siempre estaba en su mente y ahora era su razón de vivir. Se le aceleró el corazón al verlo al final de la colina, de espaldas a él y delante suya un desconocido donde lo más característico que podía ver era una bufanda y un largo abrigo claro. Aumentó el ritmo comenzando a subir la ladera como alma que lleva el diablo, sudando, ya agotado sin dejar de gritar su nombre hasta que el niño se dio la vuelta para mirarle y regalarle una de sus brillantes sonrisas como dándole la bienvenida.

Si su Alfred estaba bien no había problema, no parecía asustado, ni tampoco herido. Suspiró un poco más tranquilo, pero no dejó de correr hacia él. Cuando estuvo a un par de metros extendió los brazos hacia el joven de cabellos dorados volviéndole a llamar para que se reuniese con él.

Alfred vaciló y volvió a mirar al chico que acababa de conocer, no parecía mucho más mayor que su hermano. Su sonrisa de oreja a oreja era agradable, cuando levantó una mano a modo de despedida frunció el ceño y salió corriendo en dirección al hombre que le esperaba con los brazos abiertos.

-Entonces, adiós Alfred, da-dijo el joven de la bufanda dándose la vuelta para retomar su camino y no volver a verlo más, al menos mientras el inglés siguiese con su tutoría.

Arthur tiró de su colonia y esta le obedeció tranquilamente, pero justo cuando no podía esperar ya nada una frase salió del pequeño.

-¡Que aburrido que sea un adiós!

El ruso se giró para mirar fijamente al niño con expresión confundida. Era capaz de rechazar una orden de su superior siendo una simple colonia. Alfred sabía perfectamente que si su hermano consideraba peligroso acercarse al ruso no debía hacerlo, porque para eso era una simple colonia, un territorio anexado a un gran país que es incapaz de sobrevivir por sí mismo. Al menos eso le hacía creer el inglés, pero podía, claro que podía. Y eso se había dado cuenta Ivan con tan solo aquella frase rebelde.

Nuevos tirones, esta vez más insistentes que hicieron que la colonia volviese a andar junto al mayor y ambos saliesen correteando bajando de nuevo la ladera.

El de ojos violáceos se quedó en cambio viendo como se alejaba, no dejaba de mirar al pequeño, no había huido de él ni tampoco había dado signos de miedo. Aquel niño criado entre almohadones a la vez que educación severa había captado su atención.

Tan diferentes y tan parecidos.

Ivan se dio la vuelta entonces para no volver a aparecer más hasta que pasasen los años suficientes para que la colonia inglesa se revelara contra su propia familia y siguiese sus propios ideales rebeldes que el ruso sabía que guardaba en lo más profundo de su mente.


¡Y hasta aquí el primer capitulo! Espero que haya sido ameno de leer~

¡AAAAACK! ¡Pude subir el fic! Tomates no por favor, prefiero hamburguesas

¡A partir de ahora preparaos para mucho fluff y sobredosis de azucar! xD

¿Rew? ;3;