Buenas noches todo mundo!

Disclaimer: La obra de Sherlock Holmes no me pertenece, todo pertenece a Sir Arthur Conan y esto esta basado en la vercion moderna de Gattis y Moffat

Beta Reader: Lizie CoBlack

Holmes y Watson

El tiempo se congeló por completo, ni siquiera estabas seguro de si estabas despierto o si habías quedado momentáneamente sordo o simplemente habías entrado a una realidad alterna, donde todo lo que había dicho Sherlock tuviera meramente sentido.

—Tu… ¿qué? —Apenas pudiste articular y te diste cuenta que la mujer a tu lado estaba igual, en cambio, el detective parecía tan tranquilo como siempre, como si no acabara de decir eso.

—Voy a ser padre —. Parpadeaste un par de veces y solo pudiste sentir el peso de una mano sobre la tuya, definitivamente, la opción de un universo alterno donde ser padre significaba: "he resuelto un crimen súper sangriento", sin duda.

— ¿P-padre? —El detective asintió en respuesta a la rubia y tú solo pudiste parpadear un par de veces.

—Sherlock, sabes lo que significa ser… padre, ¿no?—.

—Darle mi apellido a otro ser viviente que comparta genes conmigo, además de la crianza y cosas de esa índole —, parpadeaste un par de veces y Mary suspiró un poco tranquila. —No me digas que pensabas que quería ser padre del tipo sacerdote —. Te miró alzando una ceja y solo sostuviste la respiración, jamás lo pensaste, y Dios eso hubiera causado un impacto mayor, quizás.

—No, Sherlock, es decir… ¿Cómo que ser padre? —Suspiró cansado, cansado de tu estupidez por no seguir el ritmo de sus pensamientos, esperabas que esta vez de dignara a explicarte.

—Seré padre, tendré un hijo —. Sostuviste la respiración más de lo que quisiste admitir.

Si él sería padre, eso significaba que el niño tendría una madre… ni siquiera habías pensado en ello, Sherlock y otra mujer, teniendo un hijo, quisiste fingir demencia por unos minutos y hacer como si no supieras cómo se hacen los bebes, Mary en cambio puso su mano sobre su corazón y miró a Sherlock igual de sorprendida.

—… Entonces… tienes una novia que está embarazada y no lo habías dicho hasta ahora… ¿Eso quieres decir? —Miraste a Mary y seguidamente a Sherlock, él suspiró de nuevo, cansado.

—No sépor qué hacen tanto alboroto sobre el sexo—fue su respuesta cansada mientras se dejaba caer dramáticamente hacia atrás en su silla. —No, no es mi "novia" y no, tampoco es una prostituta, por si les preocupan las enfermedades—se cortó mientras miraba el techo, Mary te miró esperando que dijeras algo, ¿pero qué diablos esperaba ella que tú dijeras? Al darse cuenta que eras un caso perdido miró a tu amigo e inclinó un poco su cabeza.

—¿Quién es la chica?

—Charlotte Lombard, estudiante de física cuántica, 33 años, 3 maestrías en química, matemáticas y biología, interesada en el estudio de la teoría de las cuerdas, adepta a la lectura y escritura. 1.60, castaña, ojos verdes, padre francés y madre escocesa. Toca el chelo y el piano. ¿Algo más? —Miraste a Sherlock, él miraba el techo distraído.

—¿Dónde la conociste?, ¿en algún bar de súper genios? —Él solo alzó la ceja, mirando nuevamente el cielo.

—En teoría jamás la he visto en persona, conoció a Mycroft en uno de los viajes de mi hermano a Paris, él le explico mi deseo y ella accedió con la condición de que le dejara ver al niño al menos una vez al año, nada trascendental, solo quiere ver cómo funcionan nuestros genes juntos, acepte —. Parpadeaste un par de veces confuso.

—Serás padre, ¿sin jamás haberla visto? —Él alzó la cabeza de manera dramática mientras soltaba un bufido cansado.

—In-vitro—. Alzaste la ceja esta vez y él te miró incrédulo y soltó un murmuro parecido a "no puedo creer que esto esté sucediéndome". —Fecundación in-vitro, eres doctor pensé que sabrías esas cosas… Debes actualizarte, John.

Sin poder responder escuchaste los pasos de alguien que subía las escaleras y todos giraron sus cabezas, justo para ver a la Sra. Hudson entrar, traía en brazos a tu pequeña hija, la cual miraba a la mujer con una sonrisa enorme mientras sostenía un dulce en sus manos y reía de cualquier cosa. Perfecta.

—Sherlock dijo que quería mostrarle algo a ustedes —la mujer dejó a la pequeña rubia en el piso y corrió justo para saltar en las piernas del detective, quien la recibió con una sonrisa.

—¡Tío!—Fue su grito/saludo antes de comenzar a hablar a toda prisa, solo entendías algunas cosas de una rana y una cuerda, el resto eran palabras torpes mal pronunciadas y pausas largas donde la niña trataba de recuperar el aliento, el Sherlock mayor solo sonreía y asentía ante cada palabra que la niña dijera y respondía de la manera más elocuente, haciendo que la pequeña señorita (como Mycroft no se cansaba de decirle) sonriera con un enorme brillo y hablara todavía más rápido.

Sherlock tendría un hijo, un hijo con una mujer que no conocía, una mujer que de hecho era una genio, una genio que llevaría al bebe de Sherlock por nueve meses, un bebe que verías dentro de ese periodo de tiempo, periodo de tiempo en el que Sherlock se prepararía para tener un hijo… un hijo con una mujer que no conocía…

Tus pensamientos se hubieran estancado de no haber sentido el peso sobre tu mano, miraste a la mujer a tu lado, hermosa como recordabas y le sonreía a la escena del detective con tu hija en sus piernas, los miraste. La hermosa sonrisa de tu perfecta hija, con los perfectos ojos del detective sobre ella.

Él seria padre, y viéndolo allí, con lo más preciado que tenías sobre sus piernas, solo pudiste sonreír asintiendo sin darte cuenta. Él sería el mejor padre que cualquier niño podría tener.

Si no, tú, Mary, la Sra. Hudson, todo Scotland Yard, incluso el maldito gobierno británico, se encargarían de que ese niño tuviera la mejor y más bella infancia.

…

Pensaste que serían 9 meses, te habías preparado para recibir al pequeño (porque ya estaba confirmado que sería niño) en marzo, pero por supuesto con cualquier Holmes (aun si no nacía) nada estaba seguro.

Recordaste el día en el que Sherlock dijo algo sobre tener que salir del país y volvió dos semanas después con un pequeño bulto entre sus brazos.

El pequeño William Hamish Holmes había nacido el 28 de Noviembre, pesaba 3 kilos 345 gramos, su cabello era castaño obscuro (de su madre suponías) perfectamente rizado y cuando abrió los ojos te permitiste suspirar tranquilo, eran igual de imposibles (y hermosos) que los de su padre.

Todos estaban encantados con la pequeña criatura, todos, absolutamente todos, se turnaban para cargarlo y hacer muecas para que niño los mirara (cómo no) como imbéciles, y todos estallaban en risas, "definitivamente tu hijo" fue lo que dijo Lestrade cuando el niño hizo un puchero ante las muecas del detective.

Tu pequeña princesa lo adoraba, al principio pareció preocupada y recuerdas como se abrazó de tu pierna cuando vio a su padrino llegar con el pequeño bulto en brazos. Cuando entendió que aquel pequeño ser no la remplazaría comenzó a cuidarlo con mucho esmero, la recordabas corriendo de un lado al otro cuando el niño comenzaba a llorar, trayéndole todos los juguetes que se podían ocurrir con tal de hacer feliz al niño.

—Toda una Watson—fue el comentario que soltó alguna vez la Sra. Hudson, sonreíste sin proponértelo.

Ella era toda una Watson y él todo un Holmes. Con todas las implicaciones que con llevaba aquello.

Fin

Bueno, esto fue escrito entre la 1am del 18 de Abril y las 8:30pm del 19 de Abril, 3 capítulos cortos :'D

Esta dedicado a Liz! gracias por ser el foco que guió mi inspiración y gracias por haber corregido el fanfic también c:

Y un detalle importante, este fic fue escrito bajo las influencias de "Fools de Lauren Alquilina" Literalmente si no tenia la canción reproduciendo no podía escribir, un caso raro lo se.

Espero les gustara en una semana subo el siguiente capitulo -w-

Tenshi