Wajajaja... Primer fanfiction shonen-ai que pongo! Así que amantes del KuroFYe, agarrense de sus sillas por este viaje de sangre, sudor y lágrimas... ah, no era risas, sudor y drama.

1º: El chico nuevo

-Chicos- dijo el profesor por encima del desorden general- Conozcan a su nuevo compañero.
La puerta se abrió y un joven de pelo rubio, ojos azules y complexión delgada entró. Traía ropa normal... en lo que cabe. Llevaba puesto una chamarra larga color blanco con azul y pantalón de mezclilla.
-Mi nombre es Fye D. Flourithe- se presentó sonriendo arrancando al instante varios suspiros entre las chicas, a excepción de una que se sentaba en los bancos de atrás.
-Espero lo ayuden a integrarse pronto al grupo. Fye, por favor, siéntate en el banco vacío que está por allá por la ventana.
La misteriosa chica que se sentaba detrás de él no tardó en saludarlo. Tenía el pelo largo, con un fleco y dos mechones mas cortos enmarcando su cara. Vestía excéntrico, pero bien.
-Soy Yuuko Ichihara. ¿Así que D. Florithe? ¿De donde eres?
-Francia.- miró al chico que se sentaba frente a él. Tenía el pelo negro parado en picos y era bastante alto, pero no muy corpulento.- ¿Y él quién es?
-Ah, ese es Kurogane Hanagemaru*.- respondió sin dar mucha importancia al asunto.- Es algo corajudo, pero buen tipo.

No saben la soledad que da cuando llegas a medio año a una escuela dnde ya todos los grupitos están formados. Así que obviamente me fuí ese receso a la biblioteca. Y tampoco tenía muchas ganas de convivir con la gente, según me dijo Yuuko, todos en esa escuela estaban algo... locos. Si por locos se refiere a que las chicas me perseguían hasta la puerta del baño, vaya que sí. Sólo espero no me sigan al dormitorio del internado.
¿PoRqué mis padres me mandan a un internado a un país extranjero? ¿Y más después de lo que... pasó?
-¿Tú eres el chico nuevo, verdad?-una voz algo dura me distrajo de mis pensamientos.
-¿Kuro-rín, verdad?- este puso cara de fastidio.
-Ku-ro-ga-ne. ¿Y qué haces aquí?
-Escondiéndome de mis fans. Nos pusimos a jugar a las escondidas. ¿Y tú?
-Vine por libros para mi proyecto de ciencias. Tengo que sacar buena puntuación porque... ¿Y porqué te digo todo a tí?- al parecer este tipo no se va por las ramas y tampoco confía.
-No sabía que teníamos que hacer un proyecto.- respondí
-Bueno, como sea, mi compañero fue transferido a otra escuela. Así que, como prefieras.
Entre mi club de fans (que cocinaría para mí, bwajaja) y el señor serio-gruñón-desconfiado creo que quedó clara mi elección.

A la primer hora de ciencias llegué con el profesor para decirle quien sería mi pareja en el proyecto.
-Sensei... con Kurogane.
-Muy bien.
Él sólo puso cara de WTF?! y fui derechito a sentarme a su lado en la misma mesa.
-¡Hola Kuropín!
-¡¡QUE ME LLAMO KUROGANE!!

Sillas atrás Yuuko sonreía. Había notado algo interesante en ese par tan disparejo.

OK, el título viene por una canción de Ana Torroja, para que no pregunten luego. Tirenme flores, rosas o jitomates, según les vaya gustando.