Ranch Montan White

Por Mayraexitosa

Prologo

Esta historia es la vida de las hijas de Ronald White, un hombre vaquero en toda la extensión de la palabra, cabal, leal y muy afamado en Texas, donde se lleva a cabo la más hermosa historia de las White las chicas que siendo preparadas llegaron a Texas después de haber estudiado en Europa y siendo hijas muy consentidas y mimadas, llegó el día que Ronald White las necesitó.

Dando comienzo a una historia de mucho valor y confianza, la menor de las White nunca se fue, Candy White se quedo junto a su padre, estudió cerca y ayudaba a su Padre a sacar adelante todos los menesteres al no contar con hijos varones, ella aprendió de ganado, de caballos, de todo tipo de animales, estudio en el mismísimo Texas la carrera de Doctora veterinaria porque así ella sería quien apoyaría a su valioso padre, el más rico de toda unión americana, gracias a ella, fue que a sus hermanas nada les faltó, despilfarraron el dinero y se dieron una vida de damas de sociedad mientras ella se quedó a conocer lo que su padre tanto necesitaba.

Candy White era la más pretendida chica de todo el estado en general, muchos ambicionaban las tierras pero ella encontró una forma de quitarse a esos que tanto la asediaban diciendo que la fortuna no era de ella sino de la mayor de sus hermanas, pues su madre la dejo como única heredera en condición a su Padre, esto era una real mentira, su Padre al enterarse sonreía, y fue a ver los estados de cuentas que llevaba, se dio cuenta que Candy era la que nunca gastó su fortuna, sino sus hermanas, que como estudiaban y se preparaban en Europa y con la distancia y todos los gastos ellas habían despilfarrado toda su herencia, mientras que Candy nunca la utilizó, por el contrario sirvió para apoyar y acrecentar el rancho, fue así que tomo una decisión que nadie se imaginó jamás, ella sería la única dueña de Rancho Montan White, su padre lo puso a su nombre no era heredado era de ella, así que no había pelea en el testamento, tenía algunas condiciones pues sus hermanitas eran preparadas y podían quitarle a Candy lo de ella, pero el padre la dejó muy bien protegida, pues la herencia de él la dejo a sus otras hijas, sin incluir a Candy y el testamento diría que ella no recibiría nada.

Para asegurarse llamó a sus socios de la juventud y les pidió apoyo para Candy que si alguien la atacaba por ser la dueña de Rancho Montan White, ellos la defenderían de quien fuera, esos amigos estaban muy lejos de él, pero apreciaban al viejo Ronald como a un hermano y por supuesto que aceptaron apoyarlo llegado el caso de necesitarse, pues ellos tenían fortunas muy importantes las cuales respaldarían en una emergencia a Candy White, quedando como sus fiadores honorarios y socios protectores.

Otra de las coincidencias es que todos sus amigos tenían como mínimo dos varones cada uno mientras que White solo mujeres había tenido y seis hijas, era muy delicada la situación, pues cualquiera podía acabar con sus hijas de proponérselo y en eso un hombre estaba muy dispuesto Daniel Legan tuvo un hijo varón, siempre había querido casarse con la hija menor, pero cuando supo que la hija mayor era la heredera principal, sus objetivos cambiaron por completo.

Ronald veía montando a Candy domando un caballo que su amigo Tom le ayudaba por ver a esa hermosa mujer dominando el caballo él se enloquecía, estaba perdidamente enamorado de Candy desde niño, pero ella no le correspondía y eso a muchos les sucedió "Cuando llegue el amor de mi vida lo reconoceré", esa frase era por mucho la que escucharon todos sus pretendientes, pues ella no les correspondía.

Capitulo 1

Mi Padre

Ronald White cayó enfermo, Candy mando llamar a sus hermanas, ninguna pudo venir estaban muy ocupadas y por la distancia no podrían llegar, pero mandaban decir que su Padre era muy fuerte, que nada malo sucedería, llegaron sus amigos y socios a verlo Hans Williams, sonreía con él, lo veía muy delgado, no era el hombre fuerte que había sido en la juventud y sabía que su momento se acercaba, llegó después Jerry Carter, él y su familia adoraban a Candy, sabían que era la única que siempre estuvo ahí. Después llegó William Andrew, este se quedo varias semanas conviviendo con su amigo, ambos conversaban como nunca y por finalizar llegó Bob Wells, ese hombre que adoraba a Candy y sonreía.

-Vamos Ron, mira que mejor la quieres, si en esa hija tienes a cinco varones juntos, sabe hacer todo lo que hacíamos nosotros. Ron sonreía orgulloso de Candy, William dijo

-Bob ella siempre será una mujer valiosa, la más parecida a su madre pero por dentro lleva un Ron con toda la fortaleza en ella. Jerry al escucharlos dijo

- Y deben ver como tiene a todos aquí, no solo marchando al son que ella toca, sino tras ella y no deja que nadie se le acerque, sabe controlar muy bien el ganado. Todos se reían. Llegaban los hijos de Carter por él, saludaban muy formales venían por su Padre y ambos ya estaban casados, llevaban la administración de su Padre y lo amaban como a nadie. Candy los atendía y los saludaba, para despedirse de Jerry quien le dijo

-Solo varones tuve, tu eres mi hija también. Los hijos de Jerry sonreían y apreciaban a Candy.

Días después se iba Hans sonriente porque dijo que Ron viviría más que todos y solo se estaban reuniendo por puro gusto, este hombre falleció antes que Ron, dos semanas después de haberse reunido. Candy no le aviso a su Padre y ella fue a su despedida.

Bob se fue solo, dijo que si Ron faltaba el vendría a cuidar personalmente a Candy, se lo juró a William y a Ronald, ambos sonreían pero este fallecería después de Ron. William en cambio antes de irse dijo.

-Candy tengo dos hijos y ambos solteros los enviare a apoyarte Anthony y Albert serán quienes te ayuden por mí, a cuidar a este viejo papelero que solo hace por morirse y no termina de irse. Candy sonreía por lo que escuchaba de su Tío William, pues ella los quería como hermanos de su Padre.

Llegó un sequito de autos por William que se lo llevaban a Escocia, ya se había quedado mucho tiempo, pronto llegaría la muerte de Ron y ella estaba sola con él, llamó a los médicos, hizo todo lo humanamente posible pero su valioso padre se iba feliz con esa pequeña a la que le decía su "coyotita" comúnmente así se les decía a la hija menor y eso a él lo lleno de felicidad desde que nació Candy.

Tom estuvo con ella, llegaron los hijos de Jerry y sus esposas, la familia de Hans y uno de los hijos de William Andrew, las hijas por los traslados y sus equipajes voluminosos, no pudieron llegar a tiempo, la realidad es que se les había terminado el dinero y sus cuentas estaban muy debajo de lo normal, así comenzaban por querer volver pronto pero sus ropas y sus cosas, sus departamentos, Romina la mayor una joven castaña muy bonita a la que todos conocían como Romí, venía de Inglaterra la acompañaba su novio Terry, Bezy una hermosa rubia vendría de Alemania su nombre real era Albeza esta venía acompañada de su guapo novio Edward, pues planeaban casarse pronto.

De Francia venía Orelia mejor conocida como Lely, una hermosa modelo castaña con su prometido Pierre, de Suiza volvía Cesárea, la peli roja de la familia a quien todos llamaban con el nombre de Chay y su novio John y desde Austria volvía Guillermina o Mine para sus conocidos esta también venía con su novio Ben, los cuales ya vivían juntos, los planes recibir la herencia y casarse, o bien seguir viviendo sus vidas.

En el sepelio hubo una hermosa reunión de amigos, todos muy atentos, Candy en todo momento tranquila, vestía de negro en un hermoso y elegante vestido, Tom estaba muy pegado con ella, parecía su novio, hasta que se presentó el hijo mayor de William.

-Disculpe Srita. White, mi padre me envió a quedarme aquí, pero no quiero incomodarla con su novio, no se verá bien.

- No se preocupe Tom es como un hermano conoce todo en el rancho nos ayuda aquí y no es mi novio, él no vive en esta casa, usted es hijo de… mi Tío William

- ¿Su Tío?

- Es de cariño, el es un hermano de mi padre, se apreciaban mucho señor…

- Llámame Albert.

- A mi dime Candy.

- ¿Y sus hermanas?

- Están en Europa, no alcanzarán a llegar, llevamos varios días esperándolas, hasta que dijeron que no alcanzaban.

-Yo vengo desde Escocia y es extraño, esta época no es tan difícil de conseguir vuelos.

- No tengo idea porque no están aquí, las llame desde que se enfermó, pero por una cosa o por otra no creyeron que estuviera mal.

- ¿Son menores que usted?

- Por favor tutéame Albert, si eres casi un miembro de esta familia eres el hijo de mi Tío William, estás en tu casa, y no quiero que te sientas mal, aquí dispones de lo que necesites.

- Gracias Candy, pido lo mismo y me tuteas también

-Con esa barba y ese bigote no te pareces a ninguno de los amigos de mi Padre, te reconocí solo por sus ojos.

- ¿Mis ojos?

- Ninguno de los amigos de papá tiene una esposa tan bella como la esposa de mi Tío William, debiste sacar sus ojos.

- Gracias, entonces tus hermanas son las menores.

-Todas son mayores que yo, soy la menor.

- Mi padre no me dijo mucho de ti, solo que te cuidaría y te protegiera contra todos, la verdad no sé a qué se refiere, espero que no seas muy atacada por la gente, cosa que dudo, si tratas así a todos, deberían tratarte de maravillas.

- Gracias Albert, estás en tu casa, ya acomodaron tu equipaje, es la habitación que esta antes de la ultima, pues si llegan mis hermanas, no quise ocupar sus habitaciones, y no sé si vengan acompañadas,

-Gracias Candy, como sea estaré contigo hasta que todo termine, y despidas a todas las personas que vinieron a acompañarte.

Pasaron las horas y ella atendía a todos con muchas atenciones, se iban marchando y quedaba sola con Albert, y algunas personas recogiendo la casa. Ella dijo

- Fuimos tantas mujeres y no llegar ninguna al funeral, bien le dije a mi padre, que más que educarlas estábamos echándolas a perder, todos preguntaron por mis hermanas y muchos ni las conocen.

-Candy no siempre somos perfectos al educar a la familia, mi padre fue muy duro conmigo y mi hermano es muy bueno y muy consentido, no por eso es malo, al contrario es muy buen administrador y sabe llevar todo, lo cierto es que nos educamos junto a mi padre los dos.

- ¿Cómo se llama tu hermano?

- Anthony. ¿Y tus hermanas?

- A ninguna le gusta su nombre así que te diré como las conocen a todas, a Romina la mayor la conocen como Romí, es muy buena estudió administración y finanzas. En realidad ella no sabía nada de sus hermanas, pues todas dijeron estudiar una cosa y se dedicaban a otra en el caso de Romí era modelo profesional. Albeza o Bezy es muy parecida a mí, es rubia y sus ojos son verdes claro. En ese momento Albert vio a los ojos a Candy y ella los tenía muy verdes, no claros. Orelia o Lely, Cesárea o Chay y Guillermina o Mine, yo soy Candice y me dicen Candy.

-Pues si son nombres poco comunes.

-Eso se lo deben a mi abuela, era muy metiche, no dejaba a mis padres poner el nombre, murió antes que yo naciera y me salve. Pues llevó el nombre más dulce, ambos se sonrieron.

Pasaban a cenar, después se iban a dormir, ahí vio Albert que la habitación del fondo era la de Candy, dijo

-Porque le toca esta habitación Candy, si usted puede elegir alguna más cercana a la escalera principal.

-Desde niñas soy la última, pero esta es la mejor habitación ¿y sabe por qué? Albert sonrió sin decir nada ella agregó - Porque es la mía, desde niñas mis hermanas soñaban con una serenata de sus novios, y buscaban el balcón al frente de la casa, mientras esta, se ve todo el jardín del patio trasero, se ve todo el paisaje más hermoso de las colinas del fondo, las actividades de los rancheros y el trabajo de este lugar, desde aquí es la mejor vista de toda la casa, no la cambiaría por nada, si se levanta temprano lo invito a cabalgar y que conozcas todas las cosas que hacemos aquí.

A eso de las cuatro de la mañana, Albert escuchó el agua de una regadera abrirse y supo que Candy se había levantado, el hizo lo mismo, tenía mucho sueño, un día antes se quedaron platicando y no se imaginó que Candy se levantará tan temprano, tal vez corría riesgos por los rancheros de ese lugar y es que Candy realmente es muy bonita, lo extraño es que no tenga novio, mi padre quiere que me case con una de las White y solo conozco a la menor, es probable que desee que conozca a las mayores, pero si viene Anthony se casaría con Candy sin dudarlo es la más hermosa mujer que he visto. Este se vio al espejo y traía la barba y el bigote, recordó a Candy y sonrió, la recordaba cuando le describía con detalles la vista de su habitación y este se rasuraba, se quitaba el bigote, pensando, total, si ella es una mujer muy hermosa, y si me corresponde ella sería por mucho la mujer ideal.

Salió y Candy estaba en la cocina vestida en jeans y camisa de mangas largas, un chaleco ajustaba su cintura haciéndola ver muy hermosa, su cabello era recogido en una coleta dejando caer sus hermosos rizos, preparaba todo junto a las cocineras para ayudar a servir.

Albert bajo vestido de manera informal en botas y jeans, camisa y chaqueta gabardina abierta de piel muy bonita, ahora ya no traía la barba ni el bigote buscaba a Candy escuchó cuando bajo, pero no la encontraba hasta que escuchó sus risas en la cocina y fue a buscarla, ella estaba de espaldas, sonriendo con Petrita una mujer que atendía la cocina.

- Petrita, que las tortillas estén recién hechas es delicioso, cualquier almuerzo así me lo acabaría, mira que iré a cabalgar y hoy hay ganado nuevo, los muchachos marcaran las reses y quiero ver que no haya ningún inconveniente. Petrita vio al hombre alto tras ella y la dejo hablar mientras sonreía, pues el hombre sonreía muy hermoso, se veía muy bien en la espalda de su niña White. Candy termino de agregar - Estaba tan nerviosa que hasta me desperté antes, nuestro invitado es muy atractivo. En eso Patrita abrió los ojos y apretó los labios asustada, se acababa de delatar con el invitado en su espalda. Candy ya no decía nada, tomando la bandeja para llevarla al comedor y se topaba de frente con Albert quien estaba sonriendo por lo que había escuchado, Candy se asombró tanto al ver a Albert sin barba y bigote que soltó la charola que llevaba y este no alcanzó a tomar más que una jarra humeante de leche caliente que alcanzó a tomar de su agarradera, para que no se derramara. Albert al ver la sorpresa de Candy y que este también se había recibido un buen piropo solo atino nervioso a decir

-Buenos días Candy, poniéndose un poco risueño pues estaba halagado por Candy.

-Bueno… Buenos días Albert, ¿tienes mucho aquí en la puerta?

-Iba llegando a buscarte.

- ¡Ah! Soltaba el aire Candy pensando que tal vez no la escuchó.

- ¿Por qué? Necesitas algo.

- No. Dijo en un suspiro, para después, levantaba la charola apenada por haberla dejado caer y Albert sonreía abiertamente al ver que definitivamente no le era indiferente a Candy. Si con su barba y bigote había sido atractivo para ella, al menos trataría de ser mucho mejor.

En Escocia Anthony hablaba con George

-Vamos George, si mi padre por fin confía más en mi que en Albert, lo mandó fuera y me dejo a cargo de todo, vez ya me estoy ganando su confianza, mi Padre sabe que soy muy bueno en los negocios.

-Señor Anthony, no tan bueno como sus primos, Alister y Archie, ellos ya les van ganando, Alister ya se casó y ustedes no. Recordando que mandó a Albert por delante con la idea de que conociera a una de las hijas de White y se casará, pues sus amigos ya tenían nietos mientras que él y Ron no.

En Inglaterra en el aeropuerto una pareja se besaba feliz pues viajarían juntos a conocer a su familia, aunque ya no alcanzaron a ver con vida a su Padre, Terry deseaba casarse con Romí y le había propuesto matrimonio en ese momento haciendo que ella aceptará y lo besara, ella vestía de negro y el igual, se veían muy atractivos, el actor y ella modelo, ambos con varios años de noviazgo, eran seguros sus sentimientos y la familia de Terry lo presionaba con que sentará cabeza, así fue que se animó a pedirle matrimonio a su novia, con la que ya llevaban una vida juntos y eran muy buenos en todo al estar unidos.

Ambos sabían sopesar los celos, las pretensiones de mujeres tras de Terry y de caballeros tras de Romí.

En New York llegaban a una trasbordo y se encontraban Bezy, Lely y Chay con sus parejas, ellas se abrazaban tenían años de no verse los hombres se saludaban con sincero aprecio, donde ellos eran sencillos y sin pretensiones, pues no eran de mucho dinero pero sabían trabajar bien, Edward pertenecía a una buena familia, Pierre y John eran trabajadores sencillos, pero amaban a sus novias y ellas los valoraban. Los seis tuvieron que esperarse al siguiente vuelo y se fueron a comer todos juntos invitados por Edward que deseaba ganarse a las hermanas de Bezy.

En Austria, salía el avión donde Mine notaba que su novio Ben puso muchos peros para poder ir, y este la alcanzaría después, temía que no la amará lo suficiente pues ellos vivían juntos y Ben no daba el paso para casarse.

En Texas, Albert y Candy cabalgaban por todo el Rancho donde ambos sabían mucho de caballos, la sorpresa para Albert fue saber que ella era veterinaria y a él, le fascinaban los animales.

-Si Albert me especialice en animales de granja por nuestro rancho, y es que aquí he crecido siempre, no me veía lejos de este lugar, me gusta el aire, el sol, no cambiaría esto por Europa y sus lujos.

- Lo dice por sus hermanas.

-Ellas gastaban mucho allá, entre estudios, sustento, alimentos todo es muy cara la vida en Europa, estuvimos a punto de perder el Rancho en una ocasión, sin que mi padre supiera, pague la hipoteca por completo con la herencia que dejo mi madre, pues estuvimos a punto de la ruina, actualmente Tom me apoya mucho con el ganado, pero mis caballos están teniendo problemas, y no he podido sacarlos adelante.

-Bueno en eso tal vez pueda ayudar, no se mucho de ganado pero sé algo de caballos. Candy sonrió y dijo

- Y de animales salvajes también, vi como le daba nueces a las ardillas en el trayecto que subimos colina arriba.

-Es muy observadora Candy.

-También tú Albert.