FALLING APART
Scully POV
Post I Want to Believe
Disclaimer: Fox Mulder, Dana Scully y X Files no son míos, pertenecen a Chris Carter, a FOX y a 1013. No pretendo sacar ningún beneficio económico ni nada por el estilo, solo los tomo prestados para jugar un rato.
La inminente llegada de capítulos nuevos de la serie ha desatado una nueva ola de inspiración, y como ya sabemos que CC plantea unos Mulder y Scully separados, entonces es necesario pensar que podría haber salido mal después de aquel final tan prometedor de IWTB.
Gracias a Jen, la siempre amable y mejor Beta que se puede tener.
Les agradezco sus reviews y opiniones, así sean cortos, me animan a continuarlo.
CAPÍTULO 1
Las cosas funcionaron por un tiempo, unas increíbles semanas en las que viajamos, nos olvidamos de todo y alcanzamos a pretender que todo había quedado atrás.
Pero no paso más allá de eso. Unos días de ilusión y vacaciones en una hermosa isla del Caribe.
Yo tenía esperanzas, en realidad creí que podríamos hacerlo funcionar si le dábamos más tiempo y nos alejábamos de todo y todos. Las dudas y temores que revoloteaban en mi mente constantemente en mi cabeza no estaban del todo alejados de la realidad aunque yo me empecinara en ignorarlos.
Justo después de que los días de playa y sol se convirtieran en una vida común y hogareña en un pequeño poblado costero, las cosas entre el asistente del entrenador de béisbol y la doctora del pequeño hospital, empezaron a tomar un camino tortuoso. El mismo de siempre, uno donde la oscuridad seguía siendo una presencia dolorosa.
Las pesadillas empezaron a robarle la calma a sus noches y de alguna manera, también a sus días.
Semanas de insomnio al estilo de los viejos tiempos, seguidas de días con lo que sospecho eran comienzos de depresión y constantes momentos de irritación por cosas sin sentido, y poco a poco Mulder empezó a caer de nuevo en el patrón de aislamiento que durante años tuvo después de que escapamos y nos escondimos.
Pero ahora tenía un problema más complejo, porque insistía en negarlo todo y volvía temeroso a poner una fachada contenta y positiva ante mí. Trataba de mostrarme que todo estaba bien y por un par de días, justo después de una crisis, así era y todo volvía a la "normalidad".
Como si fuese a mí a quien le temía. Quien lo forzaba a ocultar lo que le estaba sucediendo.
Supongo que su temor era que, de nuevo, me fuera de su lado y que volviese a dejarlo solo con sus problemas. Yo era quien no le dejaba ser él mismo.
La idea de alejarse de todo y tratar de hacer una nueva vida en otro lado fue de él, Mulder mismo la propuso cuando terminado el caso le dije que me marchaba fuera del alcance de la oscuridad, de la vida que tuvimos como agentes y todo lo que tuvimos que sacrificar por eso.
Él mismo buscó un sitio, investigó, compró los tiquetes aprovechando que ya no es buscado por la ley y que puede disponer de ciertos dineros que tenía escondidos y me trajo a una isla del Caribe para que empezáramos una vida nueva.
No puedo decir que no lo intentó, porque estaría cometiendo una gran injusticia con él.
Pero tampoco se puede negar lo que uno es, no tiene sentido cambiar lo que te hace especial solo porque alguien más así lo quiere.
A veces pienso que lo que nos unía era una cruzada, nuestro trabajo y el esfuerzo por hacer del mundo un mejor lugar, pero nuestros objetivos en la vida cambiaron tanto que nuestro punto de encuentro se alejó y nuestros caminos empezaron a divergir casi sin darnos cuenta.
Yo se que también tengo culpa en esto, porque no pasa un día en que no extrañe a mi hijo y no desee que las cosas hubiesen sido diferentes; que él no hubiera estado en peligro y sobre todo, que yo no lo hubiera tenido que afrontar todo estando sola.
Pero el hubiera no sirve porque sé que no puedo cambiar el pasado, así me atormente y me torture todo lo que quiera, así me enloquezca pensando en lo que debí haber hecho. Nada voy a poder cambiar y debo aprender a vivir con las decisiones que tomé.
Sin embargo, lo que sí puedo cambiar es mi futuro, el de ambos, y sé que en esta relación no estamos ganando nada bueno, no veo el horizonte después de la tormenta y al paso que vamos, creo que la única que puede evitar que nos hagamos más daño, soy yo.
Él... bueno, creo que Mulder piensa que mientras me tenga a su lado no hay problema, pero lo que no logra ver es que merecemos más que una compañía a la hora de cenar o dormir.
Y no se trata de que se acabase el amor. Lo amo tanto que no podría explicarlo fácilmente, las palabras no son suficientes para medir mis sentimientos por él.
Esa es la razón de mi angustia al verlo autodestruirse, precisamente porque lo amo es que no puedo ver como se deja caer en la tristeza y se aísla al punto en que su mirada a veces es vacía, lejana mientras se sienta en el estudio, cerca de una ventana con un libro en la mano. Se supone que está leyendo pero sé que no lo hace; y si lo observo yo a él desde lejos puedo notar que es como si soñara despierto.
¿Con qué sueña? ¿En que está pensando todo el día?
Cuando le he preguntado ha divagado. Me responde que en nada, que está cansado o que en algo que leyó.
Pero yo sé bien que es una mentira, lo conozco desde hace demasiado.
Mulder extraña todas las aventuras, las noches sin dormir, las locas teorías de conspiración, las persecuciones, el peligro y cada una de las explicaciones que me daba y durante las cuales yo recuerdo aún muy claramente su sonrisa, una expresiva y emocionada sonrisa que, nunca más le vi en su rostro por ningún otro de los momentos que en nuestra vida de pareja hemos tenido.
Así es cómo lo veo yo, como un círculo vicioso del cual no hay salida fácil y así es que llego a la decisión de alejarme de nuevo de su lado, y seguramente, de su vida para siempre.
Porque el Fox Mulder que conocí y del que me enamore, ya no existe o no quiere existir sin su trabajo y todo lo que lo identificaba con él.
No quiero pensar que ya se ha acostumbrado tanto a tenerme a su lado que da por sentado que aquí voy a estar, que puede dejarme lidiar con todo y que cuando se despierte un momento, tan solo va a tener que girarse en la cama y me encontrará ahí esperándolo.
Pero a decir verdad, así mismo es como yo siento las cosas con Mulder. Una relación en la que yo de nuevo soy quien sacrifica y pone todo el esfuerzo por la normalidad.
Pase de ser la compañera por quien viajaría hasta la Antártida a rescatarle, a ser la mujer que se encarga de traer el mercado, limpiar, hacer la comida y acompañarlo en las noches. Todo muy conveniente para que él solo tenga que hacer lo que quiere y cuando se siente con ganas de salir de la casa.
Mulder ha desgastado mi cariño, ha minado mi paciencia y tristemente, ha dejado abandonado el amor que teníamos como pareja.
Sentada en la hamaca que tengo en el balcón, observo la puesta del sol de un día hermoso, una pareja de gaviotas sobrevolando a lo lejos, el sonido de las hojas de los árboles componiendo una suave melodía con el viento. Mientras toda esta belleza transcurre a mi alrededor, yo decido que mañana mismo empezaré a organizar mis cosas.
Una lágrima escurre por mi mejilla inadvertidamente, sin testigos del momento tan duro que estoy viviendo, secándose rápido con la brisa salada del Caribe.
Estoy sola, debo acostumbrarme a esto y seguir adelante.