"Los funerales de Lucy Loud"

Lúgubre, el día era lúgubre, de esos que ella añoraba tanto en vida.

Lluvioso, el día era lluvioso, cuyo melancólico y grisáceo cielo mañanero derramaba sus lágrimas sobre su lecho, extrañándola, amándola, desconsolado, doliente de su abrupta partida y deseando su permanencia, su permanencia, su permanencia…

Oh, ¡y como lloramos!, lloramos, lloramos…lloramos ante su inminente viaje.

Oh, ¡y como nos lamentamos!, nos lamentamos, nos lamentamos…nos lamentamos su perpetua perdida.

Oh, ¡y como nos dolía!, nos dolía, nos dolía…nos dolía el verla partir.

Llegado el mediodía, el "Castillo de la Princesa Negra" descendió por primera vez.

Y más de uno intento evitarlo, y más de uno se negaba la cruel verdad estrangulándola en lo más profundo de nuestros corazones, haciéndolos estallar en un mar de mentiras y desilusiones (la de perder a un ser querido). Destrozados sueños eran los que acompañaban al tieso cadáver en su etéreo sueño morfínico, aquel que terminaría por extenderse por milenios, de aquí hasta el final de los tiempos.

El féretro se sumergía en las entrañas de Egea, confundiéndose la caoba con el mugriento fango, y el oro con el rocío de aquel tan verdoso pasto. Su entierro se realizó en el campo, a plenitud de la naturaleza; la ignorancia de tan hostigante y cegador sol. Los instantes se hacían eternos, atemporales, similares a un bucle infinito, el cual estábamos condenados a presenciar una, y otra, y otra, y otra vez más.

"NO FUISTE INMORTAL CUAL SOMBRÍO VAMPIRO, NI INCÓLUME CUAL NECRÓFAGO DE LA NOCHE. ODIO EL TENER QUE PERDERTE, MI HERMANA FAVORITA"

Lucy… ¿Por qué tuviste que dejarnos?, nosotros tu familia que alguna vez te amamos tanto.

¿Por qué cerraste para siempre ese bello par de resplandecientes ojos, cautivadores y púrpuras?

¿Por qué es que son así las cosas?...tan frágiles, tan delicadas, tan materiales e inconstantes. Tan fugaces son los entes que recorren este mundo; breves, que perecen ante la fatiga o la edad de sus cuerpos. Aquellos miserables que padecen ante la inmisericorde Muerte, la cual les arrebata la última gota de vida en sus cuerpos.

Y a su alma se las lleva lejos, muy lejos, allí donde no se ha de alcanzarles.

Hoy fuiste la elegida que emprendió el tan ansiado viaje al Mas Allá, y mañana lo seremos nosotros, los cuales esperaremos ansiosos ese tan glorioso día (el día en el cual, nuevamente felices, te veremos "reír" una vez más).

Llegada las 2 de la tarde, el "Castillo de la Princesa Negra" empezó a sufrir, como nunca lo había hecho antes.

Me duele el tener que hacer esto… ¿Por qué debo hacerlo? ¡No quiero hacerlo!...me resisto a aceptar que te hayas ido… ¿Por qué?... ¿por qué te vas?...no te vayas…por favor no te vayas. Por favor Lucy, despierta y dame un abrazo, un último fraternal beso, un nuevo recuerdo, otro permanente sentimiento…Que este no puede ser el fin, no nuestro fin. No el fin del lazo que nos ha unido por más de 8 años…

Esto no puede ser cierto. Esta miseria ha de ser un maldito sueño, una fantasía, una ficción…

No Lucy. Oh Lucy…yo…yo…no, nosotros.

Nosotros jamás te olvidaremos.


Es todo por ahora, espero que haya sido de su agrado, nos estaremos viendo por estas semanas, soy nuevo en este fandom y la verdad si que vengo con muchas ganas de escribir sobre el mismo. No olviden compartirlo, comentarlo y agregarlo a favoritos.

Soy "Zalgo Viajero" y este sería un hola y, al mismo tiempo, un hasta pronto.