Tutorial
El despertador indicó que su siesta de veinte minutos había acabado. Sintiéndose renovado, Koushirou se levantó de su cama de un salto. Estaba dispuesto a terminar de escribir su tesis esa semana. Al final de ese semestre el pelirrojo estaría recibiendo su título como doctor en ciencias informáticas. Nada le emocionaba más en el mundo… bueno, quizás no tanto como su boda con la chica más hermosa del planeta.
Para el tímido y callado genio de las computadoras todavía era difícil de creer que la bellísima Mimi Tachikawa había aceptado ser su novia tantos años atrás, y le sorprendió aún más cuando seis meses atrás la castaña había gritado y llorado de emoción cuando él le propuso matrimonio. De verdad que el portador del emblema de conocimiento era muy afortunado. Izzy jamás admitiría esto en voz alta, pero disfrutaba mucho ser la envidia de todo hombre.
La boda estaba planeada para un mes después de su graduación pues así lo había querido él. Planeaba darle a su futura esposa la mejor vida que pudiese, para lo cual necesitaba un buen trabajo y tiempo para dedicarle y demostrarle lo tanto que la amaba. Muchas empresas le habían ofrecido excelentes ofertas con horarios razonables, por lo cual todo iba viento en popa. Siempre y cuando entregase su tesis a tiempo.
Pero, ¿cómo terminar su trabajo cuando no podía encontrar su computadora? Koushirou habría jurado que la dejó en su escritorio. Antes de entrar en pánico revisó otras áreas donde a veces le gustaba trabajar, como el comedor, la lavandería y hasta el cuarto donde Mimi guardaba las decoraciones de Navidad. Ni un solo rastro de su preciado ordenador. Ahora sí se permitió perder la cabeza. Seguro alguien había entrado a robar mientras dormía. No importaba que fuese el medio del día, y que su apartamento estuviese altamente asegurado y que la computadora era lo único que faltaba. ¿Cómo explicarlo de otra manera?
Estuvo a punto de marcar a la policía cuando la melodía de una canción pop llegó a sus oídos. Colocó el teléfono de vuelta a su base y se dirigió hacia donde provenía la música. A medida que se acercaba más y más a la fuente, la canción se detuvo y una chillona voz la remplazó. Izzy no podía comprender lo que decía, pero su tono era muy irritante.
Abrió la puerta del baño de invitados con cuidado, y quedó pasmado con lo que se encontró. Su prometida vistiendo nada más que una de sus camisetas blancas, que en su pequeño cuerpo quedaba muy holgada. Y su computadora reproduciendo un video en el cual una chica hacia algo raro con su cabello y un aparato cilíndrico mientras daba instrucciones. Mimi imitaba cada uno de los movimientos con su propio cabello.
"¡Kou kou!" chilló alegremente cuando se percató de su presencia "Estoy probando un par de peinados para la boda. Como estabas dormido no pensé que te molestaría si tomaba tu compu para ver los tutoriales, ¿o sí te molestó?"
Izzy no podía decirle que estuvo muy cerca de provocarle un infarto minutos atrás. No, no con lo adorablemente linda que lucía incluso con su cabello agarrado con ganchitos en diferentes partes y varios mechones sueltos que caían en rizos.
Se acercó a ella y la tomó por la cintura para besarla. "No, no me molesta, mi amor."
Mimi le devolvió el beso dulcemente, y cuando él la levantó para colocarla junto al lavabo ella lo abrazó por el cuello y lo atrajo hacia sí para devorar sus labios una vez más y desabotonarle la camisa. Sin duda de que Koushirou era muy afortunado.
Esta ha sido y siempre será mi pareja favorita de Digimon. Se me hacen tan adorables juntos. ¿Alguien más está emocionado por Digimon tri? Definitivamente la publicidad del 15th aniversario me ha motivado a revivir mi niñez y el amor que tenía por esta serie, y pues helo aquí este fic cortito en honor a ello. Espero que haya sido de su agrado.
Un beso,
Alessandra
