El Encargo.

Capitulo Uno: De Regreso.

No seria hasta entonces un estupendo dia, pero por lo menos había terminado al fin de ordenar alfabéticamente todos sus libros de pociones. Se dejo caer suavemente sobre el diván y observo su trabajo al fin terminado con mucho entusiasmo y orgullo, sinceramente nada como terminar con la limpieza de la casa.

Las vacaciones habían empezado hace un par de semanas y severus snape buscaba desesperadamente una ocupación, algo en que distraer su mente, y justo en aquel momento el ultimo ejemplar de El Profeta se estrello contra su puerta principal. Se levanto muy despacio y abrió la puerta para recoger el diario que luego arrojo por algún rincón olvidado y volvió al diván para descansar.

-Señor Snape!, Señor Snape!

Había cerrado los ojos por un instante pero una voz chillona y desconocida gritaba descontroladamente su nombre desde afuera. Volvió a levantarse, se acercó a la ventana y levanto levemente las persianas para ver de que se trataba, pero no vio nada, y sin embargo siguió oyendo que alguien gritaba. Abrió la puerta y en menos de un pestañeo algo salto sobre el y lo arrojo de espaldas al suelo muy bruscamente, y ese algo lo aplastaba totalmente.

-Ay por merlín!, se encuentra bien Sr. Snape?

Snape abrió lentamente los ojos, y ahí le vio, una joven de mas o menos 20 años, con un abrigo rojo y zapatos de tacón del mismo color, llevaba el cabello rizado y rubio tomado en una cola y traía unas gafas oscuras.

-No!-chillo snape-no puedes ser tu!

La joven se sonrojo y rió un momento.

-ya lo se!, es increíble no?

El se levanto y se metió a su habitación aterrado.

-llamare a la policía, tu no debes estar aquí!-chillo-la ultima vez que

te vi fue en tu funeral!

-en el segundo querrás decir, para el primero no me conocías aun-rió.

-Hannah, vete ahora mismo!

-no puedo Sr. Snape, el que no debe ser nombrado me a enviado aquí, para que me quede con usted, acabo de regresar de Barcelona y debo reorganizar mi vida -dijo y saco la varita de su bolsillo-así que se resignara y viviremos en paz y armonía-con un leve movimiento hizo levitar sus tres maletas y las acomodo en medio de la sala.

-No te mentiré Hannah, te temo, ahora lárgate!

-Le prometo que me portare bien-dijo con voz dulce.

Snape la miro por un momento, sentía tanta rabia, desde el primer momento en que la dejo entrar a su vida supo que todo seria un verdadero caos, y ahí la tenia nuevamente, Hannah Riddle, 25 años, piel extremadamente blanca, cabello rubio y rizado, ojos extrañamente rojizos y malévolos, y no olvidemos el enorme historial de asesinatos con el que la joven Hannah comenzó a los 20 años, exactamente el dia en que la conoció y todo por ese maldito encargo.

-Vamos Sr.Snape, olvidemos el pasado y comencemos de nuevo-sonrió.

- es imposible olvidarlo-le dijo.

-Aww, entonces que le parece si usted y yo…-comenzó a acercarse a el peligrosamente-…tomamos el te?

-Pondré a calentar el agua entonces-le dijo mientras se apartaba-acomoda tus cosas en la habitación de la derecha, estare en la cocina por si necesitas algo.

Severus abandono la sala, y ahí estaba ella, parada y sonrojada, ¡cuanto deseaba a ese tipo! Llevo las maletas a la habitación y se dejo caer sobre la cama, no olvidaba aun la ultima vez que estuvo ahí, incluso después de su segunda muerte y resurrección, de esos años inolvidables en Barcelona tratando de olvidar a ese hombre que le quitaba el sueño. Cinco años había esperado, la ultima vez había metido la pata, pero esta vez estaba completamente decidida a hacer las cosas bien, a la mala o no conseguiría a ese hombre testarudo que la trataba aun como si se tratara de una adolescente. En ese momento Snape entro a la habitación y la vio ahí sobre la cama mirando al techo, se acerco lentamente a ella(no iba a ser cosa que se muriera otra vez)

-Hannah, estas bien?-le pregunto.

Ella se levanto de un golpe y se sentó en la cama sonrojada hasta mas no poder.

-si, estoy bien, no se preocupe-le dijo-esta ya listo todo?

-si, ya esta listo, te hará bien una taza de café.

¿Café? El estomago de hannah se transformo en un torbellino de sensaciones, si sus oídos no habían oído mal snape había mencionado la palabra "Café", la ultima vez que había estado ahí el le había ofrecido leche y galletas, no podía estar mas feliz. Se sentaron y Severus le sirvió café con unos pastelillos de chocolate que sin duda eran deliciosos, ella no podía contener la emoción y snape comenzaba a notarlo.

-Te sucede algo?-le pregunto.

-no, creo que es el cansancio, muchos viajes y eso, esto de por fin quedarme en un lugar fijo es algo totalmente distinto al ritmo de vida que había tomado-le sonrió-si le contara Sr. Snape, e estado en tantos lugares, en tantas misiones y…

-Matado a tanta gente-rió el.

-Noo, ya basta-rió hannah-los asesinatos los deje, hace un par de meses, pero los deje, el Sr. Voldemort a preferido asignarme otra clase de misiones, dice que debo descansar por un tiempo, ese es uno de los motivos por el cual estoy aquí.

-y ya no te persigue la policía Muggle?

-no, hace mucho que se rindieron, me imagino yo, me he movido de lugar en lugar sin ningún problema.

-¿y los encargos?-el levanto una ceja, y hannah guardo silencio-me lo imaginaba, sigues con ellos.

-Usted no sabe nada-hannah revolvió su taza de café suavemente y luego lo miro fijo-ya no los hago yo, ahora es cosa de otros mortifagos.

Severus la miro por un momento. Terminaron de tomar el café y luego se fueron a dormir, cada uno pensando en el otro. El se quedo sentado en su cama, pensando, con la vista hacia el suelo, ella siempre entraba a su vida como un torbellino y desordenaba todos sus pensamientos confundiéndolo cada vez mas. Del lado derecho estaba ella, también sentada en su cama, sonriendo con la mirada pegada al techo como cada vez que se ponía a pensar en el, pero en ese momento lo tenia decidido, se levanto rápidamente y se quito los zapatos para no hacer ruido, le dio la vuelta a la manilla de la puerta lentamente y en menos tiempo en que se lo imagino ya lo tenia frente a frente en la mitad del pasillo con los ojos iluminados, pero ambos retrocedieron y volvieron a sus habitaciones, y tras cerrar la puerta ambos se maldijeron.


Aww! les gusto? esperen a leer el proximo capitulo !

dejen muchos reviews si les gusto, si lo queren criticar y si tambien quieren aportar con algo para que la historia siga mucho mejor!

que tengan un lindo diaa!!

/Susanaa