Capítulo 1: Te presento a Serena.

La barra del bar parecía más llena de lo habitual. Blair creyó que talvez este día había algún motivo especial por el cual celebrar. Miró nuevamente alrededor tratando de localizar a Nate, llevaba aproximadamente quince minutos esperándolo sentada en aquel horroroso lugar. Definitivamente detestaba tener que esperar, pero detestaba aún más los lugares que Nate solía frecuentar.

Más le vale tener una buena excusa. Blair bebió un sorbo de su trago y consultó nuevamente su reloj, rodando sus ojos tomó su bolso y se levantó. Casi al mismo tiempo que pensaba en irse lo más rápido posible de aquel lugar, vio la figura de Nate acercarse a ella. Blair en una simple mirada le expresó a su novio lo disgustada que estaba y Nate simplemente le sonrió a modo de disculpa.

Hola amor – Nate buscó los labios de Blair, pero solo encontró su mejilla – Lo sé, me retrasé, pero tengo una excusa –

Espero que sea buena – La morena cruzó sus brazos dudando de la eficacia de la excusa de Nate.

Espera un momento – Nate se devolvió sobre sus pasos y sonriendo tomó del brazo a una mujer que Blair jamás había visto. Era alta, rubia, con espectaculares ojos azules y una sonrisa tremendamente provocadora. La morena no pudo evitar deslumbrarse ante la arrebatadora belleza de aquella mujer.

Blair te presento a Serena van der Woodsen – Una extraña sensación de nerviosismo recorrió a la morena, por alguna extraña razón la imponente presencia de la rubia le hizo sentir una extraña timidez que jamás había conocido.

Mucho gusto Blair, he oído mucho de ti – Serena le sonrió y ella finalmente encontró su voz.

Mucho gusto Serena – Blair miró a Nate esperando algún tipo de explicación… ¿Qué clase de excusa era esta?

Bueno, este es el motivo de mi tardanza. Me encontré con Serena cuando iba saliendo de mi casa, comenzamos a conversar y se me ocurrió invitarla para que se conocieran – Blair asintió, pero aún no comprendía que tipo de relación existía entre su novio y Serena.

Sí, Nate me ha hablado mucho de ti. Pero al parecer no le has hablado a ella de mí, ¿Verdad? – Blair negó con su cabeza y Nate sonrió culpable – Nos conocimos hace un par de años en San Francisco y desde entonces hemos sido buenos amigos, aunque no nos veíamos hace mucho –

Entonces, ¿Eres de San Francisco? -

He vivido los últimos años en San Francisco, pero soy de Nueva York, al igual que ustedes. Bueno y ahora me vine aquí para estudiar y cuando me enteré que Nate también está en Yale decidí visitarlo, pensé que sería divertido vernos nuevamente –

Claro – Blair le sonrió a Serena, no porque lo quisiera sino más bien porque no lo podía evitar, algo en la mirada de la rubia la hacía sentir extrañamente cómoda… luego de volver a la realidad observó a Nate – Nos disculpas, quisiera conversar algo con Nate – Le sonrió por última vez a Serena.

Claro, yo los espero aquí – Serena se acercó a la barra mientras Nate y Blair se alejaban un poco.

¿Y bien? – Blair comenzó.

¿Bien qué? –

¿Qué significa esto? ¿Hay algo que debas decirme? – Nate frunció el ceño sin comprender, por su parte Blair rodó sus ojos - ¿Tú y Serena… - Finalmente él comprendió y no pudo evitar reír enérgicamente.

O sea que crees que pasó algo entre Serena y yo… eso es gracioso – Nuevamente él volvió a reír.

Me encantaría comprender lo gracioso – La lapidaria expresión de la morena hizo que Nate terminara con sus carcajadas.

Claro, es que tú no lo sabes –

¿Saber qué? –

Digamos que jamás podría pasar algo entre Serena y yo, o algo entre Serena y cualquier sujeto –

Claro que sí, o sea mírala –

No, no es por eso. Lo que intento decir es que a Serena no le atraen los hombres – Blair juraría que su mandíbula acababa de chocar contra el suelo.

Debes estar bromeando – La morena no pudo evitar mirar de soslayo a Serena.

No, y déjame decirte que tiene un exquisito gusto en mujeres –

¡Nate! – Blair golpeó suavemente el brazo de su novio.

Es verdad… bueno, supongo que ya no estás enfadada – Blair volvió su mirada a Nate.

Supongo que no – Nate besó levemente a Blair y luego ambos sonrieron.

Será mejor que volvamos con Serena. No quiero que piense que la dejamos sola en este lugar – Blair asintió y ambos volvieron con la rubia.

¿Todo bien? – Serena observó a Blair y esta asintió sinceramente - ¡Excelente! Entonces comencemos a festejar – La efusividad de la rubia hizo sonreír a Blair nuevamente y olvidar porque estaba molesta inicialmente.

Al pasar las horas y los tragos, Blair sintió que conocía a Serena de toda la vida. Generalmente ella no solía abrirse con desconocidos tan fácilmente, más bien era desconfiada, pero la simpatía de Serena derribó sus esquemas y fácilmente compatibilizaron. Cada comentario de la rubia iba acompañado con una de sus arrebatadoras sonrisas y Blair creyó que podría seguir encantada mirándola sonreír durante toda la noche. Luego de conversar extendidamente, Nate decidió sacar a bailar a Blair, quien aceptó a pesar de querer seguir escuchando a Serena. La rubia los observaba detenidamente desde su asiento, luego de unos minutos el asiento estaba vacío.

¿Me acompañas al baño? – Serena se acercó a Blair mientras esta bailaba con Nate.

Ve, yo voy por un trago – Nate, quién ya estaba un poco mareado, asintió y se fue a la barra.

Vamos – Ambas chicas se encaminaron hasta los baños.

Lo he pasado espectacular – Serena se retocaba el maquillaje bajo la atenta mirada de Blair.

Yo también – Blair sonrió.

Al parecer la gente de Connecticut si que sabe divertirse –

Ni me lo digas –

Y Blair… ¿Te estás quedando con Nate? –

No, tengo un departamento cerca de la universidad –

¿Y eso porqué? – Serena dejó de mirarse en el espejo y se volteó para ver a Blair.

No lo sé… en realidad nunca hemos hablado sobre vivir juntos – Ahora que lo pensaba más detenidamente se le hacía muy extraño.

Que raro, estando tanto tiempo juntos supuse que ya vivían juntos y estaban planeando la boda o algo así – Blair se sintió repentinamente incómoda con el tema.

Creo que ambos hemos estado un poco desconcentrados con todo esto de la universidad y el cambio de ciudad – Serena asintió.

¿Nunca te has aburrido? –

¿Disculpa? –

Aburrirte. Llevas tanto tiempo con Nate, él me contó que están juntos casi desde siempre – Blair frunció el ceño, esta conversación estaba tomando un rumbo más serio del que ella esperaba.

No… quiero mucho a Nate, jamás me podría aburrir de él – La rubia asintió no muy convencida - ¿Por qué lo preguntas? –

No es nada, simplemente a mí me cuesta hacer que mis relaciones duren. Generalmente me aburro muy rápido –

Creo que no nos parecemos mucho en ese aspecto –

Definitivamente no – Ambas sonrieron.

Nate debe tener muy buenas aptitudes para mantenerte a su lado – Serena se acercó a Blair.

¿A qué te refieres? –

Ya sabes… - Serena alzo sus cejas sugestivamente – Aunque no sé si puedes estar muy segura de eso –

¿Porqué no? –

No tienes mucho con que compararlo… después de todo han estado juntos desde… -

Desde los diez años –

Wow… eso si que es compromiso, pero bueno supongo que si has besado a otras personas además de Nate –

¡Por supuesto que sí! –

Y bien… ¿Nate es mejor que todos? – Blair no sabía que la hacía sentir más incómoda: el interrogatorio de la rubia o la exagerada cercanía de esta.

Supongo que sí – La fría pared le informó a Blair que ya no había escapatoria.

No suenas muy segura – La respiración de ambas se combino y Serena no podía dejar de observar los labios de la morena.

Talvez no lo estoy…

Notas de la Autora: Hola, ¿Qué tal? Bueno, este es mi primer fic en fanfiction y quise compartirlo para ver que les parece. Por favor siéntanse libres de comentar y decirme si debo continuar con esto o no.

Muchas gracias por leer y espero que este sea un buen comienzo.

¡Nos leemos pronto!