Bueno, he dejado muy descuidada esta parejita que es muy especial para mí, mi segunda OTP de Hetalia. Leyendo babosadas por aquí y por allá, se me ocurrió esto, y le doy gracias a Pix…mi amigo imaginario jajajaja. Siempre a mi lado, juntos hasta el final (mode forever alone ON).

Disclaimer: Ojalá pagaran por esto, pero ni modo. Que si cobrara, una linda demanda de Hidekaz vería en mi buzón (?)

Pairing: Gilbert / Elizabeta – Prusia / Hungría (Porque son lo mejor de lo mejor, vivan con ello)

Advertencias: AU (¿cuenta como una? Si es así, nunca la he puesto xD) Psicología inversa…fingida.


Al grano

Directo, siempre al grano. Gilbert era ese tipo de persona, y Elizabeta no hacía más que golpear su frente. Si quería algo, lo decía. Y en el hipotético caso de no conseguirlo, porque "es sí o sí", las más raras y extrovertidas tácticas que residían bajo las pulcras mangas del albino salían a la luz. Chiquillo malcriado, pensaba Elizabeta, irónicamente rondaba los 26 años. No sabía que era peor, los berrinches de él, o ella por seguirle el juego en contadas ocasiones.

Por algo eran pareja, ¿verdad?

Extrañamente, aquel día Gilbert sólo tomó asiento a su lado y ni una palabra salió de sus labios. El único ruido que se oía en el cuarto era la televisión, aparato al que ninguno prestaba atención. Podrían estar pasando noticias de una bomba nuclear lanzada y ellos ni en cuenta. No la miraban, pero tampoco había contacto visual entre ellos. Él se entretenía jugando con su mascota, Gilbird; y ella leyendo un libro.

—Tengo hambre.

Elizabeta despegó su mirada del libro y señaló el camino hacia la cocina.

—Hay bastante en el refrigerador, hazte algo.

El albino bufó con aburrimiento dando a entender que no lo haría. Que su trasero seguiría pegado al mullido asiento hasta que sus nalgas se hicieran cuadradas. Ella se volvió a concentrar en su lectura diciéndole a su manera que no se levantaría, que no era su maldita sirvienta.

Gilbert acarició la cabeza de Gilbird y lo colocó en la mesita que estaba frente a él. Se deslizó lentamente hacia el lado donde se encontraba Elizabeta, acortando la distancia entre ellos. La chica frunció el ceño, lo conocía muy bien y sabía que en ese momento usaría una estúpida táctica.

—Eres linda, Elizabeta —susurró con una sonrisa apoyando su cabeza en el hombro izquierdo femenino.

La castaña enrojeció levemente. Estúpido Gilbert, realmente podía rendirse en algunas cosas. Maldito flojo. Le observó por el rabillo del ojo y cerró el libro.

—Cállate —agarró el rostro varonil del albino y juntó sus labio con los de él. Gilbert se acomodó en el sillón, y posó sus manos en la cintura de Elizabeta obligándola a pegar sus cuerpos.

El beso terminó y Gilbert descendió lentamente hacia la clavícula femenina dejando un rastro de besos húmedos, sin dejar de tocar con picardía los muslos de ella. Elizabeta sujetó y alzó con fuerza los cabellos blancos de él.

—Vamos a la habitación, tonto —beso su mejilla y se incorporó acomodando en un movimiento puramente coqueto y provocador su blusa, incitando al albino a perseguirle.

Gilbert sonrió con autosatisfacción. Él era un hombre directo, y lo que quería lo conseguía. Y al ver marchar a la castaña con ese sutil movimiento de caderas, se sintió victorioso. Había dicho tener hambre, pero ¿acaso dijo de qué? Se levantó del sillón y siguió a la chica, cerrando la puerta tras de sí.

Pero si Gilbert era un chico directo, Elizabeta era una chica inteligente. Que de vez en cuando, le seguía el juego a su novio.


Notas:

En serio debería mejorar más en eso de poner títulos xD
Como amo a esta pareja, y estoy tratando de escribir uno largo pero USUK jajaja, ojalá se me ocurra algo con ellos, no sé, algo de piratería no se oye mal, ¿qué opinan ustedes? :3
Bueno, les dejo. Se cuidan y sigan leyendo bwajaja

Ciao~