Era una hermosa mañana para el puerto de ciudad Felicia en el cual cierta rubia se encontraba asombrada mirando el barco que abordaría.
-¿Enserio te casaras en este barco?- pregunto Rin a Meiko que se encontraba a lado de ella
- Si, ¿Sorprendida?- respondió y pregunta una muy alegre Meiko
-¡Claro que sí!, no puedo esperar para la boda- dijo muy ansiosa Rin
Lo único que Meiko respondió fue con una risilla, para ella lo único bueno de eso era que Rin estaba feliz.
-Rin, Meiko vámonos- les llamo desde lejos un anciano.
Ambas se acercaron a él y de ahí se subieron al barco, al subir primero fueron al salón donde daría lugar la boda en dos días, este era muy lujoso el piso de madera fina y las paredes eran blancas y había sirvientes decorando el lugar.
-¡Meiko!- se acerco a ellos una joven alvina
-¡Haku!, pensé que no vendrías- dijo Meiko abrazando a Haku
-No me lo perdería por nada- dijo Haku separándose de Meiko- tú debes ser Rin, o me equivoco- dijo mirando a Rin con una sonrisa
-Si soy yo -respondió Rin
-Meiko siempre me habla de ti en sus cartas- comento Haku a lo que Rin respondió con una sonrisa
-Usted debe ser el abuelo de Rin, un placer señor Kagamine- saludo formalmente Haku
-llámeme Tsukasa, señorita Haku- dijo amablemente el anciano
-está bien, Tsukasa- dijo Haku
-¿Por qué no van a ver todo el barco entero?, de seguro tienen mucho de qué hablar- dijo el abuelo de Rin
-Pero señor Tsukasa…- ave a contradecir Meiko pero fue interrumpida
-Pero nada, no te preocupes Rin desempacara tus cosas- dijo amablemente el señor Tsukasa
-Bueno está bien, los veré esta noche en la cena- concluyo Meiko
Y así Rin y su abuelo se dirigieron a sus camarotes, al llegar Rin entro al que sería el de ella y Meiko, empezó a desempacar sus cosas pero alguien toco a su puerta
-Adelante- dijo Rin y entro su abuelo
-Mira Rin quiero que queden claras las cosas, si accedí a que vinieras fue porque Meiko me rogo y quiero que te portes bien, aquí hay mucha gente importante y no quiere que me avergüences como siempre lo has hecho, y si lo haces sufrirás mucho, entendido- amenazo Tsukasa a Rin
- si abuelo lo entendí- dijo Rin con mucho desgane
-bien y será mejor que luzcas hermosa y con suerte consigas un novio que te aleje de mi para siempre- concluyo el abuelo de Rin retirándose
Rin solo suspiro y siguió desempacando, ya estaba acostumbrada a los maltratos de su abuelo pero sus castigos eran muy crueles, ella no sabría si podría seguir así, ojala y como dijo su abuelo encuentre a un apuesto príncipe que la aleje para siempre de su abuelo. Después de unas horas ya había terminado de desempacar su ropa y la de Meiko asique decidió salir a recorrer el barco pero no contaba con que al salir encontraría a todos los guardias inconscientes, aterrada corrió a buscar a cualquier persona y al llegar a la cubierta vio que todas las personas que estaban a bordo del barco estaban siendo amarradas y despojadas de sus riquezas por tres piraras, pero el más le llamo la atención fue el pirata rubio, entonces aquel pirata cruzo la mirada con Rin y ambos se quedaron hipnotizados uno por el otro.
-"amor a primera vista"- pensaron ambos al unisonó
-Len, reacciona- le grito el segundo pirata, que tenía el pelo verde igual que sus ojos, al pirata rubio que este reacciono enseguida y se acerco a Rin y le arranco un camafeo que colgaba de su cuello, estaba a punto de regresar por una cuerda para amarrarla pero esta la detuvo
-¡Por favor no te lo lleves!, es lo único que me queda de mi madre, te daré cualquier cosa, pero devuélvemelo- rogo Rin y ante esto Len sintió como se le oprimía el pecho
-"¿Qué diablos me pasa?, ni siquiera la conozco y me duele verla así- pensó Len mientras le regresaba el camafeo
-muchas gracias- dijo rin mientras le dedicaba una hermosa sonrisa a Len que este mismo quedo más que cautivado con ella
Pero sin previo aviso dos guardias del barco tomaron a Len y se lo llevaron sin darle oportunidad de hacer ningún movimiento, lo encerraron junto a sus dos amigos en una celda que se encontraba en el sótano del barco
-muchas gracias Len, si no te hubieras distraído con esa chica no estaríamos aquí- le restregó su amigo peli verde
- ya déjalo Mikuo, de todos modos no sabíamos que había guardias extras- dijo su otro amigo el cual tenía el pelo blanco y ojos rojos
-Si tienes razón Dell, lo siento Len- se disculpo Mikuo pero no recibió respuesta ya que el rubio todavía pensaba en cierta chica, lo mismo le pasaba a Rin ese pirata le devolvió su preciado camafeo y tenía que hacer algo para ayudarlo, "¿Qué puedo hacer yo?, soy solo un simple chica", pensaba Rin
-Rin ya es hora de la cena, no quiero que hables en la cena y si alguien te pregunta algo yo responderé, si te portas mal te castigare- le advirtió su abuelo a Rin
La cena transcurrían normal para Rin, cuando termino por ordenes de su abuelo se tuvo que retirar pero en vez de ir a su habitación iba a ir a la cabina, si Rin estaba decidida a rescatar a los piratas sin importarle el cruel castigo que le daría su abuelo si se enteraba, cuando entro nada más se encontraba el capitán, que para la suerte de Rin, se encontraba dormido y sin despertarlo Rin tomo las llaves de la celda en la que se encontraban aquellos piratas y con cautela salió del lugar, cuando llego a la celda donde se encontraban Len y sus amigos recibió miradas de sorpresa por parte de ellos, y más que sorprendido Len estaba feliz de ver a esa chica
-¿Qué haces aquí?- le pregunto Len a Rin
-Vine a sacarlos de aquí- le respondió mientras abría la celda
Ya abierta los cuatro salieron del lugar sin ser vistos pero cuando llegaron a la cubierta tres guardias de los cuales dos se dispusieron a atacar y el otro se quedo atrás, pero antes de que los dos guardias atacaran estos fueron derribados por otros dos piratas uno peli azul y el otro peli morado
-capitán llega en el momento indicado- le dijo Dell a él peli azul
-saben por haber fallado lavaran el barco por tres meses- les dijo el peli azul mientras los tres piratas ponían cara de fastidio
-vamos Kaito no seas tan cruel con ellos- le dijo el peli morado al llamado capitán mientras les daba una espada a los otros piratas
- Gakupo si no lo soy nunca aprenderán- le dijo Kaito al peli morado
- eh no quisiera molestar, pero se acercan más guardias- dijo Rin
Y así los 5 piratas se deshicieron de un grupo de guardias
-¿Quién es ella?- pregunto Kaito señalando a Rin
- ella nos ayudo a escapar- dijo Dell
- bien bella dama espero que me perdones por esto- le dijo Kaito a Rin
A Rin solo le dio tiempo de preguntar un qué ya que Kaito la golpeo en la cabeza dejándola inconsciente, cosa que molesto mucho a Len
-¿Por qué hiciste eso, es nuestra amiga?- le pregunto un alterado Len a Kaito
-tranquilo Romeo, fingiremos que es nuestra rehén, así escaparemos más fácil y ella no se meterá en problemas- explico Kaito
-bien- dijo Len un tanto molesto
Siguieron corriendo en dirección a la proa y cuando llegaron se vieron rodeados por cientos de guardias
-bajen sus armas o la asesino- amenazo Kaito apuntándole a Rin con su espada
-adelante, mátala- reto nada más y nada menos que el abuelo de Rin
-¿Qué acaso no le afecta que la mate?- pregunto Kaito
-en absoluto, de hecho seria como si me quitara una carga de encima- le respondió Tsukasa
Kaito se encontraba como dice el dicho "entre la espada y la pared", no podía matar a Rin pero tampoco podía demostrar que les importaba, pero antes de hace cualquier cosa Len se adelanto atacando a los guardias acción imitada por Dell, Mikuo y Gakupo
La pelea era dura y nuestros piratas se estaban cansando, entonces se acerco un gran barco pirata en el cual escaparon lo más rápido posible y Len con Rin en sus brazos.