El copyright y la Marca Registrada del nombre del personaje Harry Potter, de todos los demás nombres propios y personajes, así como símbolos y elementos relacionados, son propiedad de Warner Bros., 2000. A excepción de sucesos no relacionados con lo antes mencionado.


Capítulo I. Nouveaux Commencements

31 de diciembre - Víspera de Año Nuevo

Podía sentir como su corazón palpitaba a un ritmo desenfrenado dentro de su caja torácica, y esa horrible sensación de mariposas revoloteando sin control alguno en su estómago. A pesar de tener 20 años, Rose Weasley jamás había viajado sola y mucho menos vivido un semestre en el extranjero sin la compañía de alguno de sus primos o padres.

Estaba totalmente aterrada y miles de pensamientos comenzaban a acumularse dentro de su cabeza, cómo: ¿Y si perdía su vuelo? ¿Y si no lograba encontrar a la persona que la esperaría en el aeropuerto de París? O hasta las más ridículas: ¿Estaba en la terminal correcta? Al pensar en eso checó nuevamente su boleto de avión el cual señalaba la terminal 5 y luego miró las pantallas que le decían que su puerta de embarque era la A21.

Por mientras ella ya estaba sentada, con su maleta de mano, en las sillas de la puerta de embarque de la A21. Ambas de sus piernas temblaban y sentía unas tremendas ganas de soltarse a llorar ahí mismo. No tuvo la oportunidad de hacerlo frente a sus padres, porque ella detestaba mostrarse débil, pero ahora que ninguno de ellos la veía y las personas que la rodeaban ni la conocían, ni le estaban prestando atención… mas no lo haría, al menos que se encontrara en una situación como perder su vuelo o que su equipaje no llegara, entonces con toda la libertad lloraría.

—Pasajeros del vuelo BA6357 con destino a Charles de Gaulle… —Rose tragó en seco, ese era su vuelo, estaba a punto de partir.

Ya no había vuelta a atrás… aunque ese pensamiento venía estando dentro de su cabeza desde el momento que pasó seguridad, cuando llegó a la terminal… y en estos precisos momentos.

Rose vio como la gente se levantó de sus asientos y empezó a formarse según se lo indicaban, primero aquellos que eran de primera clase, y hasta… que llegó su turno de hacer fila. Nerviosamente tomó todas sus pertenencias, nunca descuidando su boleto de avión y su pasaporte, porque ya había tenido como cinco mini infartos por no encontrar sus documentos que tenía guardados en una bolsa de la maleta, o en su bolso.

Cuando llegó su turno, una mujer vestida bastante impecable le sonrió y le pidió con la voz más formal y amable su pasaporte y boleto. Ella se los tendió, a lo que la mujer simplemente escaneó y rompió la tira del boleto que se quedó y le devolvió su boleto a Rose.

—Que tenga un excelente viaje —Rose sonrió débilmente, y la mujer llamó al siguiente.

La pelirroja avanzó hacia adelante, siguiendo el camino que se abría ante ella, ahí mismo podía ver por las ventanas que era de noche, que seguramente estaba haciendo un frío de mil demonios y a los aviones que reposaban en espera de ser abordados por todo el pasaje.

Definitivamente ya no había vuelta atrás porque ya se encontraba casi con un pie dentro del avión. En la puerta había dos azafatas que daban la bienvenida a los pasajeros, ella se permitió un momento para suspirar hondamente como si eso le sirviera para darse valor, y caminó hasta que ambos de sus pies estuvieron firmemente plantados sobre el piso. Ambas mujeres le dieron la bienvenida y ella avanzó en busca de su asiento.

Cuando lo localizó, el de la ventanilla, colocó su maleta de mano en el compartimiento de arriba, se sentó, se colocó rápidamente el cinturón de seguridad y se quedó quieta. Observó como los demás pasajeros se instalaban en sus asientos designados, colocaban sus pertenencias en sus respectivos lugares, alguno que otro que le preguntaba algo a la azafata más próximos a ellos. Por lo pronto no había nadie sentado a un lado de ella, lo cual era bueno, porque no le agradaba para nada la idea de tener un compañero, aunque el vuelo durara una hora, y mucho menos si eran de los que se ponían a charlar por cualquier cosa.

A los minutos llegó una persona, una mujer de rasgo hindú, delgada y posiblemente de la misma edad que Rose, ésta la saludó por cortesía en lo que depositaba sus pertenencias en el compartimiento, luego de sentó y sacó su celular, ignorando a la pelirroja.

Y esperaba que así fuera por el resto del viaje.

De pronto sintió su celular vibrar varias veces, se disponía a ignorar lo que sea que fuera, sin embargo, los mensajes que estaba recibiendo eran demasiados que no le quedó de otra. Bueno, únicamente los leería y aprovecharía para apagar su celular.

Eran como ocho mensajes de la chica que la recogería y la llevaría hasta la residencia de su universidad. Decidió abrirlos porque seguramente eran importantes.

Daphne Zabini: "Hola Rose."

Daphne Zabini: "Espero que esté todo bien con tu vuelo."

Daphne Zabini: "¡Ya estoy ansiosa por conocerte en persona!"

Daphne Zabini: "Lamentablemente, algo ha ocurrido de improvisto y no podré ir por ti al aeropuerto."

Rose soltó un chillido y se llevó ambas manos al rostro, esta era la oportunidad perfectamente para echarse a llorar. Sus ojos comenzaron a cristalizarse y a picarle, amenazando con derramar las primeras lágrimas.

Daphne Zabini: "Lo que pasa es que mis padres llegaron a mi departamento y se van a quedar a festejar año nuevo. Y ahora mismo me es imposible ir por ti".

Daphne Zabini: "Pero tranquila, alguien más irá por ti".

Daphne Zabini: "Espero que no te importe si va mi novio por ti".

Daphne Zabini: "Me despido, seguramente tu vuelo ya está por despegar o ya lo hizo. Buen viaje".

Genial, lo único que le faltaba era eso, que la chica que tenía que ir por ella no pudiera y para hacer las cosas más incómodas mandara a su novio. Esperaba realmente que su novio supiera hablar inglés porque de otra forma no tendría cómo comunicarse, el francés no lo dominaba, por esa razón había decidido París como su destino de intercambio.

Cuando se disponía a contestarle una azafata se acercó y le pidió que apagara su celular porque estaban a punto de despegar. Rose antes de apagarlo se dio cuenta que Daphne estaba escribiendo un mensaje, pero nuevamente le pidieron que lo apagara, así que no pudo saber que más tenía que decirle aquella chica.


N/A: Este fic participa en el Reto #23: "Títulos navideños" del foro "Hogwarts a través de los años", el tema es AÑO NUEVO. Bueno, he decidido basarme un poco en una experiencia que tuve en mi verano del 2016, y eso me ha permitido hacer las cosas un poco más realistas como el vuelo, la terminal, la puerta de embarque, la llegada al aeropuerto de parís, y cómo llegar y en donde recogerían a Rose. Espero que sea de su agrado y estaré subiendo capítulos de 1000 palabras aproximadamente.

ESTE FIC SIN CONTAR CON LA NOTA DE AUTOR Y EL DISCLAIMER CONTIENE 1060 PALABRAS.