Hola los personajes aqui expuestos pertenec en a Rumiko Takahashi, este fic esta creado sin fines de lucro... espero que les guste es mi primera historia...
"..." los personajes hablan
(...) los personajes piensan
CAPITULO 1: SALIENDO ADELANTE
Era un día cualquiera, salía a correr como todos los días por las calles de Nerima, era una mañana fresca y soleada, la misma que hacia la rutina un poco más llevadera, pues el sol alumbraba de una manera especial haciendo brillar el rocío que aun seguía en los pétalos de las flores, era una visión particularmente encantadora, dados los recientes sucesos ver ese espectáculo radiante era una bendición.
No había pasado ni un mes desde la boda fallida con su idiota prometido, que una vez más se lució por su cobardía al no admitir que la amaba, más bien la humilló en todo el sentido de la palabra. Este hecho la destrozó por completo en su interior, su alma esta encogida y se sentía tan desprotegida y acabada moralmente hablando, pero por fuera ella mostraba una coraza que era impenetrable y se refugió como siempre en sus más fieles amigas: Las Artes Marciales, pues gracias a ellas siempre lograba desahogarse y sentirse aliviada aunque en esas circunstancias nadie lo estaría, y ella no era la excepción.
No le dirigía la palabra a menos que sea estrictamente necesario, todo estaba últimamente tan calmado que sus vecinos estaban realmente agradecidos por ese hecho, ya que los últimos dos años habían vivido con el sonido permanente de sus peleas, paredes rotas, personas volando por los aires, en fin un sin número de situaciones que para nada traían calma. Ella apenas estaba llegando a su casa después de su trote matutino, cuando Kasumi la llamo desde la cocina.
KASUMI: "Akane, ya está listo el desayuno, por favor puedes avisarle a Ranma para que no lleguen tarde a la escuela?", dijo con su siempre encantadora sonrisa.
AKANE: "Pero Kasumi….. Ohh, está bien no te preocupes ya voy a despertarlo.." y poniendo mala cara se fue hacia el cuarto de su prometido.
Tock, tock..
AKANE: "Ranma el desayuno está listo, levántate o llegaremos tarde a la escuela", y sin más salió de la habitación y se encerró en el baño para tomar una ducha rápida y luego fue hacia su cuarto a ponerse el uniforme.
Después del desayuno se ven a dos personajes muy conocidos corriendo por las calles sin cruzar palabra alguna, la razón por la que corren… muy sencillo, otra vez van retrasados porque el chico se volvió a quedar dormido. Era el cuento de todas las mañanas. Al medio día en la hora del receso, Akane estaba con sus amigas almorzando, hasta que una de ellas habló.
YUKA: "Ummm… esto esta delicioso, no parece que los preparaste tu Akane", dijo en un tono un tanto divertido al ver como se enfurecía un poco su amiga.
SAYURI: "No seas mala Yuka, Akane se ha esforzado mucho por aprender y pues le ha dado resultado… además todas sabemos lo obstinada que es en el asunto de ser la mejor y pues no podría ser para menos, tus galletas están riquísimas amiga…", probando otra de las galletas y sonriéndole a Akane.
AKANE: "gracias Sayu, además no hubiera podido hacerlo sin su ayuda, por cierto escuche que ustedes están tomando clases de baile, es eso cierto…?", pregunto con curiosidad.
SAYURI: "si amiga, y son geniales, son un ejercicio fantástico, además si quieres podrías venir con nosotras, creo que te gustará ya que a veces practicamos algo de aerobics por lo que podrías tomarlo como entrenamiento… anda di que si, Akane por favor siiiiii…", decía poniendo ojos de cachorrito para convencerla.
YUKA: "Además yo creo que sería muy bueno para ti probar otros ambientes a pesar de lo que sucedió… te servirá para salir adelante… no todo se centra solo en el GRAN RANMA SAOTOME cierto..?"
AKANE: "Pues sí, creo que tienen razón, mmmmm… entonces está decidido a tomar clases de baile…"
Ranma estaba observándola un poco alejado del lugar, por primera vez desde hace un mes la veía algo animada. Eso lo aliviaba ya que se sentía culpable al no poderle confesar su amor a Akane. Tampoco rompía ningún compromiso con las otras `supuestas prometidas autoproclamadas`, cosa que tampoco ayudaba a la situación, que desde que la boda fracasó se pasaban las tardes acosando a Ranma y provocando disputas entre ellas por su amor, en las cuales siempre se encontraba de por medio la pobre Akane.
Ella se alistaba todas las tardes para ir con Sayuri y Yuka a las clases de baile, siempre vestía unos shorts muy ajustados y una blusa de tirantes un poco suelta pero que dejaba ver bien sus curvas pues ya era casi una mujer adulta, con sus tenis y una chaqueta todo informal. Si es que estaba haciendo frio entonces se ponía unos pantaloncillos ajustados y lo demás de siempre, debido a que esta ropa era muy cómoda para este tipo de ejercicio. Su ánimo estaba cambiando mucho, ya casi ni veía a Ranma, cosa que agradecía rotundamente porque no era capaz de perdonarle lo que le había hecho, pero aun así en su corazón siempre lo tenía presente, por lo que ocasionalmente y sin que la vieran, la traicionaban las lagrimas y sin poder reprimirlas, se fundía en su llanto. Akane lo amaba, lo amaba con ansias, con locura, es que eso es lo que él había provocado con su testarudo temperamento, pero también con todas las cosas buenas, malas y maravillosas que vivieron juntos. Su mente quería no volverlo a ver, pero su corazón se negaba rotundamente a este hecho, porque si se concedía lo que su mente deseaba, el corazón simplemente dejaría de latir, así que solamente disfrutaba de su presencia cuando él se situaba en el tejado, le bastaba con eso pues sabia erróneamente que él no le correspondía.
Ranma por su lado, se había convertido en una persona muy callada, siempre pasaba entrenando y sumido en sus pensamientos, no podía comprender como pudo haber sido tan cobarde, él la amaba sobremanera y lo que menos quería era alejarse de ella, pero las circunstancias eran diferentes totalmente, él pensaba que ella no le correspondía por lo que no hacia ningún intento por avanzar en su relación, se sentía confuso, pero aun así continuo su vida aparentemente normal, con las típicas peleas con su padre por la comida pero desde el día de la boda no volvió a decirle ni un solo insulto mas a ella.
Había pasado ya un año, desde la casi boda, los jefes de la casa estaban definitivamente preocupados porque no sabían cómo juntar sus escuelas, era evidente para todos que esos dos se amaban, pero eran demasiado orgullosos para admitirlo, y mucho menos delante de otras personas. Pasaban días ideando nuevas bodas y acercamientos para la pareja, pero nunca llegaban a concretar absolutamente nada.
Después de este año un tanto extraño de calma, las cosas habían cambiado un poco, Kasumi estaba saliendo con el Doctor Tofu, que por el bien de sus pacientes ya no se alocaba al ver a su linda novia aparecer, ya que desde hacía algunos meses su relación era más fuerte y pues también porque Kasumi iba todos los días a ayudarle como su asistente, además dentro de poco Tofu pediría la mano de Kasumi en matrimonio y aunque este hecho lo tenía realmente nervioso, también llenaba de alegría su ser por lo que ponía más empeño en que su relación funcionara de la mejor manera posible. Ellos eran muy felices juntos se amaban muchísimo. Por otro lado Nabiki se había ido a la universidad de Osaka, a estudiar obviamente economía, y como quedaba un poco lejos de su casa pues se mudo para allá. Ella tenía un novio, no muy convencional, a decir verdad bastante único, quien mas, Kuno Tatewaki, que decidió dejarse envolver por el encanto de su diosa de hielo, como él la llamaba, ella lo amaba pero al mismo tiempo se aprovechaba un "poquito" de su millonario novio.
Por otra parte Ranma había entrenado muchísimo y aprendió nuevas técnicas, con lo que participo en diversos concursos los cuales por cierto ganó sin dificultad, se sentía feliz, realizado al ser el más fuerte y más joven artista marcal de toda la ciudad, y muy pronto de todo el país porque estaba inscrito en el torneo de artes marciales nacional. Estaba orgulloso de sí mismo, (más de lo acostumbrado) pero por otro lado se sentía vacio porque no había tenido mucho que ver con cierta chica de cabello azulado y ojos castaños penetrantes que lo traía loco, en todo lo que iba del año solo se habían hablado un par de veces y nada serio, por lo menos eso lo consolaba y le daba fuerzas para seguir adelante. Aunque si es de confesar, él observaba casi siempre como realizaba sus ejercicios al entrenar y por supuesto cuando estaba repasando sus clases de baile, pues lo traía totalmente embobado su sensual baile árabe y su excitante destreza al mover las caderas. Sin duda alguna fue la mejor idea que sus amigas tuvieron al invitar a Akane a participar de ese curso de baile. Bueno y el más beneficiado era él.
Akane, ella pasaba los días con su habitual rutina corriendo por la mañana, luego se iba a la escuela con Ranma, iba al dojo a practicar un rato y luego a clase de baile, por ultimo en la tarde y ya casi noche hacia sus tareas escolares igualmente con Ranma y después se colocaba un momento en su ventana a ver las estrellas sintiendo la presencia del pelinegro de trenza que siempre se posaba sobre su habitación en el techo. Ambos siempre estaban juntos aunque sin palabras, sin demostrarse gestos, solamente con sus presencias, este hecho hacia que los dos se complementasen tanto que deseaban romper esas paredes y prejuicios para amarse durante toda su vida, y si fuera posible, mucho más allá de la muerte……
El año aunque tranquilo, fue duro de asimilar para la pareja mas testaruda de la cuidad, había sido tan difícil contenerse al estar el uno junto al otro que, a veces nada importaba y se quedaban admirando como hipnotizados el uno al otro, hasta que algún inoportuno de la casa los interrumpía. (Todos en esa casa siempre han sido y serán inoportunos).
Un día, estando en la escuela, el director había anunciado que pronto seria su graduación por lo que había planteado hacer una última gira de "observación" por no decir paseo o vacaciones. El director había decidido que la famosa gira seria un crucero por el Caribe en un buque de lujo durante un mes y medio, así que los que decidían ir debían poner la mitad del diero porque la otra mitad la costeaba el colegio, o más bien dicho el director, ya que se jactaba de tener mucho dinero. Todos los alumnos del 3ero "F" estaban que brincaban de un lado a otro por tanta felicidad hasta que nuevamente habló el director:
DIRECTOR: "Pues bien mis queridos estudiantes, el viaje será dentro de tres días por lo que deben tener listo su equipaje, durante el crucero tendrán que tomar ciertas clases que es necesario que lleguen a dominar, entre ellas están historia del arte, turismo, natación, etiqueta, y otras que ya se me ocurrirán en el camino…. ", hizo un ademan como tos y continuo. "Estos cursos deberán ser aprobados si es que desean graduarse, y por supuesto la pareja que obtenga la mejor calificación obtendrá un premio especial. Al final del crucero, cada pareja presentará un informe detallado con todas las actividades realizadas y una propuesta para el siguiente paseo… perdón es decir para la siguiente gira..."
Con el pequeño discurso se dispuso a indicar cuales serian las parejas que deberían hacer el dichoso informe y pasar tooooodo el viaje juntos, ya que tenían que resolver muchos problemas y tomar cátedras para poder graduarse, era como una especie de concurso el cual ninguno estaría dispuesto a perder. Las primeras parejas fueron proclamadas hasta que…
DIRECTOR: "… y por último la señorita Tendo con Ranma Saotome…", luego de esto salió tocando su acostumbrada canción en su ukulele.
CONTINUARÁ...
Hola espero que les aya gustado el comienzo de la historia, por favor dejenme saber sus comentarios para ver que les gusto... pronto subire el proximo capitulo...
Besos
Jacquesita...
