Pues aquí Naru después de un mes con un nuevo oneshot, drabble, o como queráis llamarlo. Pero en vez de simplemente dejarla, antes quiero hacer un apunte necesario:
De verdad, gracias por los reviews que me dejáis en mis relatos. Pocas veces los contesto, pero es que simplemente no sé qué decir, por eso aprovecho para agradecéroslo desde aquí 3 Me pone muy contenta que os gusten ^^
Oh y, si alguien quiere que le haga un fic en especial puede pedírmelo, e intentaré hacer lo mejor que pueda~ Eso sí, abstenerse de cosas smut explícitas porque no las domino todavía, i'm sorry.
Yo creo que la mayor prueba de amor y confianza, no es follar sin condón como dice McCormick, o pedirle matrimonio según el capullo de Marsh. Señores, la mayor prueba de amor, lo que tienes que hacer para demostrarle a tu pareja que la quieres, es permanecer a su lado cuando se enferma. Así de "sencillo".
Cuando una persona se enferma jode más a las personas que le rodean que a ella misma, y esto es así. Claro, tiene que aguantar el mal estar y los dolores, pero ¿quién le concede los caprichos y hace todo lo posible para que descanse y se recupere más rápido? Las personas ajenas, ya sean los padres, los hermanos, o los novios o novias.
Este último caso sería el mío.
Por suerte Tweek no suele enfermarse, pero creedme que cuando lo hace… no es plato de buen gusto. Es como un virus andante, haciendo quejidos a cada paso, sonándose los mocos cada dos minutos, tosiendo como un perro vagabundo… Vamos, siendo todo lo anti-sexy que un ser humano es capaz de ser. Y aun así permanezco a su lado hasta que se mejore, atendiéndole, cuidándole, mimándole y demás, en vez de encerrarle en la habitación como si fuera un leproso. O mandarle a casa de sus padres. O irme a casa de un amigo hasta que se recupere.
Y esto lo digo porque es lo que yo pensé en hacer en un principio, pero no creo que Tweek se lo tomara demasiado bien.
El caso es que, bueno, yo ya sabía que le quería (el que estemos viviendo juntos y llevemos de novios cinco años es más que prueba de ello), pero no sabía cuánto le quería. Y os aseguro que gracias a esto me he dado cuenta de que es más de lo que creía.
Intentaré explicarme un poco mejor.
Imaginaos a vuestra pareja toda despeinada (en el caso de Tweek no hay mucha diferencia, pero da igual), con unas zapatillas con estampado de vaca, un pijama verde con estrellas lilas, y por si fuera poco, con una de esas batas rosas que llevan las madres cuando se acaban de levantar para hacerte el desayuno. Por si este atentado al estilo no fuera suficiente, añadidle que ya que está resfriado tiene la nariz roja como la de un payaso, y que encima no para de moquear, llenando tanto su mesilla de noche como la tuya de pañuelos llenos de mocos
Resumiendo: lo más anti-erótico que puedas imaginar.
Y ahí está la clave de demostrarle a tu pareja (o darte tú mismo cuenta) de que la quieres más que a nada. Si te quedas a su lado a pesar de todo eso, si le cuidas y le achuchas aunque te estornude encima y te moquee toda la camiseta, si no le encierras en el sótano y tiras la llave para no tener que escuchar sus quejas, entonces es amor verdadero.
Lo que yo siento por Tweek, lo es.