TABÚ

Escrito por Subaru Shojo (story id: 1302292)

Traducido por Natalia (anna-chan)

Tabú [2. Adj.]

1: prohibición contra tocar, decir, o hacer algo por miedo a un daño inmediato de una forma supernatural.
2: prohibición impuesta por costumbres sociales o como una medida protectiva.

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Capítulo 1: No es que te amo.

"¡Naa-chan!" Una pequeña cabeza marrón esta buscando desesperadamente a una rubia. Una rubia llorando, en realidad, la había perdido en la neblina de la lluvia y la misma estaba muy densa para buscar a alguien.

Se mordió el labio mientras no sentía ninguna alma, era toda su culpa. Fue su culpa el hacerla llorar y perderla en la mitad de la lluvia.

Continuó su búsqueda en la residencia de los Asakura. Y maldijo a la casa por ser tan grande, corrió atravesando los jardines hasta que finalmente localizó un ki diminuto, su ki.

Miró hacia arriba, empapado, sonriendo nerviosamente a la pequeña sombra en las enormes ramas del noble hamacando sus pies en un ritmo monótono. Ella lo había visto.

Extendió su mano y dejó que la lluvia continuara cayendo sobre sus aliviados gestos congelando su brazo hasta dejarlo casi en un estado crítico. Su sonrisa nunca dejo su rostro, esperando que ella bajara con él así su tortura con Yomhei no sería tan dolorosa.

La pequeña niña miró al sonriente chico; sus mejillas hinchadas engañaban la fría y ruda mirada que le estaba dando. No dejaría que él la vea llorar. ¡Anna Kouyama no era una bebe llorona!

Estaba tratando tan duramente ser una itako y él no estaba intentando nada para ser un shaman, sin embargo, cada vez que Yomhei-sama le dejaba una tarea la hacía sin esfuerzo alguno.

Ella lo odiaba, por ser haragán y no tomarse las cosas seriamente. El entrenamiento de Yomhei-sama no era una 'perdia de tiempo' como él había dicho, ¡era un honor tener un entrenamiento como ese!

A parte de sus miradas asesinas y su silencio cortante, sin notar bajó del árbol, sin aceptar las mano del chico, caminó dejándolo atrás ahogándose en orgullo.

"Ne naa-chan, ¿daijabou ka?" Le preguntó tímidamente corriéndola para alcanzarla.

"Mi nombre es Anna, no naa-chan." Le dijo con severidad. El chico se rascó la parte de atrás de su cabeza riendo avergonzado.

"¡Gomen ne! ¡Anna-chan!" Dijo con su típica actitud 'ser feliz a pesar de todo'. "Ojii-san estaba preocupado por vos, ¿dónde has estado?"

"Estoy bien ahora. No tenía porque preocuparse." El chico se estaba acostumbrando a la actitud de hielo de la chica. Era como una rutina ahora. Asintió con la cabeza y se cruzó de brazos por detrás.

"Tamao-chan va a hacer la cena; ¿quieres que le diga que te haga algo? Yo le pedí que me preparara un rico gohan." Sonrió nuevamente; ello lo podía ver desde la esquina de su ojo.

¿Era esa sonrisa algo que Yoh y Tamao disfrutaban hacer? ¿Disfrutaban atormentándola? ¿Qué eran capaces de sonreír cuando ella no podía?

Yoh no era estúpido, podía decir que Anna se estaba enojando con él de nuevo. Podía saberlo por la manera en que sus ojos onix se ponían borrosos y su delgada mandíbula se doblaba en agonía.

"Anna-chan, deberías tomarte las cosas más a la ligera, eres muy joven para arruinarte la vida tan temprano." Reprimió otra risita.

Y eso fue todo, ni bien abrió sus ojos, ella había desaparecido. Su aura no estaba en un dorado brillante sino un profundo azul marino.

Se encogió de hombros y mordió su mabio nuevamente; esta iba ser una larga noche lluviosa.

'¡Como se atreve! ¿Quién era él para decirle como debía vivir su vida?' No podia decir si fue una lágrima o una gota de lluvia lo que se deslizaba por su mejilla. La barrió con la mano y se tragó el molesto sentimiento en su estomago que la hizo llorar.

Odiaba llorar, se sentía vulnerable y débil. Odiaba ser débil y desgarrada por ese niñito llamado Yoh.

No era la primera vez que la hacía llorar con sus directas oraciones, en todas las ocasiones había una fuerte lluvia cubriendo, como un confidente, sus lágrimas y sollozos.

Aunque, ¿qué pasa si las cosas que dijo fueran ciertas? ¿Y por eso dolía tanto? ¿Qué pasa si un joven niño podía espiar en la profundidad de su frágil alma? ¿Y si notarlo, el pequeño 'futuro shaman' la estaba hacienda sentir?

Pero… sentir… ¿qué?

¿Amor? Ella lo dudaba… lo odiaba, ¿no?

'¡Hai!' su cabeza gritó, sus puños se apretaron y luego sintió a alguien detrás suyo. Era él.

No necesitaba darse la vuelta; Anna probablemente sentiría su mano alcanzándola para acariciar su hombro. Sus dedos estaban a pocos centímetros, y cuando el primer dedo tocó su dolida piel, la pequeña itako se alejó y se dio la vuelta para mirarlo.  y might feel his hand reaching up to stroke her bare shoulder.

Estaba sorprendido; su calmada actitud fue borrada por la mirada asesina que ella le estaba dando en ese momento. Hubo muchas veces en que ella lo había mirado fijamente. Pero nunac de esa manera.

Esa fue la primera vez en que él sentía miedo… de ella.

Podía sentir el miedo que le estaba nublando los sentidos y sonrió por dentro. De ahora en adelante, sería la valiente itako, jamás dejaría que él se le acercara de ninguna manera, él era poderoso y peligroso.

Lo suficientemente poderoso como para romperla.

Con una descuidada caricia, el pequeño shaman podía quemar su piel en infierno y nublar todo su equilibrio. Podía romperla en menos de un Segundo, y su mirado lo estaba hacienda tan vulnerable, tan miedoso, que en realidad eso la hacía feliz.

"Anna-chan, ¿daijabou? Estás… ¡estás sonriendo!" Al principio sus palabras se resbalaron nerviosamente, pero después de verla sonreír su normal actitud regreso.

The chibi sonrisa de la itako desapareció sin dejar rastro alguno.

"Volvamos a casa, ¿ne?" le ofreció una mano y le sonrió de oreja a oreja tiernamente. Recordando su promesa de no tocarlo o acercársele, Anna hizo lo mejor que pudo, lo ignoró.

Yoh dio un respiro de alivio y caminó tras ella, sin acercársele demasiado. La chica Kyouyama era a veces espeluznante.

Entre la fuerte lluvia, escuchó algunos estornudos ahogados provenientes de la itako de hielo. El chico Asakura no estaba preocupado; ella era tan fuerte que no se iba rendir en una gripe.

A veces sentía ser tan débil cerca de ella, tan pequeño… incluso se atrevería a decir que a veces la admiraba cuando hacía los rituales de purificación sin resfriarse.

"¡¿Dónde demonios estabas?! ¡Kino-san y yo te estábamos esperando!" Yoh tragó saliva mientras un malhumorado Yomhei salía de la puerta y empezaba a gritarles. Ambos niños se inclinaron silenciosamente y entraron a la casa.

"¡Ahora levántense y tómense un baño caliente! Debemos hablar de algo importante." La última oración era algo sospechosa y seria, Yoh se estaba preguntando por qué Kino-sama estaba sonriéndole maliciosamente a Ojii-san, se estaba poniendo macabro.

Otro estornudo interrumpió los pensamientos de Yoh. Anna no pudo esconder ese e Yoh comenzó a mirarla cautelosamente. La pequeña itako no podía pescar un resfriado por una simple lluvia, ¿o si?

Estaba deseando preguntar, pero no era lo suficientemente valiente para recibir otra fría respuesta de 'estoy bien'. Luego su vista fue bloqueada por una niña de cabeza rosada.

"¡Tamao-chan! ¿O genki desu ka?" Le sonrió brillantemente y ella hizo exactamente lo mismo con algo de sonrojo sobre sus pequeñas mejillas. Anna los miró, los odiaba, a los dos por igual.

"¡Totemo genki desu! ¡Kino-sama me ayudo con tu cena! ¡Espero que te guste!" La brillante sonrisa de Tamao se elevo aún más. Anna podía sentir sus labios moverse, imitando la felicidad de la chica.

~*~

¿Estaba celosa o qué? ¡Claro que no! Ella iba ser la perfecta itako que no sentiría nada por nadie. Recordó su promesa; el amor no merecía estar en el alma de una itako.

Se estaba sintiendo cansada mientras su cuerpo se hundía en el tubo de agua caliente, el tranquilo vapor llenando las ventanas de su nariz, relajandola completamente, olvidando el mundo real.

~*~

"¡Un! ¡Pero primero tomaré un baño! ¡Estoy empapado!" Sonrió e hizo una reverencia para dejarla. Tamao se inclinó como respuesta.

"¡No te preocupes Yoh-sama! ¡Yomhei-sama me dijo que preparo tu baño!" Luego se perdió de vista cuando bajo las escaleras.

Después de haberla visto irse, regresó su atención a su húmedo ser, y giro el picaporte dándose cuenta que estaba cerrado.

Intentó nuevamente y nada. Frunció el ceño y recordó que cuando Ojii-san trató de entrar al cuarto de Kino giro el picaporte en la dirección contraria, lo empujó y luego lo tironeó.

¡CLICK!

Yoh sonrió de oreja a oreja triunfantemente; talvez Ojii-san no era tan mal sensei después de todo. Aunque nunca pensó mirar el baño, su sonrisa desapareció al ver a la aprendiz de itako acostaba en el tubo con una pequeña toalla sobre su frente.

No podia ver nada mas que su cabeza, el agua estaba hirviendo y todo el vapour bloqueaba la vista de su cuerpo. Bueno, en ese momento no había 'desarrolldo' nada, era tan solo una niña.

Una niña interesante…

Ella se sonrojó atractivamente mientras sus gruesas pestañas rozaban sus mejillas, su respirar era un poco rápido y hebras de pelo estaba cayendo sobre su rostro dándole un marco más pequeño.

Era una Hermosa imagen. Sin notar su trance, la acostada itako abrió sus ojos sintiendo algo en el baño. Se paró y vio a un Yoh en trance.

'¡Oh Kami-sama! ¡Estoy tan muerto!' Tragó saliva. Las cejas de Anna comenzaron a moverse malvadamente y no estaba riendo.

'¡Corre! ¡Corre! ¡Corre!' A pesar de todo su cuerpo estaba congelado, ¡no se podía mover! Después de eso, miles de cosas para el baño fueron lanzadas hacia él.

Tirandolo fuera del baño, una furiosa Anna salió de la tina envolviendo una toalla a su alrededor. Cerró la puerta después de su ultimo golpe, el patito favorito de Yoh para el baño.

¡SQUISHU!

"¿Tu que piensas? De verdad me odia, ¿ne?

¡SQUISHU!

"Si, lo se. Pero no fue mi culpa."

¡SQUISHU!

"¡De verdad! ¡Creí que el baño que Tamao-chan me preparó estaba en ESE baño!"

¡SQUISHU!

"¡No sabía que tenía esa fuerza!"

¡SQUISHU!

"Si, se que también te lastimo a ti. Lo siento."

¡PLACK!

Ahora una gran y gorda herida estaba en su cabeza, el canastito del baño fue lanzado contra él después de su conversación con el pato del baño.

"¿Dónde aprendió a pegar de esa manera?" Se masajeó su moretón.

¡SQUISHU! ¡SQUISHU!

"¡Oh cállate!"

Fin del Capítulo 1

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Notas de la Traductora:

Este fic me pareció muy bueno, por lo que decidí traducirlo para que todos puedan apreciarlo. Su largo es de tres capítulos, eso quiere decir que quedan dos capítulos más por traducir.

Los dos primeros capítulos transcurren en la infancia de Yoh y Anna, mientras que el tercero es de la época actual.

Espero que les guste tanto como a mí.

Cambiando el tema, o de fic, quería agradecer a todos los que siguieron la historia Desafiando las Leyes del Corazón y pedirles perdón a quienes decepcioné con el final que le di. Agradezco de todo corazón a Hidrazaina que me insulto a Yoh, a bla que dice se le hizo muy triste para Yoh y Anna, a Kanashimi Hikaru que le ruego no se corte las venas, a Anna Asakura que me aconseja conseguirme nuevos asistentes, Karuru Metallium que no le convence el largo del fic, a ShadoWolf que le pido perdón por dejarlo colgado la otra vez en el MSN, y a Bratty que aún tiene firme en la cabeza la idea de matarme y de una forma u otra dice que me pasé con el YohxTamao, yo también lo creo, y me sigue metiendo en la cabeza ideas deliciosas y excitantes que no me dejan pegar ni un ojo por las noches…