PLAYA LUNA NUEVA

Día 1 Viernes 21 de Septiembre

Siguiendo el viaje, para variar…estoy cansada, me duelen los pies. Pero cada día estoy más convencida de lo que hice. Lily está peor que yo, le dije que no lo iba a soportar, pero así son las mejores amigas! En fin.

Hoy llegamos a este lugar, "Playa Luna Nueva", parece un lugar muy turístico, hay mucha gente…capaz que tiene algo que ver que hoy sea el día de la primavera, no? Que puntería…me quiero escapar de la gente, y llegamos a un sitio así, donde todos escuchan música fuerte y pasan a cada rato las canciones que no quiero escuchar. Las voces que me hacen mal, por el simple motivo de que ya no las escucho diariamente hablándome a mí.

Me siento mal. Sigo escribiendo a la noche.

---

El día empezó mal, pero…por Dios que mejoró!!! Estábamos con Lily sentadas en un banco en la plaza, y pasó un chico que me resultó vagamente familiar, rubio, ojos celestes…si digo "perfecto" me crees? (le estoy pidiendo opinión a un cuaderno??). Él se nos acercó y nos empezó a hablar, porque dijo que le pareció raro que tengamos una mochila tan grande para un fin de semana.

-No…en realidad somos mochileras. Paramos acá porque nos gustó el lugar, pero en unos días seguimos viaje-le contestó mi querida amiga.

-Ah! Ahora entiendo-comentó sonriendo-. Soy Lucas, ustedes tienen nombre o se les perdió en el camino?

-Yo soy Lily.

-Melisa.

-Un gusto.

Así, pasamos toda la tarde conversando con ese chico. Caminamos por la playa, nos compró un helado y nos sentamos nuevamente en la plaza, para ver como pasaba la gente, tan despreocupada, tan primaveral.

-Y…si son mochileras, donde duermen? Disculpen que les pregunte tanto, es que no sé como es vivir así.

-No hay problema-le dije-. Dormimos en donde sea; bancos de plaza, en alguna escalera de edificio, en la puerta de donde nos dejen…

-Y ahora dónde van a parar?

-Ni idea-dijo Lily

-No se lo tomen a mal…pero si quieren, mi departamento es suficientemente grande como para los tres…tengo dos habitaciones!-aclaró.

La miré a Lily y sin hablar entendimos que podíamos confiar en ese chico. Ella tiene ese don; saber como son las personas con solo mirarla a los ojos. Entonces, si ella le había dado el visto bueno, y yo no tenía inconveniente…como decirle que no? 

-Bueno, muchas gracias! Tenemos algo de plata, nos sentiríamos mal si no nos dejaras comprar la comida a nosotras-dije mirándolo fijamente.

-Ya sabía que me ibas a decir algo así-sonrió. Una tarde y ya me conocía tanto?-. Yo había quedado con un amigo que nos juntábamos a comer pizzas hoy. Él trae las cosas, no se preocupen por nada. Vamos yendo? Es un poco tarde y van a enfermarse.

Efectivamente, lo único que teníamos de abrigo era una campera algo gastada, ya que la usamos siempre que refresca.

Nos guió hasta su departamento. Era realmente hermoso. Grande, cálido, lindo, iluminado, como él. Basta Melisa!. Un lugar maravilloso, y más para nosotras dos, que hace más de un año que no dormimos bajo techo. Y las camas? Creo que no me levantaría nunca de estos colchones.

Sigo. Después de explicarnos donde estaba cada cosa, y de repetirnos incontables veces que nos sintamos como en nuestra casa, sonó el timbre. Lucas le dijo a Lily que atendiera y preguntara quien era. Ella le dijo que era de la rotisería.

-Jaja, le voy a abrir a Zac y vengo, si? Siéntanse como en su casa-otra vez.

Cuando nos quedamos solas, Lilian me preguntó como era posible que nos estuviera pasando esto.

-Es increíble Meli…! Admitilo!-gritó emocionada.

-Si, no sé. Hay algo que no me cierra…porque tiene esta casa tan linda?

-Vos y tu desconfianza. El chico es bueno, yo lo siento. No te preocupes y disfrutemos esto…a propósito, cuando nos vamos?

Yo no me iría nunca, amiga. Nunca.

-Te parece el lunes?

Pero en eso, se escuchó la llave en la cerradura y tuvimos que posponer nuestra charla. A decir verdad, todavía no decidimos nada, porque mi compañera no me dejó hablar desde que Lucas volvió con su amigo Zac. Un chico lindo, alto, castaño, ojos que matarían a cualquiera…si no fuera porque Lucas estaba al lado, opacándolo, yo también habría caído ante su belleza. Nuevamente esa sensación de conocerlo desde antes…pero, de dónde?. Con respecto a Lily…Está insoportable.

-Melisa, Lilian…él es Zac E…-pero se interrumpió-. Zac. Ellas son dos amigas…las conocí hoy en la plaza, se quedan con nosotros hoy. Tenés algún problema?

-Para nada Lu-dijo mirándola a mi amiga.

Con ella nos encargamos de poner la mesa, de ir a comprar las bebidas (que los chicos no nos dejaron pagar) y cuando nos sentamos a comer, hablamos. Pero que manera de hablar! Como si nos conociéramos desde siempre. Miramos una película y ellos nos preguntaron desde cuando no veíamos televisión, o películas.

-A decir verdad…-traté de sacar la cuenta-. Hará un año y medio, no Li?

-Si. Desde que salimos de Los…-la interrumpí con una patada por debajo de la mesa. Está loca si piensa decir de donde venimos.

No es porque no quiera contárselo. Creo que confío en estas dos personas nuevas que conocí hoy, pero no era el momento. Por ahora no es el momento.

Los varones sonrieron, se miraron y siguieron hablando de otra cosa. Me parece que no soy la única que esconde algo.

Zac decidió quedarse a dormir en el depto, nos acostamos alrededor de las 3:00am. Van a ser las 4:00am, y estoy acostada soportando los empujones de Lilian. Pero vale la pena, y quería contar como había sido nuestro día, para variar.

Haciendo un balance, las cosas malas pasaron a un tercer plano, totalmente. Pero eso no quita que no piense en ellos, que no los extrañe, que no los necesite.

Mañana los chicos nos prometieron llevarnos a conocer el faro de la ciudad. Ya es sábado…supongo que nos vamos a quedar otra vez con ellos, y me gusta mucho la idea. Son tan buena gente como parecen? Espero que sí 

Buenas noches.