Disclaimer: Los personajes y todo este maravilloso mundo pertenecen a la Señora Rubia que tanto amamos, J.K Rowling, yo solo jugué un poco con los personajes.
Suspire con fuerza y cerré los ojos, el puño me golpeo con fuerza y yo no intente detenerlo. Los gritos de ella no se hicieron esperar y por miedo a que el le pudiera hacer algo empuje a mi amigo y me puse delante de ella, protegiéndola.
El apretó sus puños con fuerza, sus ojos mostraban furia, decepción, tristeza profunda. Lo mire directamente tratando de pedirle perdón. La amaba, la amaba con toda mi alma y mi corazón. Ella puso sus delicadas manos y apoyo su frente en mi espalda, sabia que estaba llorando porque en algún momento sentí humedecer mi camisa.
— ¿Por qué?— Mascullo conteniéndose, su cara estaba roja y su ceño fruncido.
—La amo. Siempre lo he hecho. — Susurre suavemente, deje de sentir su cuerpo pegado al mío para sentirla a mi lado, cogí su mano automáticamente.
—Yo también lo amo. — Dijo firmemente. Y apretó mi mano.
El miro nuestras manos entrelazadas y gruño, se agarro el cabello y luego suspiro mirando al suelo.
—Siempre supe que esto pasaría, todos lo sabían… Pero yo, yo quería creer que no. Ustedes siempre tuvieron esa conexión que yo anhelaba he intente mantenerte conmigo. —La miro con los ojos llenos de lágrimas y luego me miro a mí. — Pensé que nunca me harías esto.
—Lo siento, Ron de verdad lo siento. — Trate desesperadamente de disculparme pero el hizo una mueca y yo me calle.
—Ya todo esta hecho. — Camino hasta la puerta de la habitación que compartimos, en la torre de Gryffindor, agarro la manilla y sin mirarnos pronuncio. — Por todo el aprecio que les tengo a los dos, no me hablen. Yo, yo les diré cuando sea el momento.
Salió. Mire a Hermione, lágrimas bajaban por sus mejillas; con mi mano libre pase el pulgar tratando de limpiar esa gotita salada. La mire tratando de disculparme también. Ella medio sonrió. Ron y Hermione no tenían nada, pero yo bien sabia que a el le gustaba ella, él le confeso su amor hacía ya seis días… Lo que él no sabía era que Herms y yo estábamos juntos, en secreto desde mucho antes. Tratamos de decírselo pero no se daba el momento, lamentablemente una puerta sin asegurar fue la que nos delato mientras disfrutábamos de un cálido beso.
La abrace con fuerza, no quería perder a mi mejor amigo, ni mucho menos dañarlo pero tampoco renunciaría al amor de mi vida. Ella me abrazo con la misma intensidad para después de un rato levantar su rostro haciendo que yo también la mirara.
—El entenderá. —Declaro suavemente.
—Eso espero. — Suspire.
— ¿Te arrepientes?— Me miro con miedo en sus ojitos mieles.
—Nunca lo haría Herms, se que no fue de la mejor forma pero algún día se enteraría. — Le sonreí y toma sus rostro en mis manos rompiendo el abraso. — Te amo Hermione Granger.
—Te amo Harry Potter. — Me sonrió y sin poderme contener uní nuestros labios en un beso tierno, lleno de amor. Porque yo la amaba, por encima de todo y de todos.
Es corto lo se y tal ves no se expresen los sentimientos de Harry tanto como yo quería pero había estado imaginando esta escena desde hace mucho tiempo y solo quería plasmarla.