Un mismo destino
Declaración: los personajes de esta historia no me pertenecen, le pertenecen a Kishimoto, solo los tome para mis ideas bizarras jijiji
-dialogos-
"pensamientos"
Capitulo 1 Búsqueda
Era una noche de luna llena en la ciudad de Tokio. En la sima de un edificio podía observarse la figura de dos sujetos que vestían con capas negras largas hasta los talones y con unos gorros que les cubría el rostro, por lo que no se podía distinguir la figura de ninguno de los dos. El viento soplaba provocando que las capas se mecieran.
Sujeto 1: Así que la hora a llegado, el poder del portador pronto despertara.
Sujeto 2: Así es, es por ello que lo encomiendo a tu cuidado – contestaba con vos fría y seria – debes entrenarlo y cuidarlo, hasta que logre controlar sus poderes.
Sujeto 1: Cumpliré con sus órdenes.
Sujeto 2: Bien, volveré cuando todo esté listo – finalizado la frase desaparecía entre las sobras.
Sujeto 1: Vamos, hay trabajo que hacer –una figura aparecía detrás de él. Arrojándose del edifico hacia el vacio.
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El sol se dejaba ver por las colinas, iluminado los techos de las casas y escabulléndose dentro de los hogares atreves de las ventanas, dándole de lleno en la cara de cierto rubio que ya hacia recostado plácidamente en su cama.
-Demonios ya amaneció- se quejaba un chico alto de cabello rubio y ojos azules, con una piel bronceado y unas curiosas marquitas en sus mejillas – quiero dormir un rato mas – dando media vuelta para que el sol no siguiera molestándolo – un momento qué hora es – dirigiendo rápidamente su vista al pequeño reloj que tenía en su buro – maldición es tardísimo, voy a llegar tarde.
Se Lévano como bólido de la cama, se dirigió directo a la regadera, se vistió y salió disparado a la calle, rogándole a kami por que pudiera llegar a tiempo.
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- Bueno chicos hoy empezaremos la clase con... – el profesor fue interrumpido por la puerta que en ese momento se habría – valla señor Uzumaki de nuevo llega tarde – decía en tono molesto el profesor, al ver llegar a un joven rubio sumamente agitado por la carrera que había emprendido para poder llegar a su clase.
- Lo….lo siento….puedo pasar – preguntaba jadeando el rubio, depuse de semejante carrera.
- Adelante estábamos a punto de comenzar –indicándole que tomará asiento lo más pronto posible.
- Si, gracias – respondía el chico ya un poco más calmado, dirigiéndose rápidamente a su asiento.
- Valla Naruto, no me digas que otra vez te quedaste dormido – se burlaba de él un chico de cabello rojizo y ojos verdes – pareces un niño.
- Cállate Gara – le contestaba sumamente molesto el rubio – mi despertador no sonó.
- mph si no olvidaras programarlo, no te pasaría – se escucho la voz fría de un chico de de ojos y cabello color negro.
-Tú también te vas a burlar Sasuke-teme – le contesta sumamente molesto el rubio y dedicándole una mirada llena de odio al azabache.
- Valla señor Uzumaki, además de llegar tarde se da el lujo de ponerse a platicar – lo reprendía el profesor sumamente molesto por la interrupción – tal parece que desea que le deje algún trabajo extra como castigo.
- NOOOOOO – gritaba sumamente nervioso el rubio – lo siento, no volverá a pasar – decía sumamente preocupado el rubio.
- Muy bien, continuamos - prosiguió con la clase el profesor.
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- Al fin tenemos una hora libre – decía feliz un rubio estirándose después de cuatro horas de clases sobre derecho y leyes.
Uzumaki Narutoes un chico de 20 años de edad, estudia en la universidad de Tokio la carrera de derecho, ya que quería volverse un famoso abogado, defensor de los derechos de las personas.
- Las clases el profesor Azuma sí que son agotadoras – decía el peli rojo amigo del rubio.
- Así es, además de que deja un montón de tarea y ni se diga de sus exámenes, son terribles – se quejaba el rubio- debería haber una ley en contra de esos exámenes.
- No sufrirías tanto si estudiaras mas – le reprochaba su azabache amigo en voz baja, pero que el rubio logro escuchar.
- Que dijiste – estaba a punto de lanzársele enzima al azabache.
- Vamos chicos no peleen – intentaba tranquilizarlos el peli rojo – porque mejor no planeamos que hacer al salir de la escuela – comenta el peli rojo para distraerlos.
- Que les parece si vamos al nuevo centro comercial que acaban de inaugurar, dicen que hay una tienda que tiene lo más reciente en videojuegos y consolas – comentaba un enérgico e ilusionado rubio con estrellitas que salían de sus ojos.
- mph –
- Pues parece que ya esta decidió – comentaba el peli rojo
- Pero ahora vamos a comer que no desayune y tengo mucha hambre – decía el rubio sobándose el estomago.
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Una vez finalizadas las clases, los chicos se dirigían al centro comercial, estaban a puto de subirse en el auto del azabache, cuando el rubio vio a alguien.
- Esperen, en un momento vuelvo – y sin más el rubio echo a correr.
Al ver hacia donde se dirigía el rubio el azabache izo una mueca y se introdujo al auto, el peli rojo sonrió y también se introdujo en l auto.
- Se nota que a Naruto le gusta que lo rehacen a cada rato – comentaba el peli rojo – jamás entenderá que esa chica no es para él – sonreía para sí mismo.
- Ya sabes que es muy terco – le contestaba el azabache.
En la entrada de la escuela, el rubio se acercaba a una chica peli rosa y de ojos verdes, que iba acompañada de una rubia de ojos azules.
- Hola Sakura- chan como estas - saludaba muy feliz el rubio a una la peli rosa, que al verlo cambio a una cara de molestia y desagrado.
- Que quieres Naruto, no estoy de humor – contestaba sumamente fastidiada la peli rosa.
- Bueno iba rumbo al nuevo centro comercial, ese que acaban de inaugurar, y pus, quería saber si te gustara ir con migo y lo…
- No me interesa ir contigo a ningún lado, ya te he dicho hasta el cansancio que no me interesas y que me dejes en paz – y sin dejarlo terminar de hablar se alejo de él, dejando a un muy triste rubio atrás.
Ya en el auto con sus amigos.
- Solo a ti se te ocurre ir a invitarla - le reprochaba el peli rojo – si ya sabes que se iba a negar, no sé que le vez a esa pesada, engreída, que se cree lo mejor solo por estar estudiando medicina y creerse la mejo cirujano del mundo, habiendo tantas chicas lindas por ahí, tu vas y te fijas en esa fea y plana amargada.
Naruto estaba con la cabeza agachada y sumamente triste por la forma en la que lo avía tratado Sakura.
- Vámonos de una vez – decía Sasuke arrancando el auto y lleno rumbo al centro comercial.
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- Sugoi, sí que es enorme este lugar – comentaba Naruto ya recuperado del altercad sufrido minutos antes - me pregunto si tendrán el nuevo videojuego "los zombis contraatacan" (N/A: lo sé pésimo nombre para un videojuego ¬¬) dicen que es aun más sangriento que el anterior – y sin más se introdujo velozmente en el local.
- Yo voy a hacer unas compras, los veo al rato – Gara se dirigió rumbo a una librería y se perdió dentro de ella.
- Bien yo veré que el baka no rompa nada – la verdad Sasuke también quería probar alguno de los juegos, pero jamás lo admitiría y sin más se introdujo en el local, perdiéndose entre la multitud.
Naruto estaba sumamente entretenido matando zombis, que no se percato de la hora que era. Entonces una señal le indico que el juego termino.
- Demonios ya no tengo cambio – buscaba desesperadamente dentro de sus pantalones, pero un destello lo izo boletar y en el piso vio una moneda tirada – jejeje hoy es mi día de suerte – después de levantar la moneda e incorporarse, miro hacia el gran ventanal que daba justo hacia fuera del establecimiento, y entonces vio pasar a una mujer delgada de cabello negro que por las luces de la plaza pudo observar unos destellos azulados en el, este le llegaba casi a la cadera, su piel era blanca, como si el sol jamás la hubiera tocado, tenía un cuerpo bastante deseable, un busto prominente, una estrecha cintura y unas amplias caderas que se movían armónicamente. Vestía un pantalones de mezclilla azul claro que se amoldaba perfectamente a sus bien toreas piernas, una blusa blanca sin mangas que rodeaban su cuello, dejando al descubierto sus hombros y parte de la espalda y una zapatillas de tacón del mismo color que la blusa. Fijo su vista en su rostro, unos labios carnosos y rosados muy deseables, un nariz pequeña, pero lo que más le llamo la atención de la joven, fueron esos extraños pero muy hermosos ojos color pera," si un rostro angelical, el más bello que allá visto en toda mi vida".
-O ye baka, ya es tarde hay que irnos – le decía Sasuke sacándolo de su ensoñación, mientras se acercaba a él – me oíste – le repetía al no ver respuesta de su amigo rubio.
- Eh – volteaba a ve a su amigo – si, ya voy – regresando su vista al cristal, pero la joven ya no estaba, salió corriendo del establecimiento para ver si lograba verla afuera, pero grande fue su decepción al no encontrarla, "habrá sido mi imaginación".
- A quien buscas – lo miraba interrogante Sasuke.
- A…a nadie –decía un tanto deprimido el rubio – y Gara – pregunto al no verlo cerca.
- Nos está esperando en el auto, vamos.
Ya en el estacionamiento vieron a Gara recargado contra el auto, una vez rehuidos se metieron en el auto y se marcharon del lugar. Mientras tanto la figura de una persona parada sobre el centro comercial veía como los chicos se retiraban del lugar.
- Al fin te encontré – decía la misteriosa figura, mientras la noche caía sobre la ciudad
Continuara….
Yu ju aquí estoy con una nueva historia, ya se ya se como una nueva si todavía no termino la otra, pero no se preocupen, prometo ser responsable y completar ambas historias.
Espero y esta nueva historia sea de su agrado, espero sus cometarios
Chao