-¡Buuutttccccchhhhhh!, ¡Bájate de ahí! ¡Vas a hacer enojar a mamá!- decía un chico rubio con pecas quien intentaba sin éxito bajar a su hermano de encima de un gigantesco rayo.

El pequeño se paraba de puntitas y extendía un brazo para poder agarrar a su hermano azabache, quien le hacía caras mientras lo evadía desde arriba de la extraña arma que se encontraba en el sótano de una extraña y aparentemente abandonada casa en algún lugar de saltadilla.

-No me pienso bajar, y no me importa lo que el simio diga, esta cosa se ve interesante y estoy decidido a probar qué hace. Además sus inventos siempre terminan explotando ¿qué va a pasar si le hago algo al rayo a fin de cuentas? Sólo adelantaría un suceso en la extraña y cotidiana rutina de nuestra "madre". Además ¿desde cuándo tú te preocupas por lo que le pase a los inventos de ése simio loco? ¿eeeehhhhhh niño estrella?-

-¡Me preocupan desde que Brick nos advirtió que no le estropeáramos el rayo éste!, se ha tomado semanas o meses haciéndolo y lleva casi un año planeando la técnica perfecta de cómo usarlo para que podamos vencer a las bebitas lloronas sin salir VOLÁNDO!-

-Ay ya cálmate, ni que fuera a provocar una catástrofe mundial o crear una bomba nuclear con esto. Además, el simio loco puede construir otro ¿de qué te quejas?-

-¡Nó, no puede porque nos comimos sus planos en el desayuno! ¿Recuerdas?-

-Ah, estaban desabridos.- dijo cambiando de posición a una más relajada - ¡Y eso es culpa del simio por no alimentarnos! ¡De plano como no había nada nos tuvimos que comer esa chatarra junto con las tuercas de su último robot!-

-Ya sé, pero entiende, no quiero que nos pesquen jugando por aquí, ya sabes cómo se pone cuándo arruinamos sus planes ¡y más cuando explotamos a los robots! ¡LA ÚLTIMA VEZ CASI NOS DESCUBREN!- dijo el rubio aun tratando de alcanzarlo.

-¡Ya cálmate! ¿Y por qué no vuelas? ¿Qué?, ¿te dan miedo las alturas?- dijo burlón comenzando a levitar –

*Esto es justo lo que no quería que pasara.*- pensó el rubio comenzando a seguirlo.

-No, pero sé que si empezamos a levitar...empezaremos a volar...- dijo aterrizando en la pared en un intento por alcanzarlo.

El pelinegro le sacó la lengua y agitó sus manos a los lados de su cabeza.

-Lo que provocará que empiece a perseguirte por todo el lugar...- dijo mientras aterrizaba sobre el piso tirando accidentalmente unos tubos de ensayo con el brazo, pero su hermano lo había esquivado otra vez.

-También es probable que empieces a lanzarme rayos, y para vengarme yo te los lance a ti- decía volando mientras esquivaba postes, tuberías y cables para alcanzar a su hermano.

Butch se detuvo y se volteó hacia Boomer quien se detuvo a su vez.

-Ya tenemos casi quince- dijo y le lanzó un rayo antes de reanudar la persecución.

Boomer lo esquivó con facilidad ladeando la cabeza al tiempo que decía.

-Lo cual tal vez nos cause problemas...- dicho esto se fue volando tras su hermano, entonces Butch se dio la vuelta para ver dónde se encontraba su hermano, y en el acto, Boomer lo atrapó en el aire y lo inmovilizó con los brazos, Butch en defensa empezó a removerse y a lanzar rayos y golpes a su capturante.

-¡¿Qué está pasando aquí?!- dijo un chico pelinaranja con gorra roja que se encontraba en el marco de la puerta con las manos en la cintura y una expresión molesta en la cara.

Los dos Rowdys voltearon a ver, pero cuando Butch volteó, accidentalmente disparó un rayo que le dio a la máquina, provocando una explosión que alcanzó a Brick porque estaba en el suelo, pero no a Boomer ni a Butch, ya que ellos seguían flotando en el aire.

Brick aterrizó en el piso de espalda, pero se giró y ahora se encontraba boca abajo, sintió su cuerpo adolorido, y luego una extraña sensación de que su cuerpo se adormecía un poco y unas extrañas cosquillas que venían de su espalda, las cosquillas se elevaron de nivel hasta convertirse en una sensación de que su cuerpo estaba burbujeando por dentro, y luego...desapareció, ya no sentía nada extraño salvo que... tenía una extraña sensación de que tenía una parte de la mente que se le nublaba, como si tuviera niebla y esa niebla no le permitiera tener acceso a esos archivos de su cabeza, y eso lo hacía sentirse de cierta forma... Infantil, como si hubiera regresado el tiempo atrás y tuviera otra vez dos o tres años, tal vez uno. Claro que... en realidad, él nunca tuvo esa edad, pero eso no le importaba , esa sensación de calma y tranquilidad e inocencia, se sentían realmente bien, así que hizo algo que no pensó que haría al ir a regañar a sus hermanos por interrumpir su programa de tiempo completo: sonreír para luego reír divertido.

Boomer y Butch bajaron los brazos que usaron para cubrirse durante la explosión, para enseñar unas muy preocupadas caras que veían lo causado por la explosión y buscaban a su hermano quien seguro les pondría una dura regañiza por lo sucedido. El humo les tapaba la vista por lo cual sólo podían ver el claro desorden que habían provocado, cuando el humo empezó a disiparse, los dos hermanos Rowdy escucharon una risa que los alertó, no era la risa de su hermano o su "madre", si no de un bebé, de un niño chiquito que pudieron ver al disiparse la niebla. Éste tenía un gran parecido con Brick, incluso tenía su pequeña gorrita justo de su tamaño, pelo naranja, y esos ojos rojo sangre tan descriptibles de Brick. Verlo ahí los confundió y preocupó, no sabían qué hacer con él, ahora sí estaban en problemas. Se miraron confundidos y descendieron hacia él.

El niñito al verlos dejó de chuparse las manitas para sonreír y extender los brazos hacia ellos abriendo y cerrando las manos y levantando y bajando los pies sincronizada mente mientras lo veían reírse. Los dos se pararon enfrente de él y se le quedaron viendo. El niño no paraba de extender las manitas hacia ellos pero ellos no hacían caso, se inclinaron para verlo mejor y el niño intentó agarrarles los cabellos, pero aún le quedaba distancia y no pudo hacerlo.

-Butch- dijo Boomer sin cambiar de posición

-¿mh?- respondió sin moverse

-¡ACABAMOS DE CLONAR A BRICK!- gritó alarmado Boomer mientras se enderezaba y se revolvía el pelo con las manos y los ojos cerrados.

El pelinegro se sorprendió por la acción de su hermano pero cuando Boomer empezó a correr en círculos, a él le salió una venita y le dio un zape en la cabeza que lo tumbó al piso, con lo que él se calmó

-¡No seas cabeza hueca Boomer no pudimos haberlo clonado! ¡La máquina era para destruir a las mocosas no para aumentar los problemas duplicándolas!-

-¡Pero ahora es un bebé lo que tenemos enfrente! ¡¿Qué tal si la máquina era para hacer duplicas de ellas bebés para que el simio pudiera criarlas y así vencerlas?!-

¡No seas bruto, al simio se le da pésimo criar niños! y además ¡NO ES TAN LISTO! ¡No creo que eso se le haya ocurrido!-

-¡Pero aquí hay un bebé! ¡Y no está Brick! ¡¿Sugieres entonces que la máquina se haya llevado a Brick a otra dimensión donde es un bebé y nos haya traído al que está ahí?!

-¡Pues podría! ¡No sabemos lo que hacía!-

-¡Porque nos comimos los planos en el desayuno!-

-¡YA LO SÉ! ¡Ya deja de decir eso! ¡Teníamos hambre! ¡Y tú te los comiste también!-

-¡Ih! ¿Y si es una máquina del tiempo? ¿Y lo regresó a cuando era bebé?-

-Nosotros nunca tuvimos tres años cabeza de alcornoque- Mientras discutían, el bebé se había aburrido de jugar con sus pies, así que gateó hasta el pantalón de Boomer , y como todo un pequeño se puso a chupar el pantalón del Rowdy, éste al escuchar los sonidos volteó junto con su hermano azabache hacia abajo, encontrando la escenita que estaba dejando un charco de baba en sus pantalones, al ver esto el menor se alarmó y empezó a armar un escándalo total sacudiendo la pierna como si tuviera un bicho venenoso en ella al tiempo que gritaba aterrado: -¡AAAAAAHHHHHHH!¡ME QUIERE COMER!, ¡ME QUIERE COMER! ¡Quítamelo! ¡Quítamelo! ¡Me quiere comer! ¡Me quiere comer! ¡Me está comiendo! ¡BUTCH AYÚDAMEEEEEEE!-

Butch podría estarse riendo por la escena que su hermano acababa de montar, pero estaba muy ocupado cargando al niño que su hermano había arrojado por los aires con una de sus melodramáticas patadas, quien tenía los ojos llorosos y sus manitas de vuelta a la boca.

-¡No te quiere comer tonto! El niño sólo estaba jugando, ¡Y a ver si tienes más cuidado! ¡Casi mandas al enclenque contra la pared!- dijo molesto el.

-Pero, me estaba comiendo- dijo en un sollozo el rubio de ojos azules

-¡Te estaba chupando!, además el niño no puede comerte porque a diferencia de tu cerebro, tu cuerpo no está hecho de papilla.-

El rubio infló los cachetes ante el ofensivo comentario y el azabache dejó al niño, quien se había resistido al llanto en el piso para poner sus manos en la cintura

-¿Y ahora Qué?- preguntó el pelinegro

-Bueno... ¿Por qué no vamos con Mojo?, él seguro sabe lo que hacía-

El pelinegro abrió los ojos y quitó su cara enojada

-Boomer, acabas de decir la primera idea buena que has dicho en toda tu vida.-

el ojos celestes repitió la acción de hace unos momentos pero el azabache se dio la vuelta antes de que este pudiera decir algo y se puso a caminar , el rubio fue detrás de él, pero antes de irse, se acordaron del bebé, pararon al mismo tiempo y lo voltearon a ver.

-¿Y qué hacemos con él?- preguntó el Rowdy peliamarillo.

El azabache sonrió maléficamente mientras miraba a su hermano, y antes de que se diera cuenta, el azabache ojiverde le empujó la cabeza y el rubio cayó cerca del bebé quien dejó de agarrar la maquinaria para tocarle la mareada cara.

-Tú cuidarás al infante mientras yo le pregunto a mamá que hacía ese rayo, de todas formas, eres pésimo ocultando cosas- dijo divertido el pelinegro.

-¡Eso no es cierto!-

-¿Qué hiciste con mi videojuego?-

Al rubio se le puso la cara blanca y empezó a hablar bajito e indeciso -Ah...yo...eh...lo puse en...¡ah está bien! ¡Ve tú!- Butch sonrió, era muy fácil convencer a su hermano con ese truco, aunque él sabía que lo había roto, pero no le importaba, ya le había dado su merecido.