Antes que nada saludos a todos los que esten interesados en esta hisotria, gracias por su visita.
RESUMEN COMPLETO: Impulsos inconscientes, sentimientos enconrados, pasión, ira, represión, deseo de venganza, amor... aquellas emociones que nos pueden llegar a cegar en un momento dado, aquella mezcla que conforma la fórmula de la vida. Natsuki y Nao conocen aquellas emociones muy bien al igual que las personas que las rodean, ambas comparten departamento en la pequeña ciudad Tsukimori en la isla de Fuuka y mientras Kuga se siente estancada en su vida y lucha con los fantasmas del pásado, Nao se envuelve en una relación destructiva con otra chica de Fuuka. Habrá apariciones de otros personajes como: Shizuru, Tomoe, Mai, Mikoto, entre otros . Esta historia es de género Yuri/Shoujo Ai, es un MaiHime/Otome AU.
FRIENDS?
(CAPÍTULO I)
La noche cubría la pequeña ciudad de Tsukimori en la remota isla de Fuuka, algunos autos pasaban rápidamente iluminando las solitarias siluetas de los transeúntes, era fin de semana y cerca de la avenida principal había muchos jóvenes que se precipitaban emocionados al centro de la ciudad.
Natsuki Kuga, una joven de cabellos largos negro azulados y rostro severo casi inexpresivo caminaba solitaria entre la muchedumbre que era un carnaval de rostros: los típicos compungidos que regresan del trabajo, los maliciosos de los que invierten sus horas libres en molestar al prójimo, entre muchos otros.
Iba fumando un cigarrillo y mientras caminaba solo miraba al frente, odiaba encontrarse con las miradas de los demás extraños que conformaban su mundo.
Caminaba con cierta aprensión, sentía que cada paso que daba era una advertencia de que debía regresar por donde había venido. ¿Cuál era el punto después de todo? ¿Cuál era el punto de ir a ese lugar? El mensaje decía que debía llegar a las 7:30 al Lind Baum aquella cafetería donde en sus años de preparatoria solía conseguir descuentos y comida gratis, claro hasta que su amiga Mai Tokiha renunció.
Eran las 9, ¿seguiría allí? Se había demorado por el simple hecho de pasarse la tarde tirada cavilando si debía ir a verle o no, después de todo sentía como si le debiera algo, así que aceptó y contestó al mensaje con un seco y corto "si".
Por fin dobló la esquina y vio el letrero luminoso y verde con el trébol que rezaba: LIND BAUM. Se acercó a la entrada del local y ahí la vio através del cristal de la puerta de entrada: estaba sentada en una mesa cerca de las ventanas de la esquina izquierda, su única compañía: una taza de té, no podía ver su rostro solo la cascada de cabello castaño. ¿Habría cambiado?
Entró al local, una mesera le dio la bienvenida y quiso asignarle un lugar, pero ella contestó que se había quedado de ver con la chica de la mesa de la esquina.
Kuga contempló el lugar, tenía tiempo que no iba a comer allí: la decoración era mas melosa y las meseras cada vez llevaban la falda mas corta, había varias parejas y grupos de amigos sentados a la mesa, se fijó en un grupillo de tres chicas que le lanzaban miradas despectivas e impertinentes tenían aquella pinta y el aire hipócrita de la clase acomodada.
Al caminar hacía la mesa donde yacía el objeto de su visita pensó fugazmente en las miradas criticas de aquellas chicas y se percató de que su chaqueta de piel negra estaba algo sucia, sus vaqueros rasgados y su blusa blanca le daban un aire rudo y callejero, se preocupó por un momento por su aspecto ¿Qué pensará cuando me vea? Espantó aquellas ideas y contuvo las ganas de salir corriendo del lugar, se sentó frente a la chica castaña quien no dejaba de mirar afuera como si no se hubiera percatado de su llegada.
-Shizuru – mas que un llamado su voz ronca sonó como una pregunta confusa. La aludida sonrió, ah pero Kuga sabía que esa sonrisa era triste.
-Natsuki, llegas tarde.
-Lo siento, Nao me dio la lata y la tuve que llevar a la clínica para que visitará a su madre, el departamento estaba hecho un desastre y yo…- La risa cantarina de Shizuru interrumpió sus palabras.
-Natsuki no ha cambiado.
Kuga se molestó un poco por aquel comentario, aunque Shizuru no lo dijera en mal sentido para ella era como un recordatorio de su monótona vida llena de cerveza, cigarrillos y ocio; si Kuga pudiera escoger un adjetivo para su vida sería "mediocre".
Contempló brevemente a Shizuru con el seño fruncido: Dios esa expresión enigmática no cambiaba, tal vez nunca podría leer totalmente que había detrás de esas facciones perfectas y esa mirada juguetona. Hacía dos años que no la veía y le parecía que sus facciones habían madurado un poco, tenía que aceptar que si antes era atractiva ahora era simplemente hermosa.
-Tu tampoco –dijo Kuga, los pómulos ahora ligeramente mas realzados de Shizuru enrojecieron un poco y la piel de sus mejillas se arrugó en una sincera sonrisa.
Hubo un silencio incomodo, ¿De qué podías hablar con la chica que en algún tiempo fue tu mejor amiga y terminó enamorándose de ti y declarándose, aquella chica que despreciaste de una manera egoísta y que dejaste ir profundamente herida?
-¿Cómo están todos? –preguntó Shizuru adivinando lo que la morena debía estar pensando. Kuga exhaló como si hubiera retenido todo ese tiempo el aire debido a una gran tensión e internamente agradeció que el tema no tuviera que ver con lo que más temía y como un suspiro después de retener el aire mucho tiempo, las palabras comenzaron a fluir de su boca.
-Supongo que bien –dijo Kuga -, cuando salí de la preparatoria viví un tiempo con Mai y Mikoto, ellas ahora viven con Tate en los departamentos cerca del centro, diablos parecen una familia torcida. Mai y Tate pelean casi a diario como cuando estábamos en Fuuka Gakuen y Mikoto simplemente es la misma niña de siempre es como si fuera su hija, Mai suele hablarme de vez en cuando para darme una lista de las cosas que odia de Tate –Kuga frunció el seño y Shizuru rió -, una vez me dijo que si quería podía vivir con ellos, mierda ni porqué estuviera en la ruina lo haría, preferiría compartir una caja de cartón en la calle con Nao.
-Mai y Tate – se quedó pensativa Shizuru -, no me imaginé que terminarían viviendo juntos, el amor preparatoriano es tan fugaz que todas las ideas e ilusiones suelen quedarse solo en eso…pero ellos, me alegro en verdad -.
Natsuki percibió algo de melancolía en Shizuru, esta vez no sintió incomodidad ni miedo simplemente algo extraño que decidió ignorar, tal vez ella también sentía nostalgia por esos días.
-¿Y Yuuki-san?
-Ah claro ella, pues como ya sabes llevo viviendo año y medio con Nao, compartimos gastos en el departamento que me dejó mi madre –dijo Kuga algo irritada como si recordara algo que le molestaba profundamente -, entablamos una especie de amistad después de encontrarnos seguido en el Rorschach, terminé llevándola a visitar a su madre de vez en cuando y por último decidimos apoyarnos… las dos tenemos una vida difícil y pocos ingresos así que lo que hicimos fue: "si no puedes con el enemigo, únetele".
-Natsuki está muy platicadora el día de hoy –dijo Shizuru, le dio un sorbo a su té -, ¿será porque está muy emocionada de verme? -. Natsuki se sonrojó, Dios sabe que Shizuru había extrañado esa imagen por mucho tiempo.
-Bueno basta de hablar de mí –dijo Natsuki -, ¿Qué es de tu vida Shizuru? -. La aludida se quedó pensativa y suspiró.
-La vida universitaria me ha absorbido durante todo este tiempo –confesó -, estudio administración en la universidad de Tokyo, pero he venido a quedarme medio año aquí en Fuuka, pedí una suspensión temporal.
A Natsuki le dio un vuelco el corazón: ¡Shizuru de vuelta! No sabía si emocionarse o enfadarse, no sabía que sentir, debía aceptar que le alegraba estar ahí charlando con su amiga de nuevo, pero no sabía que hacer si aquella chica iba a estar ahí en la misma ciudad que ella. Sería como estar evocando viejos fantasmas del pasado todo el tiempo.
-Oh –fue lo único que Kuga pudo pronunciar.
-Me voy a quedar en casa de Reito, por si un día decides visitarnos.
-¿Reito? – Dijo Natsuki mas para si misma -¿Tu sola con el?
-¿Natsuki está celosa?
-Diablos, no, no es eso –dijo Natsuki -, pero ese tipo nunca me ha dado buena espina.
-No te preocupes también me acompaña una amiga que conocí en Tokyo, va en la misma clase que yo, nos quedaremos a adelantar unos proyectos.
-¿Una amiga? –Kuga pensó que todo eso si que era demasiada información para un día, no mas bien para una hora y media de charla ¿pero qué diablos le importaba lo que Shizuru hiciera de su vida después de todo?
-Así es –dijo Shizuru divertida y confundida por la reacción de Natsuki.
Después de otros minutos de charla Natsuki aceptó por fin que la mesera le tomará la orden: solo pidió una cerveza.
El resto de la conversación lo acaparó un sermón por parte de Shizuru acerca de su dieta de cerveza, cigarros y mayonesa; le había dicho casi lo mismo que Mai.
Hablaron de otros viejos compañeros y amigos de Fuuka: Midori había regresado de su excursión arqueológica con el tal profesor del cual estaba enamorada, las cosas no habían salido bien y había regresado a su costumbre de embriagarse junto con Youko quién aún trabajaba como enfermera para el Fuuka Gakuen.
Cuando terminó su velada en el Lind Baum, se despidieron con un distante "hasta pronto". Mientras caminaba de regreso a su apartamento, Kuga sintió que el aire nocturno era más denso, sintió una opresión en el pecho y no sabía porqué.
Lo único que pensaba era como la gente que podía haber llegado a ser tan cercana en algún tiempo podía romper el vínculo y tratarse como simples conocidos. Ella había roto el vínculo. ¿Sentía nostalgia, o un vago miedo de que la historia se repitiera? No lo sabía.
Llegó al complejo de apartamentos: se encontraban en una zona poco frecuentada y solitaria de mala pinta; el edificio era gris de pintura carcomida, un estruendo provenía de uno de los pisos más altos. Kuga frunció el entrecejo y subió con rapidez hasta su apartamento…de ahí venía el escándalo.
Tomó aire y exhaló con pesadez: Nao había hecho otra fiesta.
