Prólogo.

Nos encontramos en la región de Kanto, Japón, donde Satsuki Kiryuin y Ryuko Matoi decidieron vivir, pero obviamente en la mansión Kiryuin. Mako y su familia vivían no muy lejos, pero más bien en una ciudad, en una casa corriente, pero muuucho más grande que su antigua casa obviamente. Han estado viviendo unas vidas normales, las cuales serán los primeros capítulos.

Ya hace un año de el incidente. Ryuko ya tenía dieciocho, al igual que su amiga Mako, y Satsuki diecinueve. No toda la Biofibra se encontraban destruidas. En lo más profundo del mar, justo donde se hundió en instituto Honnouji, una pequeña parte de la Biofibra madre seguía viva, y dio lugar al renacimiento de una antigua y molesta enemiga. Obviamente, no pueden vencerla solas. Shiro Iori, gracias al cuaderno de notas de Isshin Matoi, está intentando recrear al Kamui Junketsu, pero algo cambia un día. Ryuko se reencuentra con un viejo amigo. Un amigo que siempre se pondrá.